Capítulo 5

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Junmyeon

—¡ Junmyeon!

Puse los ojos en blanco cuando el fuerte grito de Kyungsoo resonó en la mansión. Caminé por el pasillo hacia la oficina del hombre.

—¿Tú llamaste?

—Sehun acaba de llamar. Tienen a tu compañero.

Mi garganta se cerró en un respiro.

—¿Tienen a mi compañero?

¿Quienes eran ellos?

—Chanyeol y Jongin se detuvieron para tomar algo de comer y tu compañero y su hijo estaban sentados allí mismo en el restaurante. Después de que Sehun se unió a ellos, y les explicaron quienes eran a Yixing, él accedió a regresar con ellos.

Caí cuando mis rodillas empezaron a temblar, reclinandome contra el marco de la puerta.

—¿Está a salvo?

Los ojos de Kyungsoo se estrecharon.

—No creo que esté completamente a salvo hasta que regrese y lo reclames. Tenemos que asegurarnos de que no haya forma de que su padre pueda llevárselo.

Me dolían las encías cuando mis caninos salieron disparados. Gruñí bajo en mi garganta.

Kyungsoo rápidamente levantó una mano.

—Sabes lo que estoy diciendo, Jun. Tienes que reclamarlo.

No quería nada más. Solo tenía que asegurarme de que eso era lo que mi compañero también quería. Me negué a obligarlo a nada. Estaba empezando a tener la idea de que ya se había visto obligado a hacerlo lo suficiente en su vida.

—¿Están viniendo aquí?

Kyungsoo asintió.

—Deberían estar aquí en un par de horas.

—Necesito tener las cosas listas,—Pasé una mano por mi cabello, sin saber que estaba temblando hasta que Kyungsoo me lanzó una mirada aguda.—Necesitan cosas. Comida y un lugar para dormir y...—Fruncí el ceño porque un miedo que nunca había sentido antes me agarró.—¿Qué necesitan los niños?

—¿Cómo diablos debería saberlo?—Espetó Kyungsoo,—¿Me ves con un niño en mi regazo?

—Yo no...

—Puede que no sepa qué hacer con un niño, pero apuesto a que conozco a alguien que lo sabe—. Kyungsoo levantó su telefono y marcó. —Luhan, ¿puedes acompañarme en mi oficina? Necesito tu ayuda con un proyecto especial.

Una vez que colgó, lo mire fijamente.

—¿Luhan?

—Él cuida bastante bien a su gato. Me imagino que no puede ser muy diferente de cuidar a un niño. ¿Puede ser?

Demonios si lo supiera.

—Necesitas aprender a hacer esto si planeas tener un hijo en tu vida.

—Si.—Supongo que nunca lo había pensado mucho más allá de tener a mi pareja.—Es un niño lindo,—le dije a Kyungsoo. —Los he visto jugar en el patio todos los días. A él realmente le gusta jugar afuera.

Los ojos de Kyungsoo se estrecharon.

—No tenemos que poner una correa y pasearlo, ¿Verdad?

—Uh...—entrecerre los ojos por unos momentos y luego sacudí la cabeza,— Aunque estoy bastante seguro de que le encantaría ir al parque, no pones correa a los niños.

Stalkeando a mi compañero Sulay (5)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora