Naruto: Hijo del chakra

39-El pergamino

Mei estaba atrapada en un bucle de pensamientos. La enviaron aquí para proteger al Daimyo. Pero, también sabía que el Daimyo era una escoria de hombre y no merecía tener nada de lo que tenía en este momento.

También odiaba los malditos hábitos de su pueblo. Ella misma había sobrevivido a las infames pruebas de graduación ahora prohibidas de la academia Ninja en el pasado. Tenía que matar a su oponente para pasar o morir ella misma. ​​

Ella había visto la violencia de primera mano. Pero hizo todo lo posible para no dejar que el odio cambiara su corazón y la convirtiera como muchos ninjas desaparecidos. Quería ser la esperanza de su pueblo.

Mei había tratado deliberadamente de desarrollar su mente diferente a la de los demás. Era una persona amable y alegre, hablaba bien de los demás y trataba de evitar los conflictos. Tenía una mente más abierta que los otros shinobi de Kirigakure, ya que había mostrado respeto y estaba dispuesta a escuchar a los demás.

"Este hombre aquí es EL señor feudal del País del Agua. Tiene la autoridad para hacer cualquier cosa, incluso para dictar lo que sucede en tu aldea. Podría cortar los fondos para presionarlos para que cambien sus formas violentas, pero lo hizo. nada. Aquí está, disfrutando de cada comida como si no hubiera un mañana porque tiene dinero para sí mismo, ¿por qué preocuparse?" Shiroken dijo.

"¿Pero quién eres? ¿Por qué quieres ayudarnos?" Mei le preguntó.

"Tu Kirigakure se llevó a mi familia. Acabo de regresar para recuperarlos. Y tengo el poder, así que estoy poniendo al Daimyo en el camino correcto". Él reveló.

"¿Qué familia? Puedo ayudarte a recuperarlos". Ella le aseguró.

Él se rió entre dientes, "Eh, no puedes. La persona que estoy buscando ahora es un ninja desaparecido".

"¿Quién es?" ella inquirió.

"El Jinchuriki de 6 colas", reveló Shiroken.

Ella se sorprendió, "Tú... ¿Utakata es tu familia?"

"No, él no, el ser encerrado dentro de él es mi familia. Hashirama, ese maníaco te lo vendió, realizando un acto de esclavitud". anunció Shiroken.

"P-Pero son solo bestias..." Murmuró.

Shiroken se burló, "Obligar a un ser inteligente a hacer algo en contra de su voluntad se llama esclavitud. Ahora, puedes volver a Kirigakure e informar a tu aldea sobre esto. O quédate conmigo y derroca al gobierno de Kirigakure. Entonces, un nuevo y más pacífico se puede encontrar uno".

La idea era tentadora pero ella no estaba muy segura, "¿Y qué te da la confianza de que puedes hacerlo?"

"Puedes intentarlo", Shiroken ni siquiera tomó una postura y solo agitó su mano para burlarse de ella. El Daimyo todavía estaba en su mano derecha.

Mei decidió tomar la foto. Ella corrió hacia él y al mismo tiempo usó su Lava Kekkei Genkai. "Lanzamiento de lava: ¡Aparición de fusión!"

Un fuerte lodo ácido salió de su boca cuando llegó a Shiroken. El barro cayó sobre Shiroken, pero resultó ileso.

"AAAAAAAA..."

No se puede decir lo mismo del Daimyo. A él también le cayó algo de barro y ahora estaba perdiendo la piel.

Mei, en lugar de salvar al Daimyo, atacó físicamente a Shiroken con su kunai.

*BAM*

Shiroken tomó su mano con facilidad y la miró a los ojos, "No tengo nada más que lástima y misericordia por los inocentes, pero la gente como él... merecen morir".