Oh, no...

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A la noche Kevin se tuvo que ir, y no vendrá hasta después de dos semanas o más.

Nos despedimos y sentí como un cacho de mi se iba, pero yo se que el va a volver, lo sé y pronto.

Kevin le dijo a Juan que me cuidara y como Juan había llegado recientemente a Cali, Kevin le sugirió que se quedase en nuestra casa, y Juan muy convencido aceptó.

Ahora Juan está por venir a casa con sus maletas y no sé si voy a estar preparada para convivir con él, otra vez, ya que la última vez fue todo un desastre.

Tocan el timbre.


-Ya voy-me levanto del sofá y me dirijo a abrir, Dios, me sudan las manos de los nervios.


Abro la puerta y me encuentro a un Juan muy sonriente.


-Hola, pasa-le digo sin mucho entusiasmo.


El solo asiente y pasa con dos grandes maletas.


-Te enseñaré tu habitación, ven-le hago un ademan con la mano.

Subimos las escaleras y pasamos por el pasillo hasta el fondo, ahí queda mi habitación y por mala suerte la mía la de Juan queda al lado y para joderme mucho más, hay un especie de conexión entre las dos habitaciones. ¿QUÉ CARAJOS?

-Aquí está tu habitación-le señalo.- y por favor no se te ocurra pasar por esa puerta-le digo señalándole la puerta marrón que se encuentra en el fondo al lado de el baño.


-¿Por qué?-pregunta con curiosidad.

-Solo no pases y ya. ¿Ok?-le digo con brusquedad.


El haciendo caso omiso entra en la puerta y en un minuto está en mi habitación.


-Oh, lo dice porque no quiere que la vea cuando duerma, ¿reina?-se ríe.-pero si ya la he visto dormir.


-Juan! ¿Por qué nunca me haces caso?- le chillo.


Pasa de mi pregunta y vuelve a su habitación, empieza a desempacar su ropa y a meterla en el armario. Por un momento me pregunto qué hubiese pasado si no hubiéramos peleado ese día.


-Shenna, me ayudas con esto en vez de estar mirándome...- sonríe.- ya sé que estoy muy bueno- se gira y con las manos en alto enseña su cuerpo.


Me saco el pensamiento que tenía de la cabeza y me dispongo a ayudar.

Después de 1H ayudándole, este sí que tiene ropa, por fin acabamos.

Bajamos abajo y nos ponemos a ver la tele hasta que me quedo dormida del cansancio, necesito los brazos de Kevin.

Siento que unos brazos musculosos me llevan a alguna parte, pero en este momento lo único que me importa es dormir.


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Me despierto por el insoportable calor que tengo, y porque siento un brazo en mi cintura, seguramente es Kevin.

Oh, no, espera.

Kevin se fue ayer.

Me doy la vuelta bruscamente y tiro a JUAN al piso.


-Auch.-dice tocándose el brazo.- me has hecho daño Shenna.


-Juan, que haces aquí y no estás en tu habitación?- me levanto de la cama y me hago a un lado.


-Es que necesitaba abrazar a alguien-hace un puchero.


Es gracioso haciendo pucheros, espera a dicho que tenía que abrazar a alguien, será que me habrá extrañado...

No sé, no lo creo.


-Sí, te he extrañado mucho Shenna.-dice Juan sacándome de mis pensamientos.


Mierda lo he dicho en alto.

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Hey, aquí otro capítulo....

No me dijeron que querían así que...

Cuando quieran, me dan ideas...

Se me están esfumando... por eso no lo he hecho tan largo...

Besos Yanii J

Nunca imaginé (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora