Nunca llueve, pero diluvia

La vida es solo un sueño.

Twitter autor:@rinfumochii
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“Baji-san. Chifuyu nunca te querría muerto. Siempre."

Baji gruñó. Takemichi dejó escapar un breve suspiro.

"... Si tuviera una opción, estoy seguro de que elegiría cualquier tipo de mundo contigo en él, incluso cuando eso significa vivir en el infierno".

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Todo sucedió tan rápido, como un montón de flashes intratables. Rebotaban sin saber dónde terminar.

Baji aún no había asimilado la línea de palabras que se arremolinaban sin control en su cerebro cuando de repente escuchó disparos. No tuvo más remedio que cerrar el grueso libro negro que había estado en su poder durante horas, lo metió en su camisa e inmediatamente agarró su arma.

Mikey apuntaba con su arma a Baji. Sin embargo, los ojos oscuros y turbios de su mejor amigo estaban fijos en la figura dormida de Takemichi, todavía sentada y atada en medio de la oficina de Baji.

El cerebro de Baji todavía tenía problemas para adaptarse. Todavía no podía comprender del todo lo que acababa de leer. Aunque parecía que todavía tenía suficiente energía para levantar el brazo y apuntar con el arma al gran jefe, su mejor amigo, por reflejo.

Baji no sabía qué tipo de expresión había en su rostro. Sabía que Mikey entendería fácilmente lo que le estaba pasando a él, a Baji, que actualmente estaba perdiendo la cabeza.

Si Mikey notó algo, el gran jefe pareció preferir no decir nada. La irritante voz de Sanzu fue lo que llamó la atención de Baji después del intimidante silencio.

"Como pensé que terminaste traicionándonos", dijo Sanzu, seguido de una pequeña risa. El hombre vil también apuntaba con su arma a Baji. "Desde que has estado preocupado por tu perra, has perdido un poco la concentración, Baji".

Baji solo lo miró brevemente. Oh. Este cachorrito siempre había estado tan desesperado por acaparar toda la atención de Mikey. Por supuesto, despreciaría tanto a Baji. Estaba tan ansioso por ser el reemplazo de Baji.

"No soy un traidor, Sanzu de mierda. Deja de ladrar".

"Hmmm, ¿puedes explicar por qué Hanagaki Takemichi está aquí, inconsciente, en medio de tu oficina? ¿Y por qué de repente la policía conoce algunos de nuestros lugares de transacción?"

Baji solo puso los ojos en blanco, abatido.

"En primer lugar, él mismo vino aquí, y no sé a qué te refieres con tu segunda pregunta".

"Tonterías. Entonces, ¿por qué no te deshaces de él inmediatamente?"

"Tengo mis razones."

"... Mikey tiene el derecho de decidir si eres un traidor o no", Sanzu le dio una sonrisa repugnante. "Así que será mejor que te calles, hijo de puta. ¡Mikey hablará!"

Baji miró a su amigo de la infancia, que no bajó el arma en absoluto, esperando que diera una respuesta significativa. Los siguientes dos minutos de silencio parecieron dos siglos para Baji. Pero finalmente, el gran jefe abrió la boca.

"¿Recuerdas lo que dije entonces, verdad, Keisuke?" dijo mikey. Su tono era plano como de costumbre. Sin embargo, Baji era la única persona a la que no podía mentir. Había un ligero temblor en la voz que, a primera vista, no sonaba diferente.