Barcelona

656 53 17
                                    

It's hard to put it into words
How the holidays will always hurt
I watch the fathers with their little girls
And wonder what I did to deserve this

Barcelona, Spain

Mayo 6 de 2021

Suspire mirando fijamente la pantalla de mi celular, como si eso fuera a causar que Max me enviara un mensaje, no sabía nada de él desde ayer y eso me tenía preocupada, le avise que llegue sana y salva a España y solo me contesto con un emoji de un pulgar hacia arriba.

¿Debería escribirle nuevamente? no quería verme desesperada, pero por alguna razón me estaba volviendo adicta a Max, anoche revise su Instagram para ver si subía algo y también revisaba el de Kelly el cual no me ayudaba mucho porque solo subió una breve historia de una cena.

Y estaba segura de que la mano que se veía era la de Max, sus dedos ya los podía reconocer por las veces que los tuve adentro mío. — Listo — la voz de mi estilista me sacó de mis pensamientos.

— Gracias — le dediqué una leve sonrisa a Marta, mi estilista de confianza en España me encantaba como me maquillaba y peinaba cada vez que venía, aunque en Suiza Sebastián es mi estilista fijo — ¿Dónde se encuentra Miguel?

Miguel Bustamante el idiota que me había costado 75 millones de euros, me estaba ignorando completamente como si eso fuera a evitar que lo despidiera. Valentina miraba fijamente la pantalla antes de mostrarme las imagines de ese idiota — Está jugando tenis, es lo único que se ha dedicado esta semana, no se ha dirigido a la oficina en lo que va de las últimas dos semanas.

Asentí acomodándome el pelo, las suaves ondas me tenían que durar hasta que terminara con la periodista de Elle al igual que mi maquillaje, no tenía ánimos de realizar la entrevista, quería estar acostada entre los brazos de Max mientras lo obligaba a ver Friends conmigo.

Tome mi blazer crema antes de salir por la puerta del pent-house del hotel Mandarín Oriental donde siempre me quedaba en Barcelona, me encantaba el hotel quedaba en una zona super céntrica y super colorida. El camino a la camioneta no fue muy largo, al salir del lobby me golpeó la brisa fresca y por un breve momento cuestione la decisión que tomé para la entrevista me fuera a poner un vestido.

Sin pensarlo tomé mi celular y le mandé el mensaje a Max.

¿Vamos a salir siempre hoy? tengo antojo de Paella y te quiero llevar a mi restaurante favorito

Mi corazón se detuvo cuando en cuestión de un minuto el mensaje salió en visto y en la pantalla aparecieron los 3 puntos que estaba escribiendo, pero desaparecieron rápidamente. Suspiró profundamente antes de bloquear la pantalla y guardarlo en mi bolso.

Un silencio incómodo envolvió el carro, Valentina todavía no me hablaba y aclaro nuevamente que ella y Lewis pueden hacer los que le dé la gana son adultos, solo que me hubiera gustado que ambos fueran sinceros y no encontrármelos en mi habitación haciendo el sin respeto.

Mi teléfono vibró indicando la llegada de un nuevo mensaje de texto, mi corazón se aceleró pensando que era un mensaje de Max, pero en realidad era un Mensaje de Mick.

¿Ya estás en España? Acabo de llegar y sé que varios miembros de equipo también llegaron ¿quieres salir a cenar hoy?

una sensación de calor invadió mi pecho y al igual que mi sonrisa, pero ¿qué podía hacer? Max y yo nos queríamos dar una oportunidad, pero por otro lado tenía a Mick, el dulce Mick con su sonrisa y ojos de ángeles.

Suspire antes de guardar mi teléfono, quería tener la cabeza fría cuando viera a Miguel, Valentina me miró curiosamente antes de negar con la cabeza con una sonrisa.

𝘚𝘵𝘢𝘵𝘦 𝘰𝘧 𝘎𝘳𝘢𝘤𝘦 | Max Verstappen |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora