Rebelde Way x siempre rebeldes

Olvidar, sanar y sonreír (II)

-----------------------Narra Manuel-----------------------------

saber que Franco y Sonia estarían con nosotros en Cebú por lo menos unos días me hacía estar calmado, no porque ellos pudieran mejorar la situación, sino porque podrían ser mi soporte y el de Mía ante cualquier cosa. Estos pensamientos hicieron que pudiera dormir sin problemas mientras esperaba llegar a ese destino paradisiaco esperado por mi novia. 

las horas pasaron sin notarlo hasta que escuche... 

-- Les habla el capitán, bienvenidos a Filipinas. La temperatura en el en Cebú es de 35 C° y les recordamos que existe una tarifa de uso aeroportuario que tendrán que pagar una vez que pasen migraciones, esperamos que vuelvan a volar en Qatar Airlines- 

me voltee y con mi mano izquierda moví a Mia lentamente para que se despertara. Ella al sentirme se sacó rápidamente su tapaojos y me sonrió. Luego me dijo - Amor, ¿ya tenemos que bajar? 

yo la miré y le dije sonriéndole tiernamente - Ya llegamos, pero aún tenemos que esperar un poco antes de bajar, escuchaste ¿lo que dijeron de la temperatura?- ella me miró sorprendida y me dijo - ¡No! ¿qué dijo el capitán?- 

- ¡Estaremos a 35 C°!- la miré sonriendo , ella me miro y me dijo gritando ¡¿tú sabes lo malo que es el sol para la piel?! lo dijo mientras se tocaba el rostro como una chiquilina. Yo le sonreí y le dije - dale, ya luego pensamos en eso, hay que bajar que las aeromozas ya quieren salir del avión- 

- ¡dale vamos! me tomó de la mano y salimos juntos rápidamente- 

caminamos juntos de la mano, ella siempre adelante mío corriendo de tanto en tanto para pasar migraciones rápido e irnos al hotel con el que tanto soñaba. 

llegamos a migraciones sin ningún problema, presentamos los papeles y nos dijeron - ¡Bienvenidos a Cebú! recuerden que el pago de lo impuestos se hace en pesos filipinos- 

Mia, miró al agente y le dijo - ¿perdón? ¿No podemos pagar en dólares? mi Daddy me dijo que él pagó en dólares cuando vino aquí hace unos años - el agente la miró sorprendido y dijo  - ¿DADDY? - yo lo miré y tomé la palabra antes que nos detuvieran por las palabras de mi novia - Señor disculpe- dije rápidamente- Lo que ella quiere decir es que su papá le dijo que el pago de esos impuestos podría ser en dólares también-  Él me miro y dijo ... PESOS FILIPINOS, gracias - 

sonreí fingidamente, tomé a Mia de la mano y la llevé a la puerta de salida. 

Ella me miró, me sonrió y se dejó llevar por mí.

Cuando ya estábamos cerca a la salida, Mia decidió escribirle a Franco y cuando recibió una respuesta de él me dijo - Mi Daddy dice que en 30 min llegará el remisse debemos esperar- yo subí y baje los hombros para mostrarle que no había problema por eso, le me reí dulcemente mirando al suelo y le dije - podemos comer algo, muero de hambre- 

ella me miró a los ojos y se acercó a mí, dejó caer la bandolera que tenía colgada del hombro y me beso, el beso que me dio era tan tierno que los dos dejamos de besarnos para juntar nuestras narices y solo sonreír. Luego me dijo- por ti yo como en cualquier restaurante aunque no sea de 5 estrellas, mi amor - yo la miré y me reí. 

ella empezó a caminar rápidamente mientras que yo iba con el carrito con todas las maletas. Empujar el carrito era mi trabajo como el novio sobreprotector que era de ella- eso me encantaba- a pesar que no le dijera eso nunca - Manuel, aqui hay que quedarnos- me dijo ella señalando un restaurante grande de pastas que estaba frente a nosotros- 

---Entramos y buscamos una mesa cerca de una ventana donde se podía ver el estacionamiento del aeropuerto---

Todo estaba bien o por lo menos hasta ese momento