Easier [ShadowPeach]

Parte Única.

MK cayó al suelo con el cansancio pintado en su sudoroso rostro.

— Has mejorado — Macaque pasó a su lado con destino a la repisa en una esquina del dojo —. No como pensaba pero ya es un avance.

— Lo intento — el discípulo se acostó en el sueño abatido.

El macaco solo lo miró sin decir palabra, por alguna razón le era nostálgico ese escenario. Caminó de vuelta con unas bolsas en sus patas.

— Hey, tranquilo. Sé lo mucho que te esfuerzas, solo sigue practicando, quien sabe si algún día me ganes — sonrió de lado sentándose en el suelo.

— ¿Tu crees?

— Estoy seguro, nadie llega a escalar tan alto sin practica y esfuerzo.

"Bueno, a excepción de algunas personas".

— Pero basta de charla. A comer — sacó de las bolsas dos recipientes de comida que repartió a cada quien —. Realmente no se que es lo que comes o no y tampoco estoy interesado en saberlo.. asi que compre una hamburguesa para ti.

Le pasó dicha envoltura a MK que este agradeció con una sonrisa y ni corto ni perezoso comenzó a devorarla una vez la desenvolvió. Ambos comían un silencio cómodo, cada uno concentrado en su tarea de morder, masticar y tragar y todo iría en completo silencio de no ser por que las orejas de Macaque zumbaron ante percibir un nuevo ruido.

— ¿Qué tanto tarareas? — tomó con los palillos más fideos.

— Ow, ¿me escuchaste?

— Literalmente puedo escuchar desde aquí a un tipo que se queja el porque siempre pierde en ajedrez, así que sí, si te escuché.

MK rió.

— Es una canción que escuché hace unos días y que ahora no puedo sacarla de mi cabeza — sacó su teléfono buscando en su reproductor la música comentada —. Aquí está. Supongo que no conoces 5SOS.

Macaque levantó una ceja sorbiendo más de sus fideos.

— Obvio no. De todos modos, es está.

Reprodujo el audio y después de un par de segundos la música llegó con más claridad a sus oídos. No lo iba a admitir, menos con MK a su lado, pero el ritmo le gustó y eso que no llevaba ni un minuto de canción aunque no notó que el mismo se delataba moviendo la cola al ritmo de la música.

Pero la canción inmediatamente le dejó de gustar una vez terminó la primera estrofa. Estaba odiando como esa canción hacia una comparación del momento más despreciable de su vida. Estaba detestando como la letra prácticamente contaba el pasado que quiso encerrar en cajas de metal. Estaba aborreciendo el como el significado de la letra traía un rostro a su mente.

Un rostro que no veía en más de 500 años pero que aún tenía cada cabello, cada sonrisa, cada mirada soñadora y risillas traviesas grabados en su memoria a punta de filosas navajas.

Pero así como estaban los malos momentos reproducidos en su memoria, los buenos momentos se volvían una película que parecía no tener fin llevándolo al tormento arrinconandolo al borde de un risco con un final de lágrimas, quejidos y dolor.

Dolor que parecía jamás dejarlo.

— ¿¡Verdad que es buena!? Le dije a Mei de esta canción y ahora ambos no podemos dejar de escucharla. Hasta pensé en decirle a Tang que hiciéramos una banda y así......

La canción aún rodaba pero ya no sentía la misma curiosidad por ella como la tenía en un inicio.

Es increíble como una cosilla insignificante puede cambiar el ánimo de las personas, sea bueno o malo.

Aunque Macaque ya se había acostumbrado a lo segundo.

— Si, si, si. Es muy buena — se levantó de suelo —. Pero como ya terminaste te toca hacer 20 rondas con repeticiones de postura, ataque y defensa.

El discípulo pausó la música al escuchar su sentencia de muerte.

— ¿¡20!?

— Y después meditación bajo las cataratas — tiró las bolsas en algún lugar lejos del tapiz —. Andando, no tenemos todo el día.

Solo se escucharon ruidos, quejas y gruñidos inconformes del castaño.

En lo que fue el resto de día, ciertamente Macaque no se quitaba de la cabeza aquella pegajosa música, repitiendola en su cabeza una y otra vez pero lo que más le atormentaba era aquellas palabras que le causaba tantas emociones y que a la vez no le causaba nada.

'¿Es tan fácil quedarse? ¿Es tan fácil irse?
No quiero saberlo.
Pero sé que nunca, nunca voy a cambiar.
Y sabes que siempre vas a seguir siendo el mismo.'