Concubina [ P. E.]

O3

Mikaela estaba en frente de Claude, el cual estaba con aquella meretriz en sus brazos, apretó la mandíbula, mientras sus lágrimas comenzaban a bajar por blancas mejillas.

—Entonces.. —hablo llamando la atención de los dos. —¿La amas a ella? -su voz sonaba rota. —¿A ella y al.. —señalo vientre notable de la mujer. — bastardo que lleva dentro..? —se tapo su boca agarrandose de su estómago mientras sollozaba. —¿por que?, ¿Ya no soy lo suficientemente hermosa para ti, Claude?

—Mikaela.. Yo.. —trato de tocarle el hombro ella se alejo mientras sollozaba, cubriéndose el rostro.

Destruyo a la verdadera dueña de su corazón por culpa aquella hada, pero aun asi Diana, era preciosa y no podía dejarla.

Diana se comenzaba a sentir muy mal por aquella mujer, pero era verdad, mientras tocaba su vientre con la mirada baja, pensaba en que tenia al hijo o hija de Claude.

—Diana.. —La mujer levantó la mirada con miedo, al verlo acercarsele con una expresión fría. —Ya que ella, osea Mikaela, se fue solo te tengo a ti.. —le dio un abrazo.

...

Pasaron unos cinco años, Mikaela estaba tomando su té matutino, Jubelian estaba con ella en la misma mesa, en ese momento comenzó a salir sangre de su boca.

—¿Mami..? —murmura la pequeña al ver aquel liquido carmesí salir de su boca, con horror comenzó a gritar, mientras que Mikaela, se dejaba consumir por el veneno, dejando que su cabeza cayera en la mesa, mientras gritaba y lloraba, pidiendo ayuda.

Oh, lamentablemente envenenaron a su madre, una aliada de Diana le mato a su madre.