Cap 2.El collar

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Tome el delicado y poderoso collar entre mis dedos temblorosos, jamás lo utilice, pero sabía para que servía y como se usaba, papá me enseñó todo lo que debía saber.

Salgo se esa oscura habitación y cierro el armario detrás de mi.

Veo a mamá en el umbral de la puerta que da al pasillo, esta cruzada de brazos, y puedo ver la preocupación en sus ojos color verde.

-Hija,¿estas segura?. Puede ser peligroso.

-Es esto o llegar tarde a clase. -imito su postura crusandome de brazos y la mire desafiante. Podía ser una mujer que destilaba respeto y seguridad. Pero por dentro era vulnerable y muy manipulable, claro debías saber como hacerlo si no, te hacia sentir la peor persona del mundo. E tenido mucha experiencia con ella y papá, se que si me muestro firme ellos no podrán hacer nada, después de todo soy la única hija que les queda.
-Por que no simplemente te levantas apenas suene la alarma.

-Ay mamá, no empieces.-me coloque el collar y me retire a mi habitación. Pude sentir sus ojos seguirme hasta el final del pasillo.

Mire mi teléfono y solo me quedaban 2minutos, volví a guardarlo en mi bolsillo trasero y toque el collar, cerré mis ojos e imagine a donde quería ir. Cuando los habrí aparecí en el baño del colegio, menos mal no había nadie, si no hubiera sido muy incomodo y raro, además de asqueroso. Sali del cubículo del baño y me puse en marcha hacia el salón de clases.

Al llegar pude ver a mi mejor amiga Neli, esta riéndose de algo que le había dicho un chico que estaba sentado detrás de ella. Pude ver como sus ojos marrón brillaban, mientras tocaba su cabello negro con rulos. Era hermosa, de piel morena y dientes blancos, tenía un pequeño pircing en su nariz, ella sabía como lucia y le sacaba mucho provecho, ojalá yo pudiera ser así.

Me acerque a ellos y garraspee mi garganta al tiempo que me sentaba. Mi mejor amiga me miró como si tuviera 3 cabezas, sonreí a la idea de tener tres cabezas, seria genial, podría comer tres amburguesas al mismo tiempo.

-¿Elina? ¿Que haces a esta hora aquí? ¿Te caíste de la cama, o hay hamburguesas gratis? -dijo mientras sonreía.

-Para empezar si hubiera hamburguesas gratis no estaría aquí, si no que comiendolas. Y no, no me caí de la cama, resulta que si vuelvo a llegar tarde a clase me expulsan.-dije mirando de reojo al chico que se puso a ver sus apuntes.

Neli se dio cuenta y reacciono rápido.

-Oh si, Frank ella es mi mejor amiga Elina. Elina el es Frank, es nuevo, viene de Puerto Rico.

-Hola Elina un placer.
Pude ver que tenia una mandíbula levemente marcada, pero que hermosa sonrisa tenía, pero por los ojos de mi amiga pude notar que le interesaba así que mejor no verle mucho.

-Hola Frank. Lindo collar.

-¿Te gusta? Era de mi hermano.

-Que tierno. -Sin evitarlo mis ojos se pusieron cristalinos por un segundo,pero rápidamente vi mis apuntes e hice como que buscaba algo.

-Y dime Frank que te trae a esta hermosa y privilegiada escuela.

-Bueno, es una escuela bastante buena y siempre quise venir aquí, acá hay medicina.

-Con que quieres ser doctor. -dije concentrada mientras habría mi bolsa de chocolates con mi lengua afuera.

-Si, más bien, quiero ser cirujano.

-Genial, hay que ser amigos, así cuando seas cirujano me ayudas con mi lipo.-meti a mi boca el delicioso chocolate.

-No te haría falta si dejaras de comer tanto.-escuche una voz horrible detrás de mi.

-Vaya pero si es el intento de galán y fuckboy mal echo.

-¿Que haces aquí Elina?

-Estudiar. Algo que tu deberías de intentar alguna vez, capaz y descubres que si tienes cerebro.-se puso en frente de mi con el ceño fruncido y sus manos al los lados de mi escritorio- O tal vez no.-sonreí irónicamente.

-Estas en mi lugar.

Lo mire fijamente. -Impresionante, de cerca es más feo todavía.- eche a reírme y Neli hizo una risilla.- Además, no veo tu nombre por ningún lado.
En el momento que iba a decir algo dentro la profesora y dicto su clase.

Al terminar Neli me llevó en su auto, uno muy lindo, obvio lo mejor de lo mejor para la hija de uno de los jueces más importantes de la ciudad.

-Nos vemos mañana en la escuela.

-¿No quieres que pase por ti?

-Ok, si me gustaría además tenemos mucho de que hablar.-levante ambas cejas y las volví a bajar.

-No se de que hablas.-empezó a mirar hacia todos lados, justo como hacía cuando estaba nerviosa.

-Aja, mañana te veo.-baje del auto y ella se retiro.

Al dentar a casa vi la figura de papá en el umbral de la puerta a mi habitación, se veía muy enojado y serio con sus brazos cruzados.

Mierda

Elina y el poder de los collares Donde viven las historias. Descúbrelo ahora