Jisung estaba tirado sobre la alfombra de la sala, brazos y piernas extendidas cual estrella de mar. Había bebido con Hyunjin y Changbin, mientras que los demás sólo tomaron Coca-Cola o agua. Jisung bebió como si no hubiera un mañana y ahora estaba un poco ausente, afortunadamente no vomitó.
Se incorporó en sus cuatro extremidades y gateó hasta el pasillo, las puertas de las habitaciones estaban abiertas en su mayoría por lo que, escaneando que no hubiera alguien despierto, ingresó al primer cuarto que vio.
Minho estaba recostado sobre su cama, durmiendo boca abajo. Jeongin en la otra cama, de lado, con un peluche entre sus brazos.
Jisung miró entre ambos y finalmente se decidió a ir con Minho, pues él estaba solito.
―Mmm... Miinoo ―canturreó Jisung en un tono bajo, sin percatarse de lo aterrador que estaba luciendo en ese momento, con su mirada perdida y su voz arrastrada.
Minho se removió en la cama y lentamente abrió los ojos; se sobresaltó tras ver una figura encorvada junto a su cama y pegó un grito que hizo que Jeongin se sentara de súbito en su propia cama. Jisung chilló cayéndose hacia atrás.
―Hani... ―Minho llevó una mano a su pecho donde su corazón agitado latía, tratando de calmarse al reconocer la voz amortiguada de Jisung―. Los veinte te pegan duro.
Jeongin encendió la luz y miró al par con los ojos hinchados.
Jisung hizo pucheros y sus ojos se llenaron de lágrimas.
―¿Mino, puedo domir con tú? ―preguntó Jisung señalando el espacio vacío junto a Minho, donde podría caber perfectamente―. Yo solo, tú solo...
Minho ahogó una risilla al escuchar la gramática tan errada de Jisung y terminó asintiendo con la cabeza. Jisung daba cierta ternura y patearía su pecho de la burla al día siguiente, pero primero lo mimaría un poco.
―Acuéstate, pero si me abrazas... ―advirtió tratando de sonar rudo, pero sólo causó una mirada confusa y tierna― te tiraré de la cama.
Jisung le dio una sonrisa boba y trepó por la cama, Minho abrió las sábanas para él y Jisung se abrazó automáticamente a su cintura.
―No le demos alcohol de nuevo ―rio Jeongin tomándole fotografías al mayor, para luego apagar la luz y volver a dormir.
Pocos minutos después, Jisung comenzó a quitarse la ropa y Minho sólo lo miró completamente anonadado. Le dio una sonrisa apenada a Jisung, tratando de quitar las manos ajenas de su vientre y pecho.
―Hani, no te ofendas, pero no me atraen las ardillas peludas y olorosas ―gruñó divertido, jugando con las uñas de Jisung de la mano que yacía sobre su pecho.
Jisung se removió soltando un exabrupto y Minho guardó silencio. Le gustaba molestar al menor, tocarle el trasero y bromear, pero... esto era extraño.
(...)
Minho despertó, removiéndose algo incómodo y atrapado. Cuando abrió los ojos y vio dos pechos en su cara se asustó tanto que casi gritó, sin embargo, el rostro adormilado de Jisung hizo que Minho volviera a la realidad.
Minho casi olvidaba que los pectorales de Jisung eran tan... grandes, como dos senos apunto de estallar. Recostado de lado y con los brazos juntos, realmente lucían como senos.
―Hannah ―llamó Minho, bostezando.
Jisung gruñó y con las cejas fruncidas, enterró la cara en la axila de Minho.
―Me haces cosquillas... ―Minho ahogó la risa y llevó su mano hasta el rostro del menor, con su índice contorneó su pequeña nariz y sonrió―. Hani, despierta.
Jisung no hizo caso, tan sólo frotó su nariz contra la axila de Minho y sonrió adormecido.
―¿Quién gritó anoche...?
Dos personas entraron a la habitación luego de tocar, arrastrando sus pies.
Hyunjin se lanzó a la cama de Jeongin y ocupó el lugar del peluche. Eran las siete de la madrugada, ni siquiera debían levantarse todavía.
―Yo, este de aquí me asustó. ―Minho respondió a la pregunta de Felix señalando a Jisung―. ¿Alguien se lo quiere llevar? Está desnudo y me está tocando el culo. Yo soy el que toca los culos, no al revés.
Felix ahogó una risa y se acercó para comprobar que las palabras de Minho fueran ciertas.
―Vaya... Chan hyung habría estado muy feliz si Hani hubiera ido con él... ―comentó Felix―. ¿En serio quieres que me lo lleve? ―alzó una ceja, colocando ambas manos sobre la manta para tomar a Jisung en brazos.
Minho miró las delicadas facciones de Jisung y se lo pensó. La idea de que Jisung abrazara a Chan volcó su corazón sobre hielo.
―Nah.
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Quiero abrir un libro de oneshots minsung aunque tenga muchos pendientes, pero estoy tentadísimaaaa
