𝗘𝗻 𝗮𝗺𝗼𝗿 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗶𝗴𝗼 ‖ 𝟮𝘆𝗲𝗼𝗻 G!P -EN PAUSA-

Capítulo 49

Pov Jeongyeon

─ ¿Qué… mierda?

Maldecí, no sabía dónde carajos estaba, estaba totalmente perdida, además de que mi cabeza y entrepierna dolían a no más poder.

Lo único que sabía era que no estaba en mi casa.

─Por fin despiertas…

Escuché aquella voz, esa voz que tanto odiaba en mi vida.
 
─ ¿Qué carajos haces acá? ─pregunté.

─ Mejor dicho, ¿qué haces tú acá? Esta es mi casa ─sonrió maliciosamente.

─ Dime tú.

─ Pues… ayer tuvimos una larga sesión de sexo, y veo que lo disfrutaste ─señaló a mi miembro flácido.

Mi ceño se frunció levemente al escuchar lo que dijo.
 
─ ¿Qué me hiciste?

─ No me culpes únicamente a mí, tú también participaste, por eso hay tantos condones regados por la cama.

Miré hacia la cama a vi los condones llenos de semen y tirados en la cama, me daba asco.

─ Derramaste mucha leche no solo ahí, también en mi boca.

─ No seas asquerosa… ¿solo me querías para eso? Mejor anda a buscarte un muñeco inflable, o folla a cualquier persona que esté por ahí, de todas maneras, eres una zorra que se acuesta con cualquiera.

Ella solo sonrió levemente al escuchar lo que salió de mi boca.

─ No te quise solamente por eso… también te quise por Nayeon.

Abrí los ojos al escuchar su nombre.

─ ¿Qué mierda le hiciste?

─ Yo no le hice nada, fuiste tú quien arruinó todo.

No tenía idea alguna a qué se refería.

Al parecer, ella leyó mi expresión, ya que sacó su celular y puso un video.

─ ¿Sabes quién me está follando? ─soltó una pequeña carcajada.

Inmediatamente me paré de la cama sin importar que estuviera desnuda y caminé a pasos lentos hacia ella.

─ Supongo que ya sabes que fue lo que hice con él, ¿no?

A ese punto no podía vocalizar ni una palabra.

Ella rio al ver mi expresión y me mostró un chat.

Era el número de Nayeon.

─ Ella ya vio el video, vio todo lo que me hiciste.

Jennie rio cínicamente.

─ ¡TE MATARÉ! ─grité furiosa, impactándola contra a la pared. Al momento de impactarla ella hizo una leve mueca de dolor.

─ ¡HIJA DE PUTA! ¡TE MATARÉ! ─gritaba furiosa.

─ Agradéceme, te salvé de una zorra.

─ ¡NO TE ATREVAS A INSULTARLA! ¿¡POR QUÉ MIERDA HICISTE ESTO?!

Yo exigía que me respondiera seriamente, mas ella me miraba fijamente, sin decir ni una palabra.

─ ¿¡QUÉ MIERDA TE HIZO?!

Mis ojos estaban soltando pequeñas lágrimas por la rabia que sentía.

─ Me quitó muchas cosas que yo quería, es motivo suficiente para odiarla.

Realmente no podía creer lo que estaba diciendo.

─ Ella no te ha hecho nada… ¿por qué la odias tanto? ¿por qué le haces daño?