Sheriff Uno: El Brillo Del Alba

Capitulo 41

Varias imágenes aparecen en la mente del vaquero...

El orfanato dónde creció junto a su hermano... la escuela militar... cuando aprendió a luchar... la universidad donde descubrió su pasión por la arqueología... cuando conoció a su esposa... el museo donde trabajo... cuando nació su hijo... cuando su hija... y ese cuarto donde tenía un revolver a la mano apuntando a su cabeza

???: aunque dispares no va a pasar nada, no puedes morir

El antes conocido como Roland Delphin voltea a ver al señor de cabello blanco con una mirada vacía

Roland: ¿quien eres?

???: un gusto, soy Morgan, quiero ayudarte

Roland: bueno, toma... dispara

Morgan: no voy a hacer eso

Roland: pues piérdete

El perdido Roland hizo caso omiso a sus palabras y simplemente apretó el gatillo, pero no salió nada

Morgan: ¿buscabas esto?

El ángel le muestra la bala en la mano

Roland: ¿que clase de monstruo eres?

Morgan: monstruo no, lo correcto sería decir ángel

Roland: ¿cómo los que sirven a Dios? si como no, te creía con más ojos

Morgan: primitivos, no sirvo a ningún dios, yo sirvo a los humanos

Roland: si es así, mátame de una vez

Morgan: ¿no quieres saber que pasó ese día?

Roland: lo único que se es que un extraño charro me ofreció salvar a mi esposa a cambio de mi brazo, y ahora no solo la perdí a ella y a mi hijo, ahora tengo este brazo de bestia

Roland le enseña el brazo con apariencia monstruosa al ángel quien lo observa curioso

Roland: entonces, ¿sabes que es esto?

Morgan: eso es un brazo de un antiguo demonio un rey maldito para ser exactos

Roland: ¿y sabes cómo puedo quitarmelo?

Morgan: no, pero se que puede ser útil

Roland: ¿que es lo que quieres?

Morgan: hay mucha gente que ha sufrido, gente que ha sido víctima de los demonios, pero a diferencia de ellos tu eres el único que puede hacer algo al respecto

Roland: ¿de que hablas?

Morgan: ayúdame, y nadie sufrirá lo mismo que tú

Roland: no tengo porque hacerlo, no me queda nada que salvar

Morgan: ¿enserio?, ¿vas a decirme que no tienes a nadie?

Roland: mi hija... y mi hermano... estarían mejor si muriera ¿no?

Morgan: ¿pero si ese charro vuelve a hacerles daño y no hay nadie que lo enfrente?

Roland: si lo pones de esa manera... asumiendo que quiera ayudarte, ¿es posible que lo encuentre a el?

Morgan: no te aseguro nada, pero probablemente encuentres una pista de su paradero

Roland: ¿sabes? de niño soñaba con ser un superhéroe, tal vez debería seguir con ese sueño

Morgan: más que un héroe serías un guardián, un vigilante, incluso hasta un sheriff

Roland: me gusta como suena eso, creo que ese será mi nombre de héroe