Liam tenía los ojos empapados. No podía creerse las palabras de Harry, no podía creer que _______ hubiera vuelto y que estuviera allí. Dudaba de si acababa de oír su voz porque comenzaba a delirar, o porque realmente ella había estado allí y lo había llamado. Toda su cabeza comenzaba a dar vueltas, y su corazón se encontraba escondido en su pecho, latiendo poco a poco.
Se marchó de allí. Corrió hasta su casa y con el corazón en un puño, se echó en la cama, ocultando su rostro entre sus manos, y dejó que una lágrima cayera por su mejilla.
***
-Era Liam...-Dije aún con su imagen en mi cabeza.
-¿Liam? Sí, ¿Y qué pasa?-Agatha se volvió hacía mi.
-Na-Nada...-Conseguí soltar. Me acerqué a un pequeño estante y cogí varios botes de pintura-Vamos-Dije después. Necesitaba quitarme a Liam de la cabeza. No sabía que me estaba pasando, pero todo lo que sentí al volver a verlo, tenía que desaparecer de mi mente, ¡Y eso que tan solo lo había visto de espaldas!
Agatha me miró, se quedó observándome.
-¿Qué?-Pregunté.
-Me dijiste que hace dos años te fuiste a Estados Unidos, ¿Verdad?-Me miraba como si tratara de descifrar algo en mi mirada.
-Sí... ¿Por qué?
-¡Claro! ¡Ahora entiendo porque te has quedado embobada viendo a Liam! ¡Tú fuiste su novia! ¡Y tuviste que marcharte por obligación de tus padres, ¿No?!-La miré. Sí, bingo. Había acertado, pero creo que eso ya se lo había contado. ...Excepto el pequeño detalle de que Liam y yo fuimos novios-¡Por eso te has puesto así cuando lo has visto! Porque es la primera vez tras dos años, ¿A que sí?-Agatha dibujó una sonrisa en su rostro, satisfecha con su total acierto.
-Eh... Sí-Asentí sintiéndome abochornada-Pero no digas nada, porfavor-Le pedí-No quiero oír comentarios estúpidos. Estoy tratando de adaptarme de nuevo lo mejor posible. No es fácil para mí volver aquí y reencontrarme con Liam, aunque creí que iba a serlo...
-Y aún le quieres, ¿Verdad?-Agatha me miró fijamente, clavando sus pupilas marrones sobre las mías.
-¿Qué? ¡No! Ya no le quiero-Sentí un nudo en la garganta-Ahora quiero a Kevin, mi novio.
-¿Dejaste a Liam por otro?-Ante aquella pregunta, tuve que tragar saliva.
-No. No fue así-Comencé a explicarle-Liam y yo perdimos el contacto. Le escribí cartas, y al cabo de tres o cuatro meses dejó de contestármelas. Supongo que debió de cansarse de aguantar una relación a distancia y encontró a otra chica con la que pasar el tiempo.
Agatha volvió a mirar, esta vez parecía desconcertada.
-Harry me ha dicho que Liam no es el tipo de chico que juega con las mujeres, que es muy sensible-Dijo-No es que yo sepa mucho de él, pero esa es una de las pocas cosas que mi hermano me ha dicho y realmente, yo no creo que Liam te haya remplazado por otra.