Entre Libros

5. Tiempo II

Capítulo 5

Tiempo II.

La siguiente semana rubí va como acostumbraba, luego de una semana de no haber podido ir, se siente ansiosa, nerviosa y con unos deseos incontrolables de volver a encontrarse con aquella chica de rulitos, llega temprano a la librería, abre una de las puertas y entra al lugar.

(se imagina a rulitos parada frente a los estantes como acostumbra a verla siempre que llegaba, como revisaba uno a uno cada libro para ponerlo en su lugar, y como voltea hacia rubí y le regala esa sonrisa que tiene reservada para ella)

Pero una voz la saca de sus pensamientos

- Hola, bienvenida, pasa por favor.

A diferencia de sus tantas visitas a la tienda esta vez la recibe otra chica, una chica delgada, de cabello claro y liso, ojos verde oscuro, quien le regala una sonrisa amable que la hace recordar a alguien más, le da la bienvenida y la hace pasar, esta chica le dice que si necesita algo solo le avise, (rubí piensa en que quizás aun no llega la chica de rulitos), así que mientras espera que llegue decide dar unas pequeñas caminatas dentro de la librería, por primera vez se toma el tiempo de recorrer cada pasillo, toma uno que otro libro que le llama la atención por los colores, o tipo de portada, busca una mesa, toma asiento y pide un café, cosa que nunca hizo desde que encontró la librería y se arrepiente de no haber disfrutado antes de este maravilloso brebaje, por que se acaba de dar cuenta que es la segunda cosa que le encanta de este lugar, ya que sin duda alguna lo primero será siempre su chica de rulos, piensa que desde ahora tomara un café a diario en este lugar y así podrá pasar un tiempo un poco mas largo en la librería, y por qué no, quizás invitar un café a la rizada chica, pasada la hora y sin tener noticias de su rulitos, es que se acerca a aquella chica que la recibió y que se encuentra haciendo lo que hacia rulitos, ordenando los libros.

- Hola, disculpa te puedo molestar un poco?

- Si claro, dime, que necesitas? te puedo ayudar en algo? (le da una sonrisa amable)

(rubí sonríe por que recuerda perfectamente que así la recibió el primer día Rulitos)

- Aquí hay una chica de rulitos muy linda, que siempre es la que me atiende, vendrá a trabajar hoy?, o es su día libre?.

(los ojos de aquella chica se humedecen, se cristalizan y unas cuantas lagrimas amenazan con salir, mira a rubí buscando la manera de dar una respuesta adecuada a su pregunta)

- Eh Bueno, sabes, ella es mi hermana.
(le sonríe)
y veo que no te has enterado, pero la semana pasado mantuvimos cerrado por duelo, recién hoy volvimos a abrir y mantener con vida este lugar.

- Oh entiendo, lamento mucho lo que me comentas, claro la semana pasada yo no pude venir por pequeños problemas en el trabajo ya sabes, entonces tu hermana... no vendrá esta semana?

- (suspira) no, no me entiendes, mi hermana ya no podrá venir más
(ya era imposible contener sus lagrimas), mi hermana lamentablemente falleció la semana pasada, ella venia luchando con un cáncer que ya estaba bastante avanzado, su ultima voluntad era pasar el ultimo mes de vida acá, ella quería disfrutar y hacer lo que amaba hasta el último de sus días, ella no quería irse sin haber dado lo mejor de ella a este lugar, a sus clientes y amigos que venían cada día, ella quería dejarles el mejor recuerdo, y por eso este ultimo mes pasaba la mayor parte de tiempo aquí, entre libros, siempre le gusto conocer nuevas caras, ver gente que no tenia nada que ver con todo esto (lo dice abriendo sus brazos mostrando toda la tienda) y ver como cambiaban de opinión y terminaban enamorándose de este lugar y de los libros, ella decía que acá no solo se viene a leer libros, acá podías leer a las personas, podías leer gestos, podías leer miradas, eso a ella le fascinaba, decía que cuando dos miradas se encontraban se estaban leyendo mutuamente y que para ella era el mejor panorama, ver como en este lugar se escribían nuevas historias.

- Eso fue lo que me enamoró a mi también, ver la dedicación, la pasión y el amor con el que mi hermana cuidaba este lugar, ella me heredo el amor por los libros, y a apreciar el arte de leer todo lo que pasa dentro de estas cuatro paredes, un día ella me dijo: José, nos leemos? y yo no entendí a que se refería, hasta que me encontré con su mirada y pude leer en ella lo que nadie mas puede leer entre dos seres que se aman. Ella me enseño a leer mucho más allá de los libros.

Rubí queda paralizada ante las palabras de la chica, y lagrimas incontrolables comienzan a salir, trata de procesar todo lo que sus oídos acaban de escuchar, trata de entender por que tardo tanto tiempo en comprender lo que aquella chica de rulos estaba pasando, y como no supo leer entre líneas, los gestos, las miradas de aquella chica y lo que le dijo aquel último sábado que rubí pudo ir a la librería.

Flashback..

(La chica de rulos como acostumbraba le envolvió una vez más el libro que rubí eligió aquel día, se lo pasa, sus ojos se encuentran y rubí pudo ver algo más, un brillo especial, una mirada diferente, que la hizo estremecer, no podía ni quería dejar de recibir aquella mirada que por momentos la hacia sentir única y especial)

- Espera, déjame acompañarte hasta la puerta, (le abre la puerta, y la deja salir primero), ¿Puedo acompañarte hasta tú auto? Sería la única vez que te lo pido (levanta sus dedos) lo prometo, solo me gustaría hacerte compañía por un ratito, ya que siempre vienes, llevas un libro y te vas a toda velocidad, no te ofendas, pero pareciera que siempre andas apurada o arrancando de algo o alguien, sabes...

"el tiempo aveces pasa muy rápido, y se nos va como el agua entre los dedos" deberías tomarte una pausa y apreciar todo lo que te rodea, por qué llegará un día que ya no podrás disfrutar y cuando eso pase, ya no hay vuelta atrás, vive.

(Llegan al auto de rubí, y la chica de rulos le abre la puerta para que pueda subir)

- Bueno, fue un placer poder acompañarte aúnque sea un momento, aúnque haya sido un pequeño trayecto de tu vida, hasta pronto (le da una sonrisa) 

Rubí se queda mirando a la chica mientras se devuelve a la tienda, está voltea y con un movimiento de mano se despide y le grita: vive la vida, cada día, como si fuese el último día.

Fin del flashback

- ¿Disculpa, estas bien? espérame que te traigo un vaso de agua..

- Toma aquí tienes tómatelo, te traje esto también. (le pasa unos pañuelos)
te cuento algo mas?
(rubí solo asiente).

- Mi hermana dijo que tu vendrías, apenas te vi supe que eras tu, ella solo me dijo que una chica castaña muy bonita vendría, y que pasado cierto tiempo acá adentro, preguntarías por ella, por que solo ella era quien te atendía, también nos dejo instrucciones de como debíamos atenderte, pero lo que mas me encargo fue que te entregara esto.

(le extiende la mano y le pasa un sobre sellado que dice "para la chica castaña mas hermosa que mis ojos han visto")

Rubí recibe el sobre, le da una mirada a la chica y la abraza, un abrazo donde ella trata de darle a entender que entiende su dolor, donde trata de decirle cuanto lamenta su perdida, ambas se funden en ese abrazo contenedor, ambas lloran, ambas se sostienen.

La chica le dice que debe seguir, que la vida sigue y que la librería en honor a su hermana debe seguir en pie tal como a ella le hubiese gustado.
(le da una sonrisa que solo trae el recuerdo de su rizada chica a su memoria).

Rubí toma sus cosas, y se dispone a salir cuando una mano la detiene.
(Era la hermana de rulitos)

- No dejes de venir, este lugar siempre estará aquí para ti, vuelve pronto.
(Rubí le da una sonrisa con dolor y asiente)

Sale de la tienda, sube a su auto y maneja hasta el único lugar que puede ser su refugio en estos momentos..

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Rubí no sabe como llego a su hogar, entra, cierra la puerta y se dirige a su habitación, trata de procesar lo sucedido, trata de contenerse, pero ya no puede más, no aguanta, y comienza a llorar como no pudo hacerlo al enterarse de aquella noticia que la quebró por dentro, siente dolor, un dolor intenso, siente que le quema por dentro, se derrumba en su cama buscando consuelo..

Se permite llorar y llora como nunca antes lo había hecho..