Ataque

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En la votación ganó la opción de final inventado por mi, gracias a los que votaron! 💙
Ahora van a leer lo que yo pensé que pasaba en SNK antes de que las dudas se resolvieran. Disfruten!


Lo había salvado de morir devorado, aún podía percibir el fétido aliento de aquella boca que ya debía haber comido a muchos de sus compañeros. Pero cuando lo tuvo justo en frente, a pesar de haberse roto un hueso y tener su espada al alcance de la mano, dudó. Se quedó inmóvil porque los ojos marrones de ese titán se veían como los de su padre.

Debía estar enloqueciendo por la ansiedad, la incertidumbre de si vivirían o morirían, pero no pudo acabar con él. El Capitán Akashi lo había salvado.

—Estoy demente.—murmuro riéndose.

Un silencio ensordecedor le pitó en los oidos de la apresurada tienda de primeros auxilios, su risa había sido de las más falsas que hubiera tenido, porque aquella inquietud todavía le daba cosquillas en la nuca.

La mirada perturbada por los horrores de la guerra ya no era la de un niño ilusionado con ver titanes. Los iris de Seijuro se habían opacado e incluso uno de ellos presentaba un curioso color dorado del que no se atrevía a preguntar. Recordaba que su madre tenía cabellos blanquecinos, que según le dijo, eran por las preocupaciones que él le causaba.. entonces no era tan raro pensar que los ojos también podrían aclararse y cambiar de color por el estrés.

Aunque sinceramente, en esa situación, lo que menos le preocupaba era conocer detalles de la vida del pelirrojo. La mirada de ese Titan lo tenía comiéndose las uñas.

Seijurou resopló con una pequeña sonrisa de lado, echándose el corto cabello cereza hacia atrás en un ademán confiado que no supo apreciar.

—Cambiaste. Antes eras mal hablado, un héroe suicida.. Ahora sólo te quedó lo suicida —Se rió.

—Es porque me quedé aterrado con el titán?

—No, muchos soldados pierden la compostura ante ellos. Es natural. Son monstruos con forma de hombres, canibales inmensos.. —Se lamió los labios y agregó con un tono más amable que no combinaba con su voz rasposa—: aunque sigues siendo igual de audaz. Quieres saber por qué..?

—No quise defenderme —interrumpió, dejándolo confundido— ese titán se parecía a alguien que conocí.

Seijurou se apartó un poco, viendolo con el horror pintado en sus pupilas cargadas de desastres. Negó sus palabras sin pensarlo.

—Sabes cuantos compañeros perdí? —demandó Seijuro— sabes cuantas personas vi morir? La maldita sangre de cientos de personas está impregnada en mi memoria..

El pelirrojo se puso de pie y caminó como un lobo enjaulado, lleno de rabia le dio con el puño cerrado a una mesa. El castaño abrió los ojos cuando un trozo se desquebrajó y crujió al caer.

—Capitan.. —Estiró una mano pero la nuca del pelirrojo parecía tensa, cuando  intentó otra cosa— Seijurou..

—Nos engañan con su apariencia humana para volvernos locos. No están contentos con llevarse a quienes apreciamos.. También nos destrozan aquí. —gruñó, clavándose el índice en la sien con una temblorosa mano.

Kouki no supo qué decir así que sólo actuó: abrazó a Seijurou por la espalda y sus manos se pegaron al abdomen plano. Sintió su jadeante respiración furiosa sufrir un ligero cambio, sintió su acelerado palpitar serenarse y sus hombros perdiendo toda tensión.

—Perdiste a alguien importante?

—A ti.—Fue el turno de Kouki de perder la calma, observó la mesa rota con incomprensión— Creí que te habían devorado.

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⏰ Última actualización: Mar 15, 2022 ⏰

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