El rábano fugitivo parte dos

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Hola mis tesoritos, lamento enormemente la demora en actualizar, pero el estudio y la salud afectan mi inspiración (TT - TT) 

Muchas gracias a todos por pasar por mi historia, me encanta leer sus comentarios sin mas vamos al capitulo de hoy donde tendremos grandes emociones así que tomen fuerte su teléfono, y la cama mas cómoda  jajajaja. Sin más comenzamos

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Como podía describir lo que sentía? El temor que recorrió su pequeño cuerpo al separarse de aquel gēge y de ā-Yí no era la primar vez que lo sentía, si bien no podía recordar cuando ni donde, sabía que lo había experimentado antes, solo quería a su ā-die allí con él, pero por más que buscaba no lo encontraba, sin embargo lo que más temor le daba era ese extraño hombre obeso que no dejaba de seguirle desde que se separó del mayor, cada vez que volteaba aquel repugnante hombre le mostraba una sonrisa estirada y tan aterradora que sus pequeñas piernitas apresuraban el paso con la intención de perderlo sin embargo pronto comenzó a llover tanto que por más que corrió para ponerse a resguardo quedo empapado


ā-die,ā-die, a-yuàn te extraña mucho – susurró mientras sus pequeñas manos oprimían la tela del uniforme de la secta GūSū Lán completamente empalado, en un pobre intento de no llorar descontroladamente, tenía miedo, mucho miedo pero debía encontrar a su pequeño amigo y a aquel gēge, no podía quedarse allí perdido,sin embargo antes de que pudiera hacer algo una voz cargada de cariño le llamo,al girarse se topó con un joven gēge que cubría la mitad de su rostro con un Shànzi hermosamente pintado, quizás debía temerle pero algo en la mirada del mayor le lleno su pequeño pecho de una calidez abrumadora y familiar


Pobre pequeño, mírate estas todo empapado, ven vamos por algo de ropa nueva y seca,si sigues así enfermaras y HánGuāng-Jūn morirá de una desviación de qi si eso sucede –murmuro sonriendo mientras con un pañuelo secaba las mejillas regordetas de aquel pequeño niño. Con cuidado de no asustarlo tomo una de sus pequeñas manos para comenzar a caminar bajo su yóuzhǐ sǎn, no dejaría que el niño se mojara más, que clase de amigo deja que el hijo y único recuerdo de su amigo querido enferme? Solo uno muy malo y él no era de esos, no señor, podía ser cualquier cosa menos mal amigo, al cabo de un poco de recorrer las tiendas llegaron a una pequeña posada en la cual consiguió un cuarto para así por fin bañar en agua caliente al pequeño y cambiar aquellas empapadas prendas por otras secas


Tienes hambre pequeño Lán Yuàn? Shànzi Shūshu te comprar lo que sea tu solo pide —mencionó sonriendo mientras terminaba de peinar el suave cabello del infante —si Wèi-xiong estuviera despierto seguramente estaría más que encantado de saber que Wàngjī te está cuidando bien — dolía aún la ausencia de aquel rayo de felicidad, a pesar del tiempo pasado no podía quitarse la culpa de no haber hecho algo para salvarlo, si tan solo no hubiera tenía miedo y hablado quizás otra sería la realidad, pero aun así no perdía la esperanza de recuperar a su amigo, sabia de sobra que el peso y la culpa de su cobardía nunca le dejaría,aquel pecado era uno muy pesado para su acongojada alma, sin embargo su creciente espiral desentender a la culpa infinita fue interrumpida por el suave movimiento del pequeño Lán que le acompañaba


ShànziShūshu conoce al ā-die de Ā-Yuàn? — cuestionó interesado por lograr saber más sobre aquel hombre que tanto admiraba, el temor inicial que sintió al estar perdido y ser perseguido por un hombre desconocido pasó rápido cuando otro desconocido llegó a su rescate, desconocido que ahora sabía era su Shànzi Shūshu

¡¡Lán  Yuàn!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora