La soledad en su máxima expresión.

cap 13 Ruleta rusa de corazones rotos

Al salir del aula camine al parqueo entre ansiosa y nerviosa, tenía miedo de arruinar las cosas con Alexa por algún tipo de mal entendido tenía ese mal presentimiento encima, no le di tanta importancia subí mi auto y conduje a casa lento casi apreciando el trayecto ví algunos estudiantes caminando a casa otros charlando con sus amigos entre otras cosas al llegar a mi casa entre el coche en la cochera y me dirigí a ver si mi hija estaba en casa y ahí estaba solita viendo una serie en Netflix en la televisión de la sala de estar comido palomitas sonreí viendo a mi hija ahí sentada.

-Hola pequeña dije y ella noto mi presencia sonriendo inmediatamente se paró del sofá casi tirando las palomitas para abrazarme

-Hola mamá, te extrañe dijo dándome un abrazo fuerte y besando mis mejillas.

-No vengo a dormir una noche y ya me extrañas ¿te estoy mimando demasiado? dije riendo a carcajadas

-No mami, lo que pasa es que ayer no te Vi porque te fuiste temprano a trabajar y cuando volviste te fuiste antes que despertaramos, Felicity volvió a Canadá hoy y se fue algo triste porque no se pudo despedir dijo mi pequeña haciendo un puchero.

-Mi vida en otro momento prometo llamar o mandarle un mensaje para disculpar mi ausencia dije sonriendo le a mi pequeña princesa.

-Esta bien mamá dijo aún sin soltarme

-¿Que quieres que te haga para cenar hoy? Tendré que salir un rato a resolver un "asunto" princesa dije viendo cómo Sofi cambiaba su expresión entre confusión y a punto de hacer un berrinche me rei ya que yo a su edad hubiera Sido feliz con tanta libertad y que mi madre me hubiera tenido tanta confianza

-¿Que tipo de asunto? Pregunto ya celosa

-Debo de ir a reunirme con alguien y no no puedes acompañarme dije sabiendo que si fuera por ella no se me despegaría ni un minuto algo a lo que llamo Mamitis aguda casi crónica pensé entendiendo también los años que duramos separadas.

-Esta bien pero prométeme no llegar muy tarde ¿Si? Dijo poniendo ojos de cachorrito sonreí y asentí -Quiero que hagamos pasta para cenar mamá dijo mi hija pasando de actuar como adulta 18 años a una niña de 8 años.

Subí a mi habitación a ponerme algo más cómodo termine poniéndome un pantalón corto y una camiseta blanca sin mangas baje a la cocina donde mi hija ya me esperaba y empezamos a cocinar ella puso el agua a hervir y yo me puse a picar los los vegetales de la salsa también saque la carne para hacer las albóndigas, pasamos al rededor de una hora y media en la cocina.

Cuando acabamos ambas estábamos riéndonos ya que a Sofía le había caído un poco de salsa en el rostro mientras la probaba y ni cuenta se había dado, amaba pasar tiempo con ella y ella conmigo antes que madre e hija somos mejores amigas pensé viendo a mi hija algo sucia de sudor, salsa y algo despeinada nos sentamos a cenar y no comí mucho aún conociendo mi metabolismo el cual era bastante rápido por eso mi hermosa figura sin necesidad de ir gym, gracias a los buenos genes pensé.

Luego de haber cenado ambas limpiamos la cocina cuando estábamos terminando le dije a Sofía que subiera a bañarse que yo terminaba lo cual fue más rápido de lo que pensé termine de acomodar algunas cosas y me fui a bañar rápidamente, me vesti con algo simple un vestido negro ajustado, unos tacones Negro un maquillaje simple y mi cabello suelto, me mire detenidamente al espejo y estaba preciosa para luego contestar mi teléfono.

"¿Hola?"

"¿Ya estás lista? Estoy llegando a tu casa estoy a unos 5 minutos" dijo Amelia

"Si ya estoy lista" dije algo indiferente aunque por dentro me sentía algo ¿Emocionada? No seguramente era otra cosa.

"Muy bien bella dama no tardaré" dijo de forma coqueta Amelia y yo rei antes de colgar

Tome mi bolso y salí de mi habitación antes de llegar a las escaleras toque la puerta de la habitación de Sofía y ella la abrió rápidamente y se tomó unos 2 minutos para verme bien y solo le salió un "wow" como un susurro.

-Te ves hermosa, te ves wow dijo mi hija aún sorprendida sonreí para luego agradecerle por el alago aunque raro grato.

-Si necesitas algo llámame dije y ella asintió para luego abrazarme

-Esta bien, cuídate mamá, igual te digo lo mismo si necesitas algo llámame dijo riéndose asentí y baje luego de darle un beso.

Justo a tiempo cuando sonó mi teléfono otra vez Amelia, sali viendo un lindo automóvil deportivo rojo parqueado al frente de mi casa y a Amelia iba vestida con un pantalón negro de vestir, una camisa blanca y para completar una corbata y un saco pensé que solo lo revelativo la haría ver bien o que tal vez esa aura sexy era por sus escotes y falsas ajustada vaya error en el que estaba pensé viéndola apoyada de dicho auto con una sonrisa tierna y un ramo de rosas en la mano camine hacia ella y me dió el ramo de rosas acompañado de un "te ves hermosa" cualquiera que viera dicha escena pensaria que llevamos años de relación pensé viendo como me abrió la puerta del copiloto subí a su auto para luego ponernos en marcha fue un camino algo silencioso al llegar a aque restaurante que se veía desde lejos que era bastante lujoso.

-¿De verdad quieres entrar? Preguntó Amelia cambiando su expresión a preocupación.

-Mala pinta no tiene el restaurante más bien pinta de ser caro y si quiero entrar después de todo fuiste tú la que insististe en esta ¿Te estás arrepintiendo? Pregunté sonriendo

-Al contrario estoy feliz de que aceptarás pero puede que veas algo un poco desagradable dentro dijo Amelia con una expresión de preocupación que aprecia sincera.

-¿A qué te refieres? Pregunté confundida

-Quiero enseñarte la verdad pero no te quiero hacer sufrir, me gustas mucho Elise desde la primera vez que te Vi me impresionaste dijo seriamente.

-Sigo sin entender dije mientras ella suspiraba

-¿Entramos o nos vamos? Esto es sobre la dueña de ese gafete que cargadas esta mañana dijo Amelia y sentí un nudo formarse en mi garganta ¿Alexa escondía algo?

-Entremos dije con miedo ví como Amelia se tenso abrió la puerta de su auto y salió dió la vuelta me abrió la puerta y me ofreció su mano para ayudarme a salir tome mi bolso y me apoye de su mano

Entramos y el mesero nos guío a nuestra mesa me senté y Amelia me señaló hacia una mesa que estaba a 2 mesas de distancia allí pude ver algo que me helo la sangre sentí como un escalofrío recorría mi cuerpo y palideci al ver dicha escena mi novia besando a otra mujer sentí una lágrima bajar por mi mejilla para luego sentir una cálida mano pasar por mi mejilla y otra tomar mi mano.

-Por eso dude en entrar aquí dijo Amelia

Senti decepción una tan grande que no pude decir una sola palabra sentí lo mismo que ella sintió en la universidad si esto era una venganza ella había ganado.