Extra mini y agradecimientos.

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Las siestas de los niños de 5 meses suelen durar unas dos horas, el señor Luo lo sabe, así que al notar que el joven Lan se encerró con el joven Wei en su habitación, decide terminar algunos pendientes, y subir a la habitación del pequeño Lan Yuan. Cuando el niño despertó lo miro y al parecer le cayó bien por que le sonrió, era magnifico que pudiera sonreír, sería terrible si hubiera heredado la sonrisa de su tía abuela Kay Lan, lo cargo, tomaron unos juguetes y bajo con el al jardín donde jugaron un poco, aunque las paredes aislaban el sonido era mejor no arriesgarse, después de una media hora pareció molesto y a punto de llorar por suerte llegó su hija con ese chico Alexei con el que salía pero no les había dicho, lo entretuvieron una media hora y entonces comenzó a llorar otra vez, su esposa apareció y los regañó a los 3, tomó al Niño y se lo llevó a la cocina, pero después de un rato comenzó a hacer un berrinche monumental, con gritos terribles.

-    No dejará de llorar, necesitamos a Weiying o a Xichen – dijo su hija.

El asintió y subió, se armó de valor y tocó la puerta, el joven Lan le abrió parecía haberse dado un baño, lo miro con la ceja levantada – el pequeño Lan Yuan no para de llorar, y no ha querido comer.

-    Prepara su leche estaré ahí en 15 minutos.

-    Esta gritando y hace pucheros.

Xichen sonrío – 10 minutos - y cerró la puerta.

El señor Luo bajo resignado y preparo el biberón, su hija había traído las cosas del joven Wei de la casa de su hermano y habían comenzado a acomodar los juguetes del joven Lan Yuan dejando al niño con su esposa que parecía un poco desesperada.

-    Nunca había visto a un Lan tan emberrinchado.

-    Es por que tiene el carácter de Weiying. - dijo Xichen entrando.

El Niño escuchó su voz y lo miro con un puchero molesto, Xichen lo cargo y comenzó a cantarle, tomó el biberón que se había negado a comer y se lo dio, comenzó a beberlo sin dejar de verlo con una mirada acusadora, cuando terminó lo hizo eructar y se lo llevó con el a la mesa del jardín, tuvo que cantar dos canciones más hasta que sonrió, pero no se quizo quedar en el portabebe, se aferró a su camisa con sus manitas, al señor Luo le pareció muy tierno.

Xichen respiro resignado, sentó a A-Yuan en sus piernas y se puso a revisar papeles, hizo algunas llamadas mientras El Niño jugaba con un pequeño oso vampiro, ese que Weiying gano para el en esa feria a la que fueron en Halloween y que A-Yuan le robó un día, había traído el trabajo de la oficina a casa aunque se supone debería descansar.

El señor Luo le tomó algunas fotos y se las envió a A-Ren, también le dijo que el joven Wei había comenzado a traer sus cosas, eso pareció ponerlo feliz, se alegraba de que su sobrino pudiera estar con la persona que amaba al igual que el.

Agradecimientos:

Gracias por leer, espero el final haya sido de su agrado, yo me siento satisfecha. Es complicado expresar tantos sentimientos en palabras, cuando releo mis fics antes de subirlos muchas veces me sorprendo y digo ¿de verdad lo escribí yo?

Es increíble lo que mi cerebro hace que mis dedos escriban, les estaré subiendo mas fics hasta que se me acaben las ideas o hasta que logre escribir mis propias historias originales.

Si quieren algún extra pónganlo en los comentarios y si mi inspiración lo decide se los escribo, se que quizás querían ver más miel, pero tendrán que imaginársela por su cuenta, ellos se casan en algún momento y tienen una niña que es igual a Weiying en apariencia y como Lan Zhan en carácter, quise escribírselos en un extra pero mis dedos no quisieron, si la inspiración regresa quizás lo haga.

Nos leemos.

A Thousand YearsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora