Uno Más / Sebastián Córdova

28 - Uno más de su vida.

Sebastián se encontraba bajando del avión, el y su equipo habían viajado a Pachuca para el partido que tendrían como se marcaba en la tabla semanal.

El chico iba de lo más serio, era importante para el ese partido. Tenía la titularidad después de varias semanas, era sumamente importante. En cambio habían dos cosas que influian, la primera era que no estaba seguro de que el partido se llevará a cabo.

Una tragedia del medio había sucedido, tenían que tomar medidas drásticas que no estaban en sus manos.

Lo segundo era que en ese partido, iba nada más y nada menos que contra Kevin Álvarez.  Sebastián no se sentía inseguro en cuanto a lo que tenía en ese momento con Julieta, ella le dejaba en claro cada poco que no estaba interesada en alguien más que el.

Su rostro reflejo paz cuando habían llegado al hotel, ese día le tocaba ser compañero de cuarto con Jesús Angulo. Se sentía más en confianza con el, de todos los demás era con quien mejor había encajado.

Ambos chicos jugadores de Tigres se fueron a su respectiva habitación compartida, estaban bromeando y se reían a cada poco.

— ¿ piensas tomar tus horas libres? — le cuestiona Angulo a Sebastián.

— Pues si, ni siquiera es seguro que juguemos mañana así que, si.

— Yo voy hacer videollamada con mi novia, ya sabes, si no le contestó se desespera — canta la última frase.

Ambos chicos ríen, pues Angulo lo ha hecho al ritmo de aquella famosa canción de Plan b.

Sebastián se despide de Jesús, pues como dijo tomaría su tiempo libre y saldría a recorrer el lugar. Al menos tenía planeado ir y tomar un café.

Camino por algunas calles, veía a su alrededor observando. No era la primera vez que iba a Pachuca, así que un poco ya conocía.

Unas cuadras después llegó a una cafetería, decidió que tomaría un café mientras hablaba por llamada a Julieta. El lugar parecía ser acogedor, no habían tantas personas, así que era perfecto para su plan de tarde-noche.

— Buenas tardes, bienvenido. ¿ que podemos ofrecerle? —

Una chica aparece en su campo de visión, vestía lo que parecía ser el uniforme del lugar, por lo que podía ser la mesera.

— Buenas tardes, quiero café con leche de almendras y una pieza de pan dulce por favor.

— Por supuesto, ¿ gusta su orden es para tomar aquí o llevar?

— para tomar aquí

— perfecto, le indicó una mesa libre.

La chica amablemente guiaba a Sebastián hasta al otro lado del lugar, justo al Fondo.

Se retiró no sin antes avisar, que dentro de unos minutos su orden estaría lista. Entonces Sebastián sabía que no quería perder más tiempo, buscó el número de Julieta y espero a que la chica respondiera.

Julieta no tardo mucho en hacerlo, pues estaba esperando la llamada muy entusiasmada.

— ¡ Sebastián! — Chillo de emoción al responder

—  Hola juli, me alegra que me recibas así

— Como no iba hacerlo, esperaba entusiasmada a tu llamada.

— ¿ un verso sin esfuerzo?

— Exactamente — ambos rieron.

— ¿ llegaste a Pachuca?