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EMILY KENT

Si no estuviera a metros sobre el suelo estaría desmayada en el suelo, no se cómo pero Eddie y yo bajamos del árbol con mucho cuidado de no caer y al ver que ya no estaban esos hombres caminamos con tranquilidad hacia la ciudad.

Tan pronto estuvimos en la civilización tomamos rumbos distintos sin decir palabra alguna, aún sentía la adrenalina recorrer mi cuerpo como electricidad y para una persona que no corre mucho es demasiado ejercicio.

En cuanto estuve a salvo en mi departamento caí dormida en mi cama, estaba demasiado cansada como para mantenerme en pie o ir a trabajar, mandaré un mensaje al rato.

Desperté horas más tarde con varios mensajes de André y mi jefe, a ambos les dije que me encontraba indispuesta y para mi suerte se tragaron la mentira, por otro lado tenía mensajes de Eddie preocupado diciendo que se sentía horrible con temperatura, un apetito interminable y una energía increíble.

Tampoco le quise responder, primero me dediqué a revisar las fotografías que había tomado con mi celular sobre la corporación Live, todas estaban en orden y tenía una buena resolución de las cosas que estaban ahí.

—¿Pero que carajos..? —susurre al ver que la grabación de mi celular capto algo cuando Maria se enfrentó a Eddie.

Una cosa negra estaba entre los dos pasando al cuerpo de Eddie, me quede helada al ver como al salir de esa mujer quedó en el cuerpo de Eddie.

¿Esa cosa nos salvo?

Me levante de mi cama con rapidez para tomar mi bolso, tenía que ir como estaba Eddie y esa cosa. Subí a mi auto tomando rumbo a su departamento.

—Por favor que no esté muerto, diosito se que siempre te pido muchas cosas y digo que mi vida es injusta pero te pido que lo cuides de ese alíen.

Creo que estoy comenzando a perder la cordura, ya hablo con diosito y no soy ni tan religiosa. Estaba oscureciendo y las calles estaban completamente vacías a excepción de la vida nocturna y algunos ebrios.

Eso me daba mas miedo, esa baba asquerosa tiene vida y está en el cuerpo de Eddie, si las cosas se ponen feas llamaré a los cazafantasmas.

No obstante mi teléfono sonó interrumpiendo mis pensamientos, lo tomé entre mis manos para ver el contacto pero era un número desconocido, aún así conteste.

—¿Quien habla? —pregunte.

Buenas noches, ¿eres Emily?

Dude unos segundos en responder, en estos tiempos no se sabe que demente está detrás del teléfono.

¡Dios santo sone como mi abuela!

—Ella habla, ¿quien eres?

No me conoces, pero Eddie me pidió que te llamara y pues aquí estoy.

¿Le pasó algo a Eddie?

Padre nuestro que estás en el cielo...

Eh no, solo tiene fiebre y un malestar estomacal pero es todo —pauso— no puede irse solo y no quiere que Anne ni yo lo acompañemos.

Su estupido orgullo —susurre— dame la dirección por favor.

No soy estupida, esa fiebre y ese dolor de estomago no es para nada normal y más teniendo en cuenta que estuvo expuesto a no sé qué cosa.

•••••

Llegue al hospital en busca de Eddie, según entendí ese tipo Dan es el nuevo novio de Anne, la mujer tiene buenos gustos para conseguir hombres.

Tal vez le pida algunos tips, no estoy diciendo que Eddie sea un buen partido digo, claro que lo es, para cualquier mujer lo sería pero no para mi, no.

Me sobresalte al escuchar como golpeaban levemente la ventana del copiloto, detrás de ella estaba un Eddie Brock zombie sudoroso, le hice una seña con mi mano para que subiera la cual acato y tomó asiento a mi lado.

—No tenías que venir por mi —suspiro recostándose en el asiento.

—¿Y dejarte comer cerebros por la calle? No gracias, prefiero mantenerte bajo vigilancia —conteste sacándole una leve y corta risa.

—Un zombie se ve mejor que yo —hablo en voz muy baja, apenas le pude entender.

—¿Que te pasó Eddie? Ese tal Dan me dijo que estaba enfermo de una rara diarrea explosiva —enfoque mi vista en la carretera y de ves en cuando miraba a mi compañero.

Soltó un suspiro de cansancio, supongo que no se la está pasando muy bien el día de hoy y más que el novio de tu ex te diga que tienes diarrea.

—No es diarrea, al parecer tengo un especié de parásito dentro de mi que me vuelve loco —explicó— escuchó una voz dentro de mi cabeza y es irritante.

Estaba por responder cuando comenzó a sobresaltarse de la nada viendo hacia todos lados como si buscara a alguien, mi mamá me dijo que la fama te afectaba pero no pensé que tanto.

—¡No me hables tú..quien seas! —comenzó a gritar— ¡déjame en paz!

Mire de reojo a mi amigo para luego carraspear intentando llamar su atención, su comportamiento me causa temor y preocupación.

—Perdón, es que habla de repente y odia el término "parasitó" dice que es un insulto para el —explicó.

—Ahora es un el, vamos bien —susurre sarcásticamente y el bufo.

Un silencio bastante incómodo y tenso se hizo presente entre nosotros, el miraba por la ventana intentando distraerse de lo que sea que le esta pasando. Llegamos a su edificio, en camino se me hizo eterno.

Me estacioné al lado de la acera del edificio, observé cómo bajo de mi auto con tranquilidad estaba por imitar su acción cuando hablo.

—No te bajes, mi departamento es un chiquero y no quiero lo veas así.

Arquee una ceja viendo cómo se veía nervioso, suspire rendida para luego cerrar la puerta y encender el auto de nuevo lista para irme, baje la ventana del copiloto para verlo.

—Cualquier cosa me hablas, sabes muy bien que me desvelo viendo películas así que no hay problema con que me llames —avise, de todas formas no podría dormir con todo esto.

—Gracias Emily, por lo que has hecho por mi en estos meses —sonrió, esa sonrisa se veía honesta.

—Eres mi amigo, claro que te apoyaré en todas las locuras que hagas —sonreí— cuídate Eddie, descansa.

—Igual Emi, descansa —se despidió con la mano para luego entrar al edificio.

Al ver que estaba dentro del edificio comencé mi camino de vuelta a casa, este día ha sido todo un dolor de cabeza y de cuerpo también.

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Si alguien se ofendió con las referencias religiosas les doy una disculpa.

-𝐓𝐎𝐆𝐄𝐓𝐇𝐄𝐑- 𝙀𝙙𝙙𝙞𝙚 𝘽𝙧𝙤𝙘𝙠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora