Amor a primer pase

6. La caída.

Ya me había decidido, ya habían pasado varias semanas y lo llevaba pensando mucho tiempo. Había hablado de ello con las chicas y me habían ayudado mucho.

Me siento muy arropada por ellas, cosa que nunca había sentido con nadie más y me encanta.

Hace varios días

--- Niñas, necesito que me ayudeís con algo--- les comenté, un poco indecisa.
--- Dí--- me contestó Alba.

Les conté lo que me pasó, lo que mi exnovio me hizo y como me traicionó mi mejor amiga. Les conté que casi entre en depresión y que no salí de mi casa en mucho tiempo.

También les dije lo que me ocurría con Kiko, ya no me daba vergüenza, había cogido mucha confi con ellas.

--- No creo que te vaya a pasar nada, Kiko no es de esas personas ---me aseguró Lucía
--- Siento mucho lo que te pasó, Gema. Creo que si te vuelves a enamorar no te haría más daño, sobre todo si es Kiko ---me dijo Carolina

Todas me dijeron cosas más o menos iguales. Alba, que era la meja de Kiko me dijo que podía confiar en él. Me dijeron que no me iba a hacer daño, que no me cerrara, y que si algo iba mal, que confiara en ellas, que me iban a ayudar con todo.

Por fin estoy encontrando mi sitio, el balonmano no solo me está aportando en el deporte, sino también en la amistad y... Puede que en el amor??

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Ya lo tenía claro, no me iba a alejar más de él, si se me presentara la ocasión no la desperdiciaría. Me había enamorado y no lo podía negar.

Hoy tenía entreno, así que lo vería, ya lo tenía todo decidido.

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--- Toma, el euro de la apuesta. --- le dije indignada
--- No eran tres??
--- Aguántate con uno, tres no te voy a dar.
--- Por quee??--- me preguntó
--- Porque yo no gasto mi dinero en niños tan tontos como tú.
--- Sigues siendo una tramposa --- me dijo entre risas.

Era viernes y ese domingo tenía partido, habíamos estado haciendo jugadas y practicando la defensa y los pases que es lo que peor nos salía.

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Llegó el domingo y jugabamos aquí en casa contra las cabreñas. Faltaba un minuto para empezar el partido y estabamos todas en nuestras posiciones. Ví a Kiko mezclado con gente en las gradas.

--- Lista?? ---me preguntó Alba
--- Claro.

Empezabamos sacando nosotras, estaba en pivote y me estaban empujando mucho. Al cabo de un rato, ibamos 5-8 perdiendo, yo había metido 2 goles. Iba a sacar de centro y se la pasé a Paula y me metí en la defensa contraria, me pasaron una pelota y ví que me podía girar para meter el gol.

Me giré y me empujaron entre dos personas, tanto, que me caí y me giré el tobillo. Estaba tirada en el suelo, quejándome por el dolor, miré hacia arriba y ví como Kiko bajaba las escaleras de las gradas a toda velocidad.

Se supone que no debía hacer eso, que no le iban a dejar, pero, saltó la valla y se metió en el campo. Yo seguía en el suelo, Muñoz estaba conmigo y Sonia tambíen, estaban viendo si podía mover el tobillo, Kiko ya había llegado a donde yo estaba.

--- Estás bien Gema?? ---dijo con voz preoucupada.
--- Kiko, no puedes estar aquí ---le contestó Sonia
--- No, me duele mucho ---le respondí a su pregunta.
--- A la de 3 la levantamos ---comentó Muñoz--- 1... 2... 3!!

Me cogieron y me llevaron al banquillo, dónde Sonia me hizo un vendaje para sujetarme el tobillo. El partido siguió y perdimos 11-13, de dos goles.