Always and Forever |YoonJin|

Capítulo 4: Decepción

Desde el asiento del conductor, con sus ojos perdidos en el camino que se extendía frente a él, no veía nada de lo que tenía ante sí. En su mente, sólo veía a Jin. Recordaba cada detalle de su rostro, cada línea y curva, y aún así no se comparaba con su estado actual. La fresca y tranquila juventud parecía que abandonó su ser para dar paso a una recto y distinguido atractivo.

Yoongi no quería soltar a Jin nunca más. Lo había encontrado o viceversa, no importaba. Era como si todos los años de separación y dolor hubieran desaparecido, como si Jin y él estuvieran juntos otra vez, como antes de que todo se fuera al infierno. Era un momento de felicidad y paz, un momento que Yoongi quería retener para siempre.

La bruma que cubría su alrededor desde el restaurante se desvaneció momentáneamente al escuchar la voz contraria.

- ¿Qué puerta?- pregunta Seokjin lentamente desde atrás suyo.

Yoongi parpadea y vuelve a sus sentidos en busca de la llave de su habitación. Mete sus manos a su bolsillo en búsqueda de estas,  demasiado ido como para notar la forma en que la mirada de Seokjin se detiene en su ser con otras intenciones que las propias para esta noche.

Abre la puerta y sus dedos se mueven para tocar al otro modestamente al pasar junto a él.

Desde el beso en el restaurante no pudo mantener sus manos alejadas del cuerpo de Seokjin, y menos ahora que la oscuridad les da libertad a sus actos.

- Eres tan bromista, actuando frío conmigo durante la cena - Yoongi tira de él hacia adelante, la impaciencia sacando lo mejor de él. Ha tenido suficiente de esta estúpida actuación. Se inclina y no duda en reclamar los labios de Seokjin como suyos.

Seokjin jadea y Yoongi fácilmente desliza su lengua dentro de su boca caliente, húmedo, ferviente. Yoongi lo besa con fiereza, como si compensara todo el tiempo perdido, como un castigo por hacerlo esperar. Siente que Seokjin se tambalea hacia adelante, con las piernas un poco flojas y las manos tensas contra los hombros de Yoongi.

La luz de una lámpara de mesa que da un brillo suave a la habitación los recibe. Cuidadosamente ubica a Seokjin sobre el juego de cama azul claro mientras de pie retira su propia ropa con rapidez y soberbia al ver la mirada fija de deseo del otro cuando su camisa abotonada va dejando a su paso la vista de su pecho firme, han estado disimulando de muy mala manera su deseo por poseer el cuerpo del otro durante todo el camino al hotel.

Su cuerpo ligeramente bronceado con el pasar de los minutos se llenaba de mordidas semi-profundas debido a la reciente dentadura de licántropo de Min mientras este adora cada centímetro de su cuerpo lascivo y retorcido. Seokjin con su respiración un tanto errática intentar mantener su voz baja, lo cual es difícil de hacer ya que cada marca y cada palabra lo hace gemir y sollozar de placer.

El vampiro siente que una urgente sensación de posesión le sube por el pecho cuando encuentran sus miradas. Era ahora, la emoción precipitada del encuentro lo hizo actuar con desesperación, debían detenerse y hacer valer la larga espera en la que habían estado. A pesar de las actitudes calculadas y distantes, parecía que Seokjin también lo pensó.

Yoongi sintió un cosquilleo en su estómago, había estado anhelando este momento desde hace siglos. Era el mismo Jin, su Jin, con sus suaves y brillantes ojos. Min se acercó lentamente, intentando saborear cada momento como era posible.

Seokjin acarició suavemente la mejilla de Yoongi con sus dedos, sus ojos oscuros llenos de una mezcla de dolor y anhelo. Dejándose llevar, cerró los ojos y se entregó al momento, sintiendo la delicadeza de los labios de Yoongi contra los suyos