Paradise

Capítulo dos.

-Mmm claro...-Dije un poco nerviosa agarrando mi taza de café llevándola a mis labios. El chico raro se sentó cruzando sus piernas, él era realmente atractivo se podría decir.
-Y...¿Eres el hijo de los señores Styles?-Preguntó Melissa haciendo un mordisco a su dona.
-Sí, y me llamo Harry.- Respondió él, su manera de hablar era bastante peculiar, hablaba muy lento, y eso era agradable.
-Bueno, ella es Megan y yo soy Melissa.-Dijo ella señalando con su dedo índice hacia mi mientras le sonreía.
-Nunca las vi por aquí. -Dijo él acomodándose en su asiento.
-Es que casi nunca venimos aquí, ella vive a la vuelta de este bar, pero no sé porque no viene.-Dice ella riendo y negando con la cabeza. Una de las cosas que odio es que Melissa cuando está hablando con un chico siempre me avergüenza, porque sabe que no soy capaz de hablar estando cualquier joven.
-¿Tú no hablas?- Preguntó Harry.
-Sí. -Respondí fulminado con la mirada.
Desvíe la mirada hasta la cocina para pedir la cuenta y allí estaba la chica de ojos mieles que nos atendió, le hice seña y ella me sonrió y se acercó.
-Bueno señoritas la cuenta es de $36.
-¿Ya nos vamos?-Preguntó Melissa mirándome asombrada.
-Por lo menos yo si, tu quédate con tu nuevo amigo.-Dije levantándome y dejando plata sobre la mesa.
-Megan,¿Qué sucede?-Preguntó pero no respondí y atravesé la puerta del bar para luego irme a mi casa, no me importa si ese Harry me quedó mirando porque no es de su asunto.
Llegué a mi casa y grité para ver si estaba mamá pero nadie respondió, asique subí a mi habitación, me puse el pijama, me acosté en mi cama y prendí la televisión. Estaba mirando un programa de chismes hasta que escucho la puerta de casa abrirse, inmediatamente me levanté, me puse mis pantuflas y baje las escaleras prácticamente corriendo pensando que era mamá, pero era Melissa.
-¿Melissa?-Pregunté asombrada.
-No, el fantasma de la casa que te viene y te dice que sucedió en el bar.- Respondió sentándose en unos de los sillones de cuero.
-Te dije que nada.- Dije imitando su acción.
-Megan... algo te pasó allí. -Dijo ella cruzándose de brazos.
-Sólo que no me agrado el chico, era muy intimidante para mi.
-Él es el chico menos intimidante que conocí. -Dijo riendo.-Es buena onda.
- Seguro quiere algo contigo.-La fulmine con la mirada.
-¿Por qué dices eso?- Me miró subiendo una ceja.
-Eres linda, él es lindo, tienes unas curvas espectaculares... nose digo - Me encogí de hombros.
-El ya tiene novia, es la chica de ojos mieles que nos atendió. Ahora te cambiando de tema totalmente, te quiero decir que hoy te llevaré a una fiesta. Él dijo que vallas.
-¿Él? ¿Harry?-Pregunté sorprendida.
-Si