«Duxo», era el ser que invadió su mente durante el viaje.
El castaño no era capaz de hacer cualquier cosa sin que la imagen del azabache apareciera de la nada en su cerebro, causando que su corazón latiera tan rápido que pareciera que iba a explotar.
Por más que deseaba dejar de pensar en el, su consciencia lo traicionaba, algo que le comenzaba a preocupar.
¿Por qué pensaba tanto en el que se supone es su amigo? ¿Por qué su cara se enrojecía cada que se veían o hablaban por discord?
Prefirió dejar de hacerse esas preguntas y "disfrutar" el viaje. Si a eso se le podía llamar el estar la mitad del tiempo dormido.
[...]
Después de aterrizar e ir a buscar sus maletas junto a su madre -con la cual viajaba para asistir a un evento familiar en la misma ciudad-, se dispuso a buscar con la mirada al azabache; pues le había dicho que los esperaría en el aeropuerto para enseñarles la ciudad y llevarlos al lugar donde los habían citado.
Espero no encontrarlo por un tiempo, pues el peli-negro ya tenía la mala fama de casi nunca llegar puntual a sus citas. Pero está vez no, pues tuvo la grata sorpresa de ver al azabache a los lejos, también buscándolo con la mirada.
Una gran sonrisa junto a un tenue sonrojo se hicieron presentes es su rostro. Por fin, después tanto tiempo, pudo conocer a la persona que lo apoyo cuando empezó en el mundo de internet.
Su felicidad no podía ser mayor.
Ambos caminaron hacia el otro, el azabache iba considerablemente más rápido que el castaño. Los dos quedaron uno frente del otro, Aquino tenía una sonrisa nerviosa y su sonrojo había aumentado un poco, Duxo estaba exactamente igual.
-H-hola -le hablo primero Duxo, con un tono bajo pero audible para el.
-Hola. -Puso una mano en su nuca-. Te ves tan... diferente -dijo, asustado con cagarla.
De la nada sintió como los brazos de Duxo jalaron hacia su pecho. Uniéndolos en un dulce abrazo.
Su sonrojo se volvió más fuerte y se quedó congelado, su corazón latió más que nunca en ese momento. No correspondió al abrazo, pero las ganas de hacerlo sobraron.
-Hmmm. ¿Aquino, hijo? -interrumpió su madre, que estaba junto a sus maletas-. ¿El es el tal "Duxo" del que me hablabas?
Aquino, en la repentina interrupción de su madre, aparto de forma rápido a Duxo de su cuerpo.
-¡Oh, mamá! -exclamó, nervioso y sudando-. S-si, ma. El es Duxo. -Señalo con ambas manos al nombrado.
-Hola, señora. -Le dedico una leve sonrisa -. ¿Quieren que les lleve sus maletas? Deben de estar cansados de tantas horas de viaje.
-Que amable de tu parte, querido. ¿Y ...tienes carro? -pregunto y miro a su hijo.
-Por ahora no. Pero un amigo me presto el suyo, puedo llevarlos ahí!
La mujer, en respuesta, solo soltó una suave risilla.
El azabache tomo las maletas, que solamente eran dos. Todos caminaron hacia la salida, donde Duxo le dijo a Aquino que se quedara junto a su madre; ya que iria a dejar las maletas al auto. Y Duplo se fue.
Aquino y su madre quedaron en la salida. El castaño no dijo nada, parecía una estatua, aun se sentía avergonzado por ser abrazado por el peli-negro. No podía superarlo.
-¿Hijo?
Aquino por fin despertó del trance -Dime, ma. ¿Pasa algo?
-Te tengo una pregunta: ¿Ese chico te gusta?
...
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WEON POR FIN TERMINE ESTA MIERDA 😭😭😭😭😭😭
Diganme: ¿Que les pareció? Espero que les haya medio gustado aunque sea XD. De verdad que tarde mucho 😥😥
