Rebelde Way x siempre rebeldes

Perú con ...

--------------------------Narra Marizza ----------------------------

Nadie podía entender mi emoción de volver, sentir ese magnetismo que tiene el Perú me hacía pensar que pronto todo cambiaría para mejor. Iba muy agradecida... porque a pesar de todo estábamos todos bien, mi mamá, mis amigos... hasta Pablo. Pero, eso no era lo que me hacía sentir plena, sino que yo tenía una mezcla de sentimientos y no entendía aún la suerte que estaba teniendo en lo que iba del viaje. 

Cuando llegamos al aeropuerto internacional de Buenos Aires, me cambiaron el tickette del avión, ya no iríamos en clase turista sino que ahora "milagrosamente" éramos parte de la clase ejecutiva según la señorita del counter por un error de venta por parte de ellos, pero yo no creía eso ... pensé que mi mamá se había confundido y por ser ella "Sonia Rey" le habían cambiado el asiento a última hora, pero ¿sería realmente así?

por otro lado, cuando ya estábamos listas para ir caminando a la sala de embarque un señor muy amable paró su carrito de golf ante nosotras y se ofreció llevarnos al Gate. Miré a Lujan y le dije - yo siempre pensé que esto era solo para los ricos y famosos le dije- ella solo me miro y subió al carrito. Estaba sintiéndome especial sin haber movido un dedo o haberle mentido a nadie. 

El vuelo fue de lo mejor, comida especial, vino... sí, vino... ya que era de clase ejecutiva ni la edad me preguntaban. Lujan, como siempre super deportista, solo agua y galletas, por favor - decía cuando la aeromosa se acercaba. 

Todo era perfecto 

Las casi 5 horas de vuelo se pasaron rápidamente, cuando aterrizamos una señorita de la tripulación nos buscó para llevarnos a nuestro siguiente vuelo. La verdad yo quería comer algo en tierra firme, pero ni tiempo me dio porque la srta hizo todo el papeleo y fuimos a nuestra conexión al Cusco sin sentirla. Cuando estábamos en el avión al Cusco me percaté que no había más que una persona en clase turista, mientras que en case ejecutiva sólo estábamos Lujan y yo, por lo que comenté- Luji, que loco che ... tanto queríamos venir a Cusco desde lejos y los que viven acá no van- se lo dije re molesta porque no podía creer que los locales no quisieran ir allá. En el vuelo todo estuvo bien, hasta la comida estaba maravillosa ya no podía esperar para llegar. 

-------------------------Narra Lujan----------------------------

Un momento luego del despegue vi que Marizza se había quedado dormida, y decidí ir al baño, sin pensar lo que pasaría después ...

Mientras caminaba vi la silueta de la única persona que estaba en la parte turista del avión que se dirigía hacía mi 

Este cuando ya estaba cerca me dijo sonriendo- ¿Lujan sos vos?!- me miró con esos ojos celestes, que Marizza no podía resistir. 

¡Pablo!- le dije sonriendo de la misma manera, sabía que lo que venía sería bueno... por lo menos para Marizza que ya por fin tenía la oportunidad de ser feliz sin ataduras. 

Este, seguidamente, me jaló del brazo llevándome a la zona turista y me dijo- Lujan, este avión lo alquilé yo para Marizza, necesito que me ayudes para que ella no se de cuenta de mi hasta que lleguen al hotel- me dijo entusiasmado y pude ver que sus intenciones eran buenas a través de sus ojos. 

Está bien Pablo, pero que quede claro que esta es la última vez que te ayudo, si le haces daño a ...- no me dejo terminar y me mostró lo que tenía preparado para ella. Todo estaba diseñado para que mi hermana tuviera las mejores vacaciones de su vida. 

pero, agregué, espero realmente que todos nosotros podamos ser felices en estas vacaciones- miré al piso y Pablo me preguntó - ¿por qué decís eso? - yo lo miré y le dije ... Manuel - este me grito - ¡Che! Manu está bien... saludable y debe estar disfrutando hasta el avión con Mia - se rió con una con una sonrisa picará en el rostro- yo lo miré y le dije - espero .. sea así- y me despedí dejándolo en la parte trasera del avión. 

al regresar Marizza ya se había despertado y con ojos de cansada me dijo - Tanto te demoraste que ya te iba a ir a buscar ¿estás descompuesta? - me dijo sarcásticamente - yo me reí y la golpee con mi mano en forma de broma. 

"Estimados pasajeros, bienvenidos al Cuzco" "gracias por haber tomado este servicio especial de su aerolínea LATAM, esperamos verlos volando con nosotros pronto" 

Marizza me miró extrañada y me dijo- ¿Luji escuchaste bien?- la miré nerviosa y agregué- ¿escuché? ¿qué escuché? - ella se cogió el mentón como señal de duda, pero se le olvidó cuando al momento de salir del avión un conjunto de danzantes tradicionales nos esperaban y nos llenaron de regalos típicos. Nos sentíamos todas unas Rockstars sin serlo, o por lo menos yo no lo era. 

Pablo, salió encapuchado del avión, yo lo ví pero estaba dando vueltas con Marizza y bailando que ella ni lo notó. 

seguimos nuestro recorrido, recogimos las maletas y llegamos a esperar al remisse que Sonia ya había contratado desde Buenos Aires. En eso vimos algo raro, y me imaginé que Pablo era el culpable, nuestros nombres salían en remisses diferentes. 

Marizza se acercó al señor que tenía el cartel con su nombre y le dijo- disculpe- creo que hay un error, mi amiga y yo venimos juntas, debemos salir del aeropuerto juntas- el señor la miro y le dijo- Srta son ordenes del Señor Colucci, usted debe venir conmigo y su amiga irá en otro por cualquier cosa- este fue tan amable que Marizza aceptó sin negarse y me dijo - Bien Luji, nos vemos en el hotel, te quiero- me sonrió y se fue. 

yo le dije al otro señor que me esperara un momento, tenía que encontrarme con Pablo, para saber qué haría yo, mientras que él iría al encuentro de Marizza. Este me tocó del hombro y me dijo- querías ir a donde estaba Marcos, ¿verdad Lujan? - le sonreí incrédula, ya que Marcos estaba en Londres y eso estaba lejos de Perú. En eso de su valija, saca un sobre y me lo da - ¡Corre, que el vuelo sale en una hora, apurate que lo perdes !! - me lo dijo mientras me empujaba... sabía que Marizza no me perdonaría, si es que el plan salía mal pero me dije- somos jóvenes, debemos vivir riesgos- y corrí hacía migraciones nuevamente. 

Pablo tomó el Remisse con mi nombre 

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