La psicóloga extraña

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"No te preocupes,la vida es un un baile y tropezar forma parte de la coreografía."


G

us Vazquez

Bueno,puede ser que apenas llegue a mi habitación me echara una pequeña siesta,o ese era el plan,porque ahora estaba corriendo hacia el ascensor porque llegaba tarde a mi primera sesión. Lo único que le había prometido a papá era nunca faltar una sección, y yo jamás rompo mis promesas. El no lo hacía cuando me prometía comida,así que yo tampoco lo haría.

Al entrar al ascensor vi mi reflejo en los espejos,bueno,la psicóloga no creo que me juzgue por mi apariencias

y si lo hace,es una mierda de persona y psicóloga.

el tercer piso era la ubicación de las consultas por lo que el viaje del ascensor no duró mucho,pero apenas abrió sus puertas volví a salir corriendo.

Tenía 14 minutos con retraso y exactamente a los 15 minutos daban como ausente a la cita.

el pasillo parecía estar lleno de personas,hablando,o caminando a su destino,pero ahora mismo estaban estorbando.

según el recorrido de Beke (Si,esta parte fue a la que más le preste atencion),el cuarto de consultas se llegaba caminando,en mi caso corriendo,por todo el pasillo,hasta llegar a la cafeteria,hacer unos cinco metros mas,y doblar a izquierda,diganme distraída,pero jamás traten de negar que cuando aprendo algo puedo llegar a recordarlo por largos meses.

la alfombra verde feo hacía que me costará más correr,pero no era imposible,por lo que en poco tiempo estaba en frente de la cafetería,y tenía por asegurado que no había pasado ese minuto todavía,por lo que cuando doble a la izquierda y entre en la pequeña sala de espera y vi a una mujer decir mi nombre con la última advertencia solo pude gritarle.

-¡Presente!-Vi como el chico en una de las sillas del lugar tosió ruidosamente tratando de ocultar una escandalosa carcajada.

lo mire mal,aunque yo en su situación seguramente me reiria,bueno,sonreiria al menos.

la mujer en la puerta me sonrió aunque exclamó un:"Casi estaba por ponerte como ausente".

asenti,pidiendo una disculpa levemente cuando se hizo a un costado para poder dejarme pasar.

rápidamente me senté en la silla delante del escritorio tratando de regular mi respiracion que estaba muy alterada debido al pequeño (gran) maraton dado.

mientras la mujer tomaba asiento,me di el lujo de detallar la habitación.
tenía paredes color lila,un escritorio de tamaño considerable de madera negra,por el cual atras estaba una silla de escritorio de cuero marrón con rueditas,que me daban ganas de girar y muchas en realidad.
la habitacion parecía normal,el sillon típico de películas,libros,y un cuadro de dos mujeres encima del escritorio,al lado de la computadora.

Alexitimia||Sin sentimientosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora