A Thousand Years

Capitulo 17 - Galletas navideñas.

Cuando Qiren despertó, Wen Ruohan lo miraba – ¿que?

El otro solo sonrió – siempre tan malhumorado por las mañanas, ¿desayunarás conmigo?

- Esta bien.

- Te extrañe – beso su mejilla. El también lo había extrañado, pero no se lo diría - ¿Que harás en navidad?

- Estaré con mi sobrino el me invito, comemos juntos a veces.

- Me alegra que hayan arreglado las cosas, tu estabas muy triste cuando se fue, y que te haya enviado de vacaciones, te veías horrible hasta tienes mejor color.

Qiren lo miro feo – no es de tu incumbencia.

- Si lo es – dijo besándolo – dejaste de contestar mis llamadas, eres muy malo conmigo.

Qiren solo desvió la mirada con culpa – ¿que harás tú en navidad?

- Mi hijo dará una fiesta en mi antigua mansión, y por la mañana abriré regalos con mis nietos, pero podemos vernos en la tarde o por la noche si quieres.

- Por la noche esta bien – Ruohan le sonrió y le preparo el desayuno, era lo mínimo que podía hacer lo había dejado muy adolorido, por suerte tenía todo el día para descansar.

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Qiren regresó a su casa por la tarde, la mansión nunca le había parecido tan solitaria, se aseguró de tener todo listo y al día siguiente llegó temprano al departamento que había pertenecido a su sobrino y a su esposo, la señorita Luo le abrió.

- Señor Lan buenos días.

- Tío llegaste muy temprano - Qiren se quedó quieto, ¿debería irse y regresar después? – deja los regalos en el árbol y ¿puedes ayudar a Weiying a decorar las galletas? no dejes que se las coma.

- Eres un tirano, no me alimentas.

- Ya desayunaste y te comiste un cupcake.

Lan Qiren sonrió y entró, dejo los paquetes y se sentó a la mesa con Weiying que se robaba las galletas mientras el las decoraba, Xichen usaba un mandil, se parecía demasiado a su padre cuando daba órdenes de esa manera, su hermano había muerto demasiado joven, al igual que Lan Zhan.

Xichen le acercó una taza con chocolate y apretó su hombro – me alegra que hayas venido.

El solo asintió, Lan Zhan lo invito muchas veces pero el se sentía de más, después de todo no había aceptado su relación con Wei Wuxian en un principio, aunque entendía por que lo había amado, era demasiado vivaz, tan alegre que era contagioso, aunque ahora mismo parecía un poco apagado aunque intentaba fingir que no.

Se concentró en las galletas no quería llorar, ya lo había hecho demasiado, Wen Ruohan tenía razón Lan Zhan siempre fue su hijo, escucharon la puerta, Alexei el jefe de seguridad de Xichen estaba ahí, nunca supo por que lo contrato aunque era un hombre muy capaz, se preguntaba si algo había pasado en la isla, traía a dos niños muy lindos con el.

- Tio chichen.

Xichen salió de la cocina y les sonrió, una sonrisa de verdad, había heredado eso de su madre los Lan eran muy malos sonriendo, aunque cuando lo hacían se iluminaba la habitación, como las pequeñas sonrisas que Lan Zhan le daba cuando era pequeño, su sobrino abrazó a los niños.

- ¿Nos compraste regalos? – dijo el niño.

- Se lo pedí al abuelo Ren.

- ¿Abuelo Ren? - los niños lo miraron así que el se levantó y les dio una bolsa a cada uno, tenían legos duplo y pequeños peluches – ¿no deberían esperar a mañana?