¡Dicen que las historias de amor siempre terminan bien, qué ironía!!…
Crecemos viendo Disney cómo el modelo a seguir, soñando que el príncipe azul siempre llega a rescatarte, pero la realidad supera la ficción y eso estoy más que segura.
A mi edad jamás pensé en obsesionarme con una persona, hasta llegar al punto de preguntarme que es lo que estaría haciendo, ver su foto reflejada en la pantalla de mi celular y el sueño trunco de saber que no sea mío, o casi mío, por qué mentalmente sé que él solamente me ama a mí como yo a él.
Nadie podría o puede darle el amor que yo tengo, porque para mí es lo más sano y lógico del planeta, yo soy enteramente de él y él me pertenece, ecuación simple.
Lo Irónico es que vivimos en dos continentes diferentes, pero no me fue difícil localizar todo lo que quería saber de él, su dirección, sus familiares y porque no sus gustos con las mujeres, investigué a cada una, con la sola certeza que jamás lo hayan lastimado, me sentía como una heroína a punto de defenderlo aun sin saber a ciencia cierta si lo que leía en esos informes era la verdad, pero mi raciocinio no era el adecuado, solo sé que donde detectaba que él era una persona lastimada, cruzaría el océano nadando para encargarme de esa persona si esto era así.
Hasta donde llega el cerebro humano, cuando está enamorado que no tiene una lógica o aún peor no razona claramente, me sentía en deuda con él, por salvarme según yo de mi desosiego y por revivir las pasiones que creía que estaban muertas.
Así que sin dudarlo me cree unos perfiles, maneje mi VPN y todo lo que creía necesario y entre al mundo oculto de las personas que me llevarían directo a él.
Pasado un tiempo logré dominar el idioma, un avance para mí y un gran logro sin dudas. Qué submundo interesante son las sasaengs y qué intenso tráfico de información manejan, lo pedís, lo tenés, día, fecha, horarios, lugares donde concurre, su agenda completa, todo estaba a la orden de eso, solo debía hacer el depósito y por arte de magia eso llegaba a mi casilla de correo.
Me debatía si era mejor Corea o esperar algún bendito tour que pasará y mi país fuera el elegido, no era muy seguro, ya que la crisis económica de mi país, solo me tenía trabajando en la laptop y yo estaba 24/7 sin dejar de pensar en él.
Había Sido descuidada en el trabajo, por lo que en estos momentos tenía un departamento para mí sola, más tiempo libre y una liquidación más que prominente para gastar a mi antojo.
Por qué es tan malo pensar en él?, si cuando ves un vídeo o una presentación suya, tu cuerpo reacciona involuntariamente a la pasión desenfrenada que tienes, que es la obsesión? Alguien lo sabe, porque hasta ahora yo también pongo en duda lo que pienso.
Mi cuerpo lo pide a gritos, así que me embarque en el objetivo que me plantee, crear mi perfil de trabajo para entrar en la empresa de Mejiwoo mi cuñada.
Una diosa Asiática y mi mayor modelo a seguir, la stalkeaba todo el día e iba a hacer todo lo posible por ganarme su confianza, necesitaba llegar a ella como sea. Después de unos contactos y algo más de dinero conseguí lo necesario.
Jung Noah mano derecha de Mejiwoo y primo de los hermanos Jung:
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Ambos nos empezamos a seguir y no tardó el día en que intercambiamos mensajes. Con mi falsa modestia de querer expandirme le conté mis mayores sueños, mis expectativas y al muy idiota lo tuve comiendo de la palma de mi mano.
—"Querés trabajar en la empresa, puedo hablar con mi prima, le caerías súper bien”.— Me había dicho él.
“Bingo” gritó mi subconsciente, un paso más dado adelante, no insistí tanto en la oferta hasta no tener la certeza que me dijera que era verdad.
Obsesionada si, estúpida no, eso lo tenía bien pero más que bien claro. Noah me contacto esa tarde para decirme que tenía que poner mis papeles y visa al día que sí quería hacerme la “Gran Asia” tenía que viajar cuanto antes a Corea.
Noah tenía bastante arreglado todo y eso me daba a sospecha, lo encaré de una por el chat preguntándole si realmente era quien decía ser, y no ser solo alguien que se aproveche de una extranjera.
Que paradójica la vida, pase de ser victimaría a víctima, como amo el cambio de rol, por qué es tan fácil manipular la mente de las personas, porque nos dejan la puerta abierta a hacer con sus mentes o sus debilidades lo que a una se le antoje.
Después de una semana donde hasta logré cruzar unas palabras con mejiwoo por videollamada, supe que mi plan perfecto iba a dar comienzo.
Viviría cerca de las torres de trimaze en Seongsu-dong complejo residencial dónde el amor de mi vida vive, tengo acceso directo a mi cuñada y todo está saliendo según lo predije.
Noah me reveló que era gay de Clóset porque en la familia Jung son bastante tradicionales y si se llegará a filtrar algo así a los medios sería un crimen, por lo que sus tios lo que más le exigían, era menos exposición mediática de sus primos y todo sería lo ideal.
Oh sí que si tenía muchas más herramientas de las que necesitaba. Llegué a Seúl y él me estaba esperando, intercambiamos unos cafés y me llevo al departamento donde viviría.
Había llevado todas mis herramientas de “trabajo de campo”, solo restaba comprar la tarjeta SIM para tener número de Corea.
Noah me dijo que mañana pasaría a buscarme para llevarme a la empresa de Mejiwoo y hacer las presentaciones formales.
Salte de alegría en la mullida King size de la habitación y sonreí con malicia. Mirando el techo de la habitación me dije:
