Todo hombre que crea en unsolo Dios sabrá que lo más cercano a un segundo, es el momento en que dos almasempiezan a alejarse, tras estar cohesionadas en un mismo frenesí. El número seis no es másque un capricho del conteo de ésta travesía. Porque el seis es un númeroimperfecto, pero seis minutos es el tiempo perfecto para caer del cielo, a lomás profundo y gélido del uno. Por eso es que ahora, sintiendo el colapsar denuestra conexión, presente entre los seis centímetros de separación entrenuestros labios, puedo ver claramente que no habrá un atardecer soleado. Hoy lanoche pretende entrar oscura e incierta, basta y peligrosa entre más en ella teadentres. Aún el pensador más ensimismado, podría prever claramente la nubegris que empieza a formarse en el firmamento de tu mirada, donde antes viluceros cristalinos. Y por la peculiaridad que tiene la lluvia, siempre llega atodas partes a excepción del desierto que no soy. Pero de cierto tiene todo elpensamiento de que una tormenta se avecina, y las primeras gotas caen de formaclara sobre mis pies. Ahora, más que nunca antes en la vida, diluviaincesantemente una tempestad pavorosa, formada silenciosamente en mi costado, yque arremolina de forma cruel todos los recuerdos y dudas. No paran de caer lasgotas que, pese a ser lentas, han sido ya al menos seis. No sufras ya más,dulce tesoro, tanto como sufro yo viendo pasar por tus ojos los últimos rastrosde lo que será un fuimos. He visto la inmensidad del mar, maravillado por susencillez y al mismo tiempo, el poder que oculta. Así de poderosa es lasoledad, que te arrastra a lo más profundo y frio de sí misma. Todo comienzacon la lluvia. La tristeza del hombre no es más que el invierno del alma;naturalmente entonces, nuestro radiante verano ha de finalizar, con este últimoviaje. Y no puede haber, a pesar de mi pesar, un mejor último viaje que este:Donde estoy de frente al mar, viéndolo arrastrar y devolver la pena. Donde elocéano que empieza a formarse frente a mis pies.
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Ocho Minutos de Viaje a Través del "Nos"
Poesía"Ocho minutos le bastan a un nosotros para pasar a ser un tu y yo. Juntos ahora que estamos más separados que nunca. Por tanto, hemos de recordar este viaje por el resto de nuestras vidas, y alguno de los dos llegase a cumplir 80 años, seguiría reco...
