Sigue las reglas

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Me levante de golpe ante el sonido de una alarma.

– ¡SIMISAGE DESPIERTA!

– ¿Qué sucede? – Dijo Simisage mientras bostezaba, se nota que estaba durmiendo a gusto.

– ¿¡QUÉ ES ESA ALARMA!?

Simisage no me respondió, simplemente se limitó a levantarse y tomar mi mano para salir de la habitación.

– S-Simisage, ¿Qué haces?

Sorpresivamente apenas salimos de la caseta la molesta alarma se detuvo.

– ¿Cómo supiste que eso funcionaría? – Pregunte de forma curiosa, estoy algo celoso de que el entrenador de Simisage le dijo toda la información acerca de este lugar mientras que el mío solo se limitó a dejarme.

– Esa es la alarma de la mañana, para desactivarla solo tienes que salir de tu cuarto para ir a desayunar – dijo con los ojos entrecerrados.

Cerca de donde estábamos vi un árbol con unas cuantas bayas aranja, me acerqué al árbol, arranqué dos bayas de este y le ofrecí una a Simisage.

– Ten una baya para desayunar

– Gracias, pero, prefiero ir al comedor, ya sabes, para conocer al resto de Pokémon aquí – ¿Un comedor? Este lugar enserio tiene de todo.

– ¿Puedo ir contigo?

– Seguro, pero adelántate, debo arreglar mi hermoso cabello – Dijo con una sonrisa vanidosa.

Aunque odio admitirlo, el cabello de Simisage si se ve increíble.

– Ok, te veo en el comedor

– De acuerdo

Y con eso Simisage entro de vuelta a la caseta.

Empecé a caminar por la densa selva artificial – Se ve tan realista – Pensé.

Pero a mitad del camino me di cuenta de algo importante.

– Espera... ¿¡CÓMO SE LLEGA AL COMEDOR!?

20 minutos después...

Seguía caminando por el hábitat tratando de encontrar el comedor o a alguien que me pueda dar direcciones – Debí haber esperado a Simisage

30 minutos después...

Mientras más pasaba el tiempo, más me sentía perdido, el hambre de no haber desayunado empezaba a golpearme y no veía a ningún Pokémon en ningún lado – ¿¡QUÉ TAN GRANDE ES ESTE LUGAR!? – Después de años de caminar, finalmente me topé con algo, pero no era lo que me esperaba.

Hábitat No. 07 – Sección B

Huh, curioso – Era un gran muro que delimitaba el hábitat el cual tenía una puerta, la cual sorpresivamente no estaba bloqueada – ¿Debería entrar? – Pensé, al principio estaba algo escéptico pues se no taba que no debería entrar, pero luego...

– ¿Hola, hay alguien ahí? – Dijo una voz del otro lado del muro, me quedé paralizado – ¿Debería responder? ¿Y si es alguien peligroso? – No me dio tiempo para reaccionar pues abrió la puerta.

– Oh, ¡Hola! – Dijo el gran y fornido Pokémon con una gran sonrisa.

– H-hola, l-lamento la molestia y-ya me iba – Me apresure para intentar irme, pero de repente mi estomago rujió – TRAICIONERO

– Oh, ¿tienes hambre?, ven, tengo algunas bayas en mi caseta

Al principio no sabía si aceptar la oferta, pero luego tomo mi mano permitiéndome verlo más claramente – Wow, es muy guapo, y sus brazos... ¡N-NO!, en que estas pensando – Mi corazón se aceleró e inconscientemente me sonrojé un poco.

– Vamos, pero hay que tener cuidado, no se supone que entres a mi hábitat

Después de pasar la puerta, pude ver lo hermoso que realmente era el lugar. Había pequeños lagos y arroyos que decoraban el lugar.

– T-u hábitat es muy bella

– Lo sé, me agrada que se hayan molestado en adecuarla para Pokémon tipo agua

– Oye, a propósito, no nos hemos presentado, me llamo Sceptile, soy nuevo en el experimento

– Mucho gusto Sceptile, soy Swampert, espero que la pases bien aquí – Me dijo con una dulce sonrisa.

Swampert es bastante dulce, y eso que apenas lo conozco, me encantaría poder conocerlo más a fondo.

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Palabras (599)

El experimento (Swampert x Sceptile)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora