Ya no podia estar sin T/N. No soportaba el pensar que ella me dejaría por otro. Era adicto a ella.
Me aliste y me puse un traje blanco con camisa rosa. Tenia que ir a arreglar unos asuntos pendientes del trabajo.
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Ya iba de salida cuando se despertó T/N.
"A donde vas amor" me pregunto bostezando.
"A trabajar, a la noche regreso mi reina. Ven a despedirte. Dame un beso" le dije extendiéndole mis brazos.
"Me quedo bien aburrida siempre que me dejas en la casa solita Raton" me dijo triste.
"Cuando llegue nos vamos al antro. Que te parece?" le contesté.
"Va mi amor" me respondió.
"Y no quiero que andes saliendo eh. Te me quedas aquí en la casa. Si necesitas algo manda a un hombre de seguridad a conseguirlo" le dije bien serio.
La neta no quería que salga para nada a la calle. No quería que nadie me la ande viendo ni tratándole de hablar. Me hice muy posesivo con ella. A donde sea que quería ir le decía que me avisara y si si le daba permiso de ir le mandaba un chingo de guardias pa que me la cuiden.
Un día me sento T/N en la sala con ella y me dijo algo muy serio. "Amor, creas o no te quiero decir que yo me doy cuenta de como me empiezas a tratar. Tu sabes que yo soy tuya pero la verdad es que te estas haciendo bien tóxico. Los guardias me siguen hasta a la esquina cuando voy a comprar tortillas Ovidio. Te pasas la neta" me dijo.
"Yo solo te quiero proteger mi reina. Desde que me agarraron por ultima vez se han puesto muy mamoncitos los soldados. Por eso te quiero esconder. Porque si te llevan a ti me pongo bien mal sin ti. Aparte no quiero que se te arrime nadie mi amor. Me caga cuando se te arriman mucho otros hombres" le dije jugando con su pelo.
