Ruined- Emiliaco

Capitulo 17

-Está caliente, no puedo comerlo rápido.- Excusó Joaquín, media hora después de que pidió aquella ya estaba en la mesa, Abel lo miró molesto.

-Necesito que te apresures, llegaremos de noche a California.- Joaquínhizo una mueca, pero asintió.

Por favor gusanito, no vayas a querer regresar esto. Suspiró y llevó la cuchara con comida a su boca, era la primera vez que probaba aquello.- No sabe tan mal.- Se rió, acarició su estómago.

Isai miró con poca desesperación su celular, no había señales de Emilio, estaba demorando más de lo planeado, y ya podía usar más excusas, Abel estaba molesto.

-¿Cuánto tiempo tienes?- Preguntó Cole, mirando su estómago, Joaquín tragó lo que tenía en la boca.

-Eh, cuatro meses y medio.- Susurró.

-¿Planeabas decirnoslo alguna vez?

-Sí, cuando el bebé ya estuviera en sus brazos.- Dijo Isai riendo, Joaquín rió, pero sus padres lo miraron serio, carraspeó.

-Estaba planeando decirles pronto, cuando estuvieran los dos tranquilos.

-¿Crees que íbamos a estar tranquilos al enterarnos que estás embarazado de nuestro amigo?

-¿No?

-Mierda Joaquín, tienes diecisiete años, y no me salgas con lo mismo de tu padre y yo, sabemos que también cometimos un error.- Señaló.- Pero al menos deberías tener en mente que si follas con alguien sin protección quedas embarazado.

-Lo siento.- Susurró el menor, Abel bufó y no dijo nada.

-¿Puede ponerme eso para llevar?- Le dijo al mesero, Isai miró asustado a Joaquín.

-Pero papá.

-No quiero escucharte Joaquín, nos iremos ya.- Joaquín apretó sus labios y miró a Isai.

El mesero retiró la comida de Joaquín y la llevó a la cocina, para ponerla en otro recipiente.

-Quiero irme con Emilio.- Dijo Joaquín, Abel bufó.

-No empieces con eso Joaquín.

-Lo amo papá, me quiero ir con él.- Abel rodó los ojos y rió.

-¿Lo amas? Emilio te dobla la edad Joaquín, es una mierda eso, ni siquiera es amor.

-No puedes hablar de lo que siento papá si no lo sabes.- El ojiazul sólo lo miró por unos segundos.

El mesero regresó y les dio una bolsa con la comida guardada en un recipiente, Abel pagó la cuenta.

Cuando salieron Joaquín se detuvo.

»-No me iré con ustedes.- Suspiró, Abel volteó y apretó sus puños.

-Por las buenas o por las malas vendrás con nosotros.

-Entonces será por las malas.- Dio un paso hacia atrás cuando Abel caminó hasta él.

-Ye me cansé de tu actitud tan estúpida Joaquín.- Alzó su brazo con la intención de golpearlo, el menor cerró los ojos esperando el golpe.

-Ni te atrevas a tocarlo nuevamente Abel.

-¡Emilio!- Joaquín intentó caminar hacia el castaño, pero Abel lo detuvo.

-Sueltalo, él va a ir conmigo.