Capitulo 13.

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Desperté muy temprano, ya que tenia que ir a ver a Guillermo, primero iría yo y ya en unos días iría Vegetta. Me gusta ir primero  yo hacerlos sufrir, me fui a vestir rápidamente, cuando ya casi me iba ir me detuvo Vegetta.

V: ¿Ya vas a ir?

L: Si tío, ya me voy

V: Bueno al rato te veo entonces

L: Ok

Salí de la casa y me fui a donde tenemos a Guillermo, pase a un lugar donde venden comida, para darle de comer a este tío, llegue a la casa y entre silenciosamente a la habitación en donde se encontraba, para mi suerte, el ya estaba despierto.

L: Haz despertado bello durmiente – Dije entrando con tono burlón

G: ¡Tu!

L: *Ríe* Si soy yo – Ver su expresión de sorpresa, era para una fotografía

G: ¿Que estoy haciendo aquí?

L: Por que tú eres nuestra victima

G: ¿Su victima? Así que tu eres

L: Si, soy el gran secuestrador y asesino de Madrid

G: Sabia que eras tu – Dijo agitado– ¿Qué van hacer conmigo?

L: Vegetta va a venir en unos días a explicarte todo, mientras yo vendré a darte de comer, para que no mueras antes – Dije con tono burlón

G: ¿Vegetta?

L: *Ríe* Si vegetta, pronto lo conocerás

G: ¿Y tú por que no me explicas?

L: Por que es trabajo de el, no mío, te desatare las manos para que comas, no trates de hacer nada, por que si no te mato

Lo desate, y comenzó a comer lo que le había comprado, espere que acabara para irme.

L: Listo, ya me voy – Comencé a amárralo otra vez de las manos

G: ¡Espera!

L: ¿Qué?

G: ¿Samuel sabe que tú eres un asesino?

L: Pronto aclarare tus dudas, mientras quédate con ellas, adiós – Dije saliendo de la habitación

Me gustaba hacerlo sufrir y la verdad eso me daba gran placer. Cuando me iba ya para mi casa, vi que Frank estaba en un parque y era mi oportunidad para seguirlo conquistando, ya que ayer ya le había dicho que me gustaba y se lo creyó y eso es parte de mi plan, me acerque donde estaba Frank y lo agarre del hombro.

L: Hola – Dije sentándome a lado de el

F: Hola – Dijo haciendo una sonrisa de lado

L: ¿Que haces?

F: Aquí pensando en algunas cosas

L: Ah que bien

Me quede un buen rato platicando con el, hasta ya sabia mas cosas de el, pero ya me tenia que ir.

L: Me tengo que ir, ojala pueda ganarme tu cariño

F: *Ríe* ya lo tienes tío – Dijo sonriendo

L: Adiós – Le dije mientras le daba un beso en la mejilla, note como se ponía colorado y eso me dio algo de risa, pero me aguante la risa para que no me viera
Llegue a mi casa y ahí estaba Vegetta sentado en el sofá del salón

V: ¿Que paso?

L: ¿De que?

V: Es que tú eres tonto, con Willy

L: ¿Quién es Willy?

V: Bueno Guillermo

L: Ah, pues ya sabes tiene muchas dudas del por que esta ahí, etc.

V: Y supongo que yo tendré que ir a explicarle esas dudas ¿Verdad?

L: Si tío

V: Bien – Dijo sonriendo – Y ¿por que te tardaste tanto?

L: Ah, es que cuando venia hacia acá, me encontré a Frank y me quede platicando con el

V: Y ¿como vas con el?

L: Bien tío, ya hasta dice que ya me gane su cariño, así como voy con el, pronto los tendremos juntos a el y a Guillermo, para asesinarlos a sangre fría – Dije mientras miraba a Vegetta

V: Eso me agrada, sabes  muero de ganas por ver la cara de sorpresa de Guillermo al ver que yo soy Vegetta

L: * Ríe* pues cuando me vio a mi no se sorprendió mucho, ya que el sospechaba que era yo el secuestrador, pero de ti si no sospecha nada

V: Bien – Dijo haciendo una sonrisa de lado

Nos pusimos a ver unas películas y a idear de cómo torturarlo poco a poco y también cuidar todos nuestros movimientos, ya que cuando sepan que Guillermo desapareció, la policía va a querer encontrar a los culpables, aunque nadie a podido dar con nosotros, de todos modos tenemos que tener mucho cuidado.

Síndrome De Estocolmo (Wigetta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora