ALLXTAKEMICHIFEM

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Al escuchar esas palabras no pudo evitar sentir las lágrimas acumularse en sus ojos y por un momento sintió que iba a caer, pero no podía hacerlo debía verse fuerte enfrente de Mikey y Mitsuya quienes seguro estaban sufriendo más que ella, el doctor pudo captar la atmósfera enseguida.

-Lamento hacer la pausa estoy exhausto no era mi intención espantarlos, lo que quería decir es que lamento informarles que su amigo tendrá que quedarse un tiempo en el hospital y eso puede salir costoso-cuando escucharon esas palabras todos suspiraron aliviados, se habían llevado un buen susto por parte del doctor pero lo entendian, habían sido muchas horas de operación.

-Muchas gracias. ¿A qué hora podemos visitarlo?-pregunto la chica.

-Recomiendo que vengan mañana, en este instante está siendo trasladado a una habitación y sigue inconsciente por la anestesia-el doctor se retiro a descansar y Mikey decidió quedarse en el hospital con Draken, Mitsuya también quería hacerlo pero tenía que ir a casa, sus hermanas lo estaban esperando.

-Bien, yo también me tengo que ir, me están esperando afuera-Takemichi se retiro no sin antes despedirse, al salir del hospital vio a Benkei recargado en su moto esperándola-¡Arashi! Ya estoy aquí-su amigo volteo a verla inspeccionandola de arriba hacia abajo para comprobar sus heridas.

-Takemichi, debes ser más cuidadosa contigo misma, tienes una puñalada en la mano y por solo pensar en los demás no te fijas en ti, eso es algo que me preocupa de ti, no está mal pensar en uno mismo-se acercó y le tomó la mano con cuidado-vamos a casa, debemos desinfectar esa herida.

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-¡Ken, vine a visitarte!-Takemichi saliendo de la escuela fue a visitar a Draken, decidió llevarle un regalo no quería comprar nada por flojera a estar de tienda en tienda buscando algo para regalar, así que en la noche después de que Benkei se fuera a su casa puso manos a la obra y empezó a hornear unas galletas, las metió en una bolsita de celofán y metió también un pañuelo que había bordado hace un tiempo, estaba aburrida sin nada que hacer y se puso a ver tutoriales de bordado asi es como descubrio que las manualidades desetresaban mucho-te traje un regalo, no es el mejor y me da un poco de vergüenza pero quería hacerlo por mi misma-saco las galletas y se las entrego, Draken al ver el pañuelo lo saco de la bolsita y contuvo la risa-¿Qué es tan gracioso?

-Este bordado es feo de cojones-dijo extendio el pañuelo, a la rubia se le subieron los colores a la cara había echado el equivocado, el que Draken tenia en sus manos es el primer bordado que había echo en su vida, había tratado de hacer una rana pero había quedado chueca, con ojos deformes, diferentes tonos de verde, puntadas mal echas todo en el bordado estaba mal.

-DAME ESO, ESE NO ERA EL QUE TE IBA A DAR-trato de quitárselo pero no pudo.

-Ni hablar es mio ahora-dijo escondiéndo el pañuelo para que no se lo quitaran, el pañuelo había sido una de las cosas más jodidamente tiernas que había visto y también una de las más feas-Oye, cambiando de tema, toma-le extendió una bolsa con un uniforme de la ToMan.

-¿Qué es esto?-pregunto curiosa, no sabía el porque le estaba dando eso.

-Mikey quiere que lo tengas, y yo también, salvaste a la ToMan salvandonos a Pah y a mi, muchas gracias Takemicchi.

-No tienes que agradecerme nada, no creo merecer esto, pero prometo cuidarlo con mi vida, por cierto. ¿Dónde esta Mikey?

-En la azotea, deberías ir a verlo.

-Si, yo también lo creo, nos vemos luego Ken-salió del cuarto y se dirigió a la parte de arriba del hospital, al llegar pudo observar a Mikey dormido, se acercó sin hacer ruido y se sentó en un espacio que estaba vacío esperando a que despierte-bien, creo que dormiré también.

-¿De verdad piensas dormir en una azotea? Eres tonto.

-Mira quien habla, tú estabas durmiendo aquí.

-Eso no es verdad, simplemente me relajaba, pero llego un enano mugroso a hacer ruido.

-Enano tú

-No sigamos que te dejo en el hospital a ti también-dijo Mikey en tono burlón-gracias.

-Que asco, no sueltes un gracias tan de repente.

-No, ya hablando enserió gracias, nos salvaste de nuevo, me alegro que hayas llegado a mi vida.

-Me alegro yo también que ustedes llegaran a la mia, no debes que agradecer nada-Takemichi miro hacia enfrente cerrando los ojos disfrutando del viento con una sonrisa, estaba feliz en estos momentos, todo esto era observado por el comandante de la ToMan, se quedó embobado mirando la cara de Takemichi, hasta que esta abrió los ojos y lo miro, sintió que lo habían cachado como si hubiera echo una travesura o algo así, esto hizo que se sonrojara y se levantara rápidamente.

-Kenchin debe extrañarme, me voy,  nos vemos luego Takemicchi-nisiquiera dejo que la rubia le contestara y se fue.

-Que raro, bueno que más da, vamonos a casa-se levantó y se retiro del hospital, caminaba tranquilamente por las calles, era relajante caminar así se distraía de sus preocupaciones, pero como la vida de Hanagaki Takemichi siempre está llena de emociones algo tuvo que suceder.

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En las afueras de la ciudad se encontraba un pequeño grupo de 5 personas entre ellas se encontraba Takemichi, en estos instantes estaba preparándose para una carrera.

-Yo me llevare la victoria-dijo un chico extraño, desde que lo encontró en la tarde no paraba de sonreír y su cabello era muy esponjoso de un color como rosa anaranjado, iba acompañado de quien parecía su hermano pero en vez de estar sonriendo todo el rato estaba enojado su cabello era como el de su hermano pero en tono azul, ella había sido llevada por ese par de gemelos.

-Oye, nisiquiera se sus nombre.

-Somos los hermanos Kawata, yo soy Nahoya y él es Souta aunque en las calles nos conocen como Smiley y Angry.

-Creo saber el porque los llaman así-hablo algo apenada, fue con ellos sin saber sus nombres

-Oigan ustedes trío de andrajosos más les vale cumplir cuando pierdan-Takemichi se puso pálida se había metido en un lugar peligroso con una apuesta peligrosa.

-Maldición. ¿Por qué me meto donde no me llaman?

Continuará...