2-. Niñez

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–Buen día niños, el festival escolar de primavera será en marzo, tenemos dos meses para organizar nuestro evento.
 
Anunció con emoción la maestra en aquella aula. Están a comienzos de enero y si quiere que todo salga bien tiene que ponerse a trabajar y organizar a sus niños.
 
–Pensé en una pequeña obra de teatro ¿les gustaría?
 
–¡Si!
 
Los infantes dieron respuesta afirmativa a la interrogante de la maestra y la mujer emocionada aplaudió.
 
–Bien ¿qué cuento les gustaría representar?
 
–¡La princesa y el sapo!
 
–Ese cuento es muy tonto Emma ¡mejor hay que ser tortugas ninja!
 
–Mikey-kun ese no es un cuento.
 
El pequeño rubio hizo un puchero molesto al ser corregido por su compañero menor Takemichi.
 
–¿Que les parece Blanca Nieves?
 
Entusiasmados, los niños dijeron que si en un grito de emoción, así que sin esperar más, la maestra comenzó a hacer papelitos con los distintos roles que habría dentro de la supuesta obra.
 
–Bien, aquí está. Independientemente del rol que les toqué, no podrán cambiar.
 
Dijo sonriente y el "elenco" quedó de la siguiente manera:
 
Kokonoi había sacado el personaje del príncipe, cosa que lo hizo presumir orgulloso; el pequeño Kisaki había sacado el personaje de la reina malvada y los niños rieron un poco diciendo que le quedaba un poco el personaje; el cazador sería Hanma; los siete enanos estaban conformados por Hinata, Takemichi, Chifuyu, Mikey, Haruchiyo, Baji y Kazutora; y por último, el personaje de la princesa lo haría Inupi, quien miraba algo desconcertado a la maestra cuando se lo dijo.
 
–Pero no soy una niña.
 
–Eso no tiene nada que ver Inui-Kun, es solo una obra.
 
Consuela la maestra y suena lógico para el pequeño, en su pequeña mente inocente no le miraba lo malo.
 
–El personaje de enano le queda bien a Mikey, que sea dormilón.
 
Baji bromea y ríe mientras está sentado en su mesita dibujando junto a Kazutora y Chifuyu.
 
–Nomas no te pateo por que ya es hora de mi siesta.
 
Amenaza el pequeño rubio y en seguida da un bostezo, la maestra no interviene por que lo ve acomodarse en la mesa, usando sus manitos de almohada y cerrar sus ojos. Mikey es un caso perdido.
 
–¡Aww! Que lindo. Inupi-chan es la princesa de Koko-chan y vivieran juntos y felices por siempre.
 
La pequeña Hinata suelta un chillido de emoción junto a su a liga Emma, pero la maestra no está muy convencido de aquello ¿como explicaría que en los cuentos debe de ser una pareja de hombre y mujer? Bueno, por ella no hay problema, pero la sociedad es un monstruo que al mínimo rayo de sol, lo destruye.
 
–Hina-chan las cosas no funcionan así.
 
Explica algo nerviosa pero es ignorada por Koko e Inupi.
 
–¿Escuchaste eso Inupi? ¡estaremos juntos por siempre!
 
–¡Si!
 
Gritan ambos niños llenos de entusiasmo mientras se abrazan con cariño mientras la maestra suspira resignada, son niños después de todo, no puede prohibirles el contacto físico; los niños son muy de demostrar su cariño de aquella manera.
 
–Bueno mis niños, a trabajar.
 
Indica y las preparaciones de la supuesta obra comienzan. Los niños ya saben lo que tienen que hacer, se saben el cuento casi de memoria por que adoran que la maestra les cuente ese relato una y otra vez, así que ella solo está para ayudarlos que no se equivocan. Guiarlos e indicarles como hacerlo bien. Como ahora por ejemplo.
 
–¡Koko no, en la boca no!
 
Escandaliza cuando ve al niño acercar su boquita a la de su amigo para despertarlo del hechizo en el que cayó gracias a la manzana que le dio Kisaki.
 
–¡Pero así va el cuento!
 
Replica molesto al ser interrumpido.
 
–Sí, pero los dos son niños. Eso no se hace.
 
–¿Y por que no?– curioso, cuestiona.
 
–Pues... verás, eso solo se hace con alguien a quien quieras mucho– trata de que suene simple la explicación, que no le sea difícil entender.
 
–¡Yo quiero mucho a Inupi!– declara con un grito mientras abraza al mencionado, quien ya se había enderezado de su poción.
 
–Solo lo hacen los adultos, no los niños– listo, con eso se acabo.
 
–Además los besos son asquerosos— Baji se mete a la conversación con aquello y una mueca de asco.
 
–¡Mentiroso! Te he visto besarle los cachetes a Fuyu-chan– Emma lo delata y ambos pequeños se sonrojan al instante.
 
–¡Es diferente! Fuyu es lindo.
 
–Inupi también lo es– contraataca Koko.
 
Y los dos mencionados estaban que morían de vergüenza por lo que decían sus respectivos amigos.
 
–Ya basta niños. Todos son lindos. Koko, en la obra le dará un beso en la frente a Inui-chan, que no se te olvide.
 
Así los días fueron pasando, los pequeños se divertían practicando la obra y los que no tenían personaje, ayudaban a la maestra a preparar las decoraciones, Baji molestaba a Mikey por que según el pelinegro, lo de enano le iba bien a Mikey y comenzó a llamarlo así, siendo detenidos más de una vez a punto de iniciar una mini pelea. Por su parte, Koko e Inupi de divertían con su papel en la obra, claro que cada vez que intentaba darle un beso en la boquita la maestra hacía un escándalo para que no lo hiciera. Era un simple beso ¿qué tenía de malo? Ella dijo que lo hacían las personas que se quieren mucho, pero solo los adultos, pero él quiere mucho a Inupi y quiere demostrarlo.
 
El día de la obra llegó y el mini escenario estaba listo, los padres de familia se iban acomodando en los asientos correspondientes en el salón, los niños estaban emocionados y la maestra los acomodó para la entrada y la función empezó.
 
La mini obra de teatro iba de maravilla, uno que otro pequeño error, pero son niños, no se les puede pedir perfección y con que ellos se diviertan esta bien, la maestra solo cruzaba los dedos pidiendo que Baji y Mikey no iniciaran un pleito en mitad de la obra.
 
Por suerte no fue así y todo estaba yendo bien, pero había una cosa que os tenía preocupada; la escena del beso. La señorita rezaba por que Koko siguiera la orden del beso en la frente, en los ensayos siempre lo tenía que corregir y no quería que alguno de los padres hiciera mal comentario de aquello.
 
La escena llegó y la joven mujer se mordía las uñas, Koko dijo su diálogo y comenzó a acercarse después a la carita de Inupi y.... dejo un corto beso en su boquita, apenas un rose. Entonces sonrió feliz y la función continuó dando por concluido el espectáculo.
 
Para su buena suerte, no hubo malos comentarios, si muecas de desagrado y confusión, pero nadie habló y la mujer estaba más que agradecida.
 
 
Los pequeños se reunieron aún lado del mini escenario a petición de la maestra y esta los felicito a todos por el gran trabajo hecho, les pidió que volvieran a subir al escenario para tomarse una foto y les dio a todos una posición, dejando a Koko e Inupi enfrente y al centro, le pidió a uno de los padre tomar una foto con su cámara y la mujer se posicionó atrás de los niños.
 
 

 
~Años después~
 

 
–¿Que estas viendo?– preguntó una voz a sus espaldas.
 
–El álbum de recuerdos– contestó Inupi.
 
Entonces Hajime se acercó por la parte de atrás del sofá, donde estaba su pareja cómodamente recargado y lo abrazó, rodeando su cuello.
 
–Mmm recuerdo ese día, si parecías una princesa.
 
Dice con sinceridad y una sonrisa burlona al ver la fotografía de aquel día en preescolar, aquella donde actuaron en una pequeña obra y a Inupi le había tocado ser su princesa, en aquella foto se miraban tan pequeños, tan felices y siempre juntos, incluso en esa foto lo estaban. Juntos. Tomados de la mano.
 
–Oh vamos, cállate.
 
Responde el otro cuando escucho el comentario de su pareja y le dio en la cara con uno de los cojines.

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Bueno, aquí el segundo día ^^

La neta no tenía ganas de escribir, ni sabía que escribir XD pero se me vino a la mente esto mientras dormis y dije "suena bien, lo tomo" y aquí esta UWJWJJA

Kokonui Week [2022]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora