- Por última vez, Ran, ¡no!-Nahoya Kawata estaba ahora mismo discutiendo con su pareja, Ran Haitani ya que este no quería hacerse un test de embarazo. No quería emocionarlo ni ilusionarlo con la idea de tener un hijo, así que simplemente se negaba a hacérsela. Pero Ran no se rendía, hacía semanas que el menor se sentía muy mal y tenía mareos espontáneos y vómitos. Sabía sobre los síntomas de un embarazo, así que quería descartar esa posibilidad antes de ir a un doctor.
Los dos eran pareja desde hace varios años ya, después de la pelea entre Kanto Manji y Tokyo Manji la cual ocurrió hace ya 13 años. Los dos bandos se amistaron e incluso varios de las pandillas actualmente eran pareja o muy buenos amigos, como el caso de los dos líderes que ya contaban con un hijo. La vida de pandilleros parecía lejana ya para casi todos.
Los gemelos Kawata actualmente trabajaban en su restaurante donde obtenían un buen sustento y pronto sería posible convertirlo en una cadena de restaurantes, así que estaban dándolo todo para sacar adelante ese proyecto que los tiene muy animados.
A pesar de todos los años transcurridos, esos dos pares de hermanos no se separaron nunca, seguían tan unidos como siempre.
Ahora lo más común es irse enterando que amigos cercanos están esperando un hijo, puesto a que ya están en esa edad donde ya varios estaban estables o en el que simplemente ocurrían los conocidos "accidentes". Así que a Ran no le sorprendería tanto que Nahoya esté embarazado ahora, más si saca cuentas de desde cuándo él se ha sentido así y cuándo fue la fecha más cercana a la que lo hicieron. Estaba preocupado por él, el omega no era de enfermarse seguido a menos de que sea gravemente.
Aún se acuerda de la vez que se contagió de influenza, el pobre estuvo toda la noche sufriendo y por culpa de la fiebre, llegó a delirar. Aunque su forma de delirar causó un poco de gracias, ya que este no dejaba de hablar cosas sin sentido y si se quedaba sin tema de conversación, empezaba a relatar toda la historia de la serie que se estaba viendo.
En fin, sabiendo cómo se comportaba el cuerpo de su pareja, era imposible que no se preocupara. Así que ahí estaba ahora, intentando hacer que el omega cambiase de opinión. Pero por desgracia se encontraba a punto de salir a trabajar, así que se tenía que resignar o al menos intentar una última vez antes de que se bajara del auto que había estacionado en frente del restaurante que llevaba el Kawata.
Soltó un suspiro y se obligó a relajar su expresión, Nahoya sonrió aún más triunfante.
-Está bien, ya es tarde y no quiero que llegues atrasado. Pero que quede claro que esta conversación aún no acaba. - sacó una caja de un test de embarazo y se lo extendió al omega y este no tuvo de otra que recibirlo de mala gana. Lo guardó y se preparó para bajarse.
Un beso fue depositado en su mejilla y luego él mismo lo atrajo a un beso un poco más profundo.- Nos vemos en la tarde.- cerró la puerta del auto al bajarse y vio cómo Ran partía dejándolo en su lugar de trabajo. Dejó de sonreír un momento y tomando fuerzas retomó su expresión habitual para darse la vuelta y dirigirse al interior. Antes de entrar se encontró con su cuñado, Rin Haitani saliendo con un café en manos.
- ¡Cuñadito! ¡Qué sorpresa encontrarte por aquí! - saludó el omega al alfa que al verlo se puso nervioso evitando verle por tantos segundos.
- Oh, Nahoya, qué sorpresa, es decir, no, ya que este es tu lugar de trabajo y es día laboral. Pero aún así no me esperaba... - Rindou se empezaba a enredar con sus propias palabras a lo que Nahoya soltó una risa. - ¡En fin! Que tengas un buen día.-
-Ten un buen día. -
Los dos se cruzaron y se fueron por direcciones distintas. Al entrar se encontró con su hermano junto a otros camareros que habían contratado hace tiempo preparando y limpiando el establecimiento antes de abrir sus puertas oficialmente hoy. Saludó cordialmente a los empleados mientras se dirigía hacia su hermano. Al llegar le saludó y revolvió el pelo. A pesar de ya ser adultos responsables y que sea solo unos minutos mayor, no evitaba que Souya sea su querido hermano menor. Al otro omega le sacó un pequeño gruñido pero una sonrisa casi invisible se asomó por sus labios. El pelimelocotón siguió de largo para recoger su delantal y recoger su cabello en una coleta alta y protegerla con una malla para evitar que cayeran pelos en la comida.
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¡No quiero! |Ringry y Ranley |
Fiksi Penggemar- ¡No quiero! - Ran ha estado intentando que Nahoya se tome un test de embarazo, hace semanas que no se ha sentido bien, con mareos y vómitos. Quiere descartar cada posibilidad antes de ir a un doctor, así que obviamente un embarazo no se descarta...