Un Gol A Tu Corazón.

Capítulo 26. El Baile.

Aldo.

Ella le da un trago a su bebida mientras la observo sin que ella lo note...Es hermosa,muy hermosa.

-¿Estás bien?- le pregunto.

- Si es solo que,hay mucho ruido - me responde y dejo mi vaso,tomo su mano y la llevo a un pequeño balcón alejándola un poco del ruido.

-¿Mejor?- Pregunto.

- Mucho mejor - Responde.

- Cuentame de ti,ya sabes un poco de mi,ahora yo quiero saber mas acerca de ti - digo ella me mira y sonríe.

- La verdad es que no hay mucho que contar - hace un pausa - Mis papás también son divorciados,mi madre esta al cuidado de mis abuelos vive con ellos en otra ciudad,y mi padre también vive en otra ciudad casi no hablo con él,y visito a mi madre en navidad,cumpleaños y fechas así.

- ¿No tienes hermanos? - le pregunto.

- No,soy hija única, bueno al menos de mi mamá, mi papá tiene otro hijo - me dice.

-¿Y que tal te la llevas con él?- indago.

- La verdad es...que no lo conozco,osea se que él existe y él también sabe de mi existencia pero nada más - continua - no es que tengamos la súper relación de hermanos.

- Entiendo - le respondo - Mi padre también tiene otro hijo,es mucho menor que yo,pero es...increíble - concluyo.

- Se llevan bien entonces - dice.

- Si,eso creo - sonríe.

-¿Y como te llevas con tu madre?- me pregunta.

- Bien,mi relación con mis padres es buena,no los juzgo por sus decisiones,los quiero y eso es lo que importa - asiente.

- Tienes razón - dice.

Nos quedamos en silencio unos minutos,vuelvo a mirarla y quedo encantado es perfecta,todo en ella lo es, que me pasa con ella,que es esto que siento cuando estoy con ella,nunca había sido tan fácil hablar de mi familia con alguien y con ella simplemente fluyeron las palabras...ella me mira y sonríe.

- ¿Pasa algo?- Me pregunta.

-¿Quieres bailar?- Le pregunto.

-¿Tú bailas?- Pregunta sorprendida.

- Hay muchas cosas de mí, que aún no conoces - Le respondo tomando su mano llevándola a la pista.

Justo cuando llegamos a la pista la música,cambia y empieza a sonar una bachata de Romeo Santos,poso mis manos en su cintura y empezamos a bailar al ritmo de la canción... Ella se mueve de manera ágil dejándose guiar a la perfección por mí, pego mi frente con la de ella mientras la canción suena,ambos cerramos los ojos y solo seguimos bailando,la letra de esa canción describe perfecto lo que siento cuando estoy con ella...

Tú... eres el pecado más divino una víbora sexual,calentura me embeleses con tus técnicas perversas,si te vieran censuraran tu cintura...

Joder,como es que podemos entendernos tan bien en todo,como es que me sigue el ritmo sin ningún problema,como puede ser tan perfecta,me siento tan bien con ella que me dejo llevar por la canción...

- Ya adivinaste el crucigrama mi ninfómana en llamas,sabes bien soy bellaquito y tu eres provocación - le canto ella abre los ojos me mira y sonríe - Y yo seré tu esclavo y si es a tu lado ...muero feliz - sigo mirándola fijamente a los ojos.

Termina la canción y nos separamos ella me toma de la mano y volvemos al balcón en donde estábamos antes,sonríe antes de darle un trago a su bebida.

- Eso...fue...increíble - dice agitada - No sabia que bailaras tan bien - me mira.

- Te dije que habían cosas de mi que aún no conocías - le respondo.

-¿A si?...¿como cuáles?-pregunta coqueta acercándose a mi.

- Lo buen amante que me hace el alcohol - le respondo,acercándome más a ella.

Llevo una de mis manos a la abertura de su vestido,tocando su piel, ella me mira y yo sigo subiendo hasta sentir sus bragas,llego hasta el borde de estas y en un rápido movimiento la giro haciendo que quede en donde yo estaba y meto mi otra mano debajo de su vestido y empiezo a bajar sus bragas lentamente hasta quitárselas por completo,me levanto y guardo sus bragas en el bolsillo de mi pantalón.

- Sabía que ese vestido, se veía mejor,sin nada por debajo - le digo mirándola ella me sonríe.

- Eres un pervertido - me dice sentándose.

Ella mira su reloj,y me mira.

- Ya es tarde - dice - tengo que regresar a mi casa.

Me arrodillo frente a ella,quedando casi a su altura.

- Quédate conmigo esta noche - pido.

Ella me mira y llevo una de mis manos acariciando su mejilla e introduzco mi dedo pulgar en su boca y húmedezco mis labios ante el contacto.

- Por favor - Suplico y ella asiente.

Ella posa sus manos en ambos lados de mi cara,llevándome a sus labios besándome, ya la he besado antes pero ese beso,no se sintió como los de antes ese beso me hizo sentir cosas que no había sentido,despertó sentimientos en mi que pensé no sentir jamás, esa mujer me esta haciendo sentir esta haciendo que mi corazón vuelva a acelerarse,y eso me asusta no quiero que alguien vuelva a lastimarme no quiero volver a ser vulnerable ¡no quiero!.

Termino el beso,separándome lentamente de ella,la miro y esos ojos me desarman,Joder que me esta pasando,en que momento sucedió esto,en que momento la deje entrar.

Caigo sentado a sus pies ella me sonríe, y me encanta joder me encanta que me mire como solo ella sabe.

-¿Qué es lo que estoy tomando?- Pregunta mirando su vaso.

-¿Por qué?- Le respondo.

- Pues por que ya me emborrache - Dice riéndose.

- El trago no tiene nada que ver,es solo que estas tomando muy rápido - Le digo.

- Si,es que no estoy acostumbrada a tomar,es todo - Dice sin darle mucha importancia.

- Eso no hace falta que lo digas - Le sonrío - Eres pésima tomando.

- Hey - Me dice haciendo un puchero - No seas así... - Dice enojada.

- Así como...sincero - aclaro.

- No...grosero - Afirma.

- Yo soy grosero... Aquí la única grosera eres tu - Digo señalándola.

- Yo...a ver ¿cómo por que?- indaga.

- Por que vienes a mi casa,con un vestido como ese - Se mira.

-¿Y que tiene de malo mi vestido?-Pregunta.

- Todo - Digo - Ese escote,lo bien que te queda y si a eso le sumamos que no tienes ropa interior - Niego pelliscándome el puente de la nariz.

- No es mi culpa que un pervertido me halla robado las bragas - Dice.

- Yo no las robé, solo las tomé prestadas - Le respondo.

-¿A si?,¿y que vas hacer tu con mis bragas?- Pregunta divertida - No creo que tu pequeño amigo quepa allí.

- No es para eso - Digo.

-¿Entonces?- Pregunta.

- Son para masturbarme,con algo que tenga tu olor - Le digo acercándome a su boca y traga grueso.

- Eres un enfermo - Me dice sonriendo y asiento.

- Vamos a mi habitación y te muestro cuan enfermo estoy - Le digo aún cerca de su boca - Anda Caramelo,nadie notará que no estamos - Me levanto y tomo su mano.

Autora: Hay Hannah va aclarar sus sentimientos y termina cayendo en la tentación 😒,bueno ahora a ver que pasa,por que Aldo esta admitiendo que le pasa algo con ella.