Fresas y Rosas

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Ese día estaba más que animada, me prepare desayuné algo liviano y me dispuse a esperar a Noah.

“Bellísima”— me recalcó él.

Sonreí ante el cumplido tenía que impactar a Mejiwoo o si no todo sería en vano.
Sacudí mi vestido, moví mi cabello hacia un lado con mi bolso en mano entramos a la empresa, el lugar era muy bonito, sencillo, rústico predominaba el color blanco, algunas mesas con personas trabajando enfrascados en sus labores y a lo lejos se divisaba una enorme pared de cristal que reflejaba el “Despacho” de mi cuñada.

—" Wooow es mejor de lo que imaginé”— dije en un suspiro.

—" Tranquila, lo bueno de trabajar aquí es que te dan la libertad de creación, mi prima te amará”.— me afirmaba él.

Claro que me iba a amar si soy su cuñada, la futura mujer de Jung Hoseok que espera este aparato de armario. Ya luego me iba a encargar de sacarlo del camino, por ahora me sirve, dónde me empiece a fastidiar lo elimino de una.

—“¿A quién vas a eliminar? “— preguntó sorprendido.

Nota mental dejar de pensar en voz alta cuando estoy con él, imposible porque mi cabeza funciona así y todo lo tengo planeado, no busco contratiempos.

—" A la competencia corazón, estoy superanimada”.— le remarqué.

Entramos a la oficina de Mejiwoo y me senté en el sofá color pastel que combinaba con todo el lugar. Noah se había ido a su oficina y me había dejado sola esperando, sentí un murmullo y unos cuantos ruidos acercándose, me levanté del sofá y tamborileé mis dedos.

Hizo su entrada triunfal y no podía negar ni un poco que era una Reina, sin dudas cargar el apellido Jung no era para cualquier hijo de verdulero, no estaba predicho y yo también sería de Jung.

—" Disculpa la tardanza, me retrasé porque mi auto no funcionaba y mi hermano fue quien me alcanzó".— hablo mi cuñada.

Vos tenés idea de lo que me acabas de decir mujer, el amor de mi vida estuvo a unos escasos metros míos y no lo vi, logró ponerme de mal humor está mujer.

— Hey estás bien?, Te sirvieron algo para tomar, Noah es muy descuidado con el personal nuevo.— dijo ella.

—Disculpe Señora Jung es que soy una ferviente admiradora de su trabajo y no caigo que aún estoy delante de usted.— Volví a repuntar.

Envolver a las personas es mi pasión, alagarlos hasta hacer que coman de mi mano es mi virtud.

— Oh entiendo tranquila muchas gracias, recuérdame tu nombre por favor.

— Me llamo Yu Lesseo pero me gusta que me llamen Lessy, gracias por la oportunidad”— sonreí.

— ¿Si mi primo te recomienda estoy segura de sus elecciones, cuando quieres empezar?”— continúo ella.

— Por mí enseguida.— curvé mí, sonrisa mi plan cada vez iba mejor.

Pasaron unas cuantas semanas y fui ganándome la confianza de Mejiwoo, aún no tocaba el tema de Hoseok, pero había algunas veces que ella hacia videollamadas con él, y yo simplemente excusándome en volver en otro momento lograba escuchar su hermosa voz.

Sabía en qué andaba metido mi amor, pero aún me quedaban algunas cartas para jugar y está noche tendría que lograrlo.

Retrasé todo el trabajo de Noah y se lo arruiné, necesitaba que ella me llevará a su casa, ya que había escuchado que comerían juntos, dios comer con mi cuñada y con el amor de mi vida era increíble.

—Aseret puedes venir.— oí a lo lejos.

— Se llama Lessy — grito Noah.

Por primera vez desde que llegué escuché el tono de voz de Mejiwoo bastante molesta. Pero al llegar a la oficina entendí de que se trataba, “Touche para mí”. Estaba regañando a su primo, diciéndole que retrasó la entrega de la próxima temporada y que perjudicó el trabajo de todos, aún más el mío, Noah me miraba pidiendo que lo salvará, pero solo atiné a bajar la cabeza, por un lado, mi sonrisa por dentro porque sabía que lo había logrado solo faltaba escucharlo de Mejiwoo.

—Noah sinceramente nose que hacer contigo, somos familia, pero está es mi empresa y no puedo darme el lujo de perdidas, lamento mucho, pero volverás a las tareas de distribución, déjame a solas con ella tenemos que hablar.— pidió enojada mejiwoo.

No levanté mi mirada en ningún momento, la tensión era tremenda y yo solo quería gritar de la felicidad.

— Sé que eres nueva en la empresa, pero has Sido muy competente y sinceramente me da vergüenza pedírtelo, pero necesito que trabajemos en casa, tengo una comida que no puedo cancelar y necesito terminar esto enseguida, te gustaría ser mi nueva editora en jefe?— con arriesgar no iba a perder nada pensaba mejiwoo.

¿Se podía gritar, saltar, exclamar algo? No, debía guardar las apariencias, un paso más hacia adelante y cada vez más cerca de él.

— Sería un verdadero honor, gracias por confiar en mi Señora Jung.— hice una reverencia en 90°.

— Solo Mejiwoo por favor.— pidió ella.

Viajamos hacia su departamento mientras ella me iba relatando cosas de la oficina que sinceramente no prestaba atención solo en mi mente estaba “vas a comer con Hoseok”.

Su Departamento era un piso completo en el mejor edificio de Seúl y yo quedé maravillada por la hermosa vista que teníamos. Un ama de llave nos esperaba y me indico el despacho donde íbamos a trabajar.

— Voy a coordinar lo de la cena y enseguida vuelvo. — dijo retirándose y dejándome sola.

— Tranquila que yo me ocupo de todo Mejiwoo.— sonreí como si me hubiera sacado la lotería.

— Gracias al cielo mi primo hizo algo bien y fue traerte a la empresa.— dijo saliendo del despacho.

Hay cuñadita si supieras mi verdadero motivo, creo que no estarías nada feliz, había copiado el archivo de Noah, así que simplemente me entretuve viendo las fotos regadas por todo el lugar.

El marido de mi cuñada era muy lindo también, ya entendía el porqué lo escondía de las redes.

Me detuve en la foto de Hoseok, era reciente, sabía que era de su viaje a Hawái, pero había Algo en mi corazón que no me gustaba y era la rubia que se encontraba a unos escasos metros de él y lo miraba embobada.

— “Todo bien”.— dijo rompiendo la burbuja de curiosidad en la que estaba metida.

Y eso detonó que el marco se me cayera de las manos y al intentar que no se rompiera, corte mi mano y un quejido salió de mí.

— Disculpe, Señora Jung, solo miraba las fotos porque ya había terminado el trabajo, le pido perdón por mi atrevimiento.— dije con toda la vergüenza posible.

— Mejiwoo que paso, que es ese gritó.— esa voz la reconocía, esa voz era el aliento de mis días.

Me levanté pálida, lo que tanto había añorado estaba delante de mí, mirándome asombrado, quería que la tierra me tragara, una sonrisa coqueta se dibujó en mí rostro, mi cuerpo flaqueaba y cuando estaba por hablar.

— ¿Amor está todo bien?—. ************************************ Vamos modificando cosas espero que les gusten.

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