Sun Yat-sen es considerado tanto en la República Popular China como en la actual República de China (Taiwán) como el padre de la China moderna. Aunque en la República Popular China a veces se le conoce como el "Precursor de la Revolución". Sun mostró siempre a lo largo de su carrera en el exilio, entusiasmo y optimismo; pues aún habiendo experimentado incontables alzamientos fallidos contra los Qing, nunca se dió por vencido. Los chinos decían que Sun era una persona altruista, pues él no era ni de derechas ni de izquierdas, era un hombre que quería lo mejor para su pueblo. Es más, cuando los Qing fueron derrotados, Sun quiso convertirlos en ciudadanos de la nueva república, sin ponerles ninguna sanción. Además, estudió diferentes corrientes políticas, para darse cuenta de los cambios que necesitaba China. Cuando dijo que le cedería el puesto como presidente de la república a Yuan, armó un gran alboroto; pues él era una persona que no le importaba tener poder, sino que quería imponer sus "Tres Principios del Pueblo". Gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. Cuando Sun falleció comenzaron las disputas por el poder, aquello que Sun había engendrado, nunca floreció como Sun anhelaba que floreciese.
Borja Navarro Moreno
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El padre de la China moderna, Sun Yat-sen
Non-FictionHan habido emperadores en China desde hace más de 2000 años, pero no ha pasado ni un siglo desde que el último emperador de China abdicara al trono. ¿Qué pasó hace poco más de un siglo, para que pasara este cambio tan drástico en la historia de Chin...
