Abro los ojos lentamente, sintiendo pesadez, veo el cielo con nubes color gris y blanco. Siento mi cuerpo en una superficie dura, causándome incomodidad en el cuerpo.
¿Dónde estoy?.
Es una de las primeras preguntas que mi cerebro decide generar. Me siento en el suelo y miro a mi alrededor.
Hay un montón de lápidas, viejas y sucias. Dando aspecto de un cementerio. Asumo que lo que veo es producto de mi imaginación y es un sueño como los demás. Enfoco mi vista hacia el fondo pero todo se ve obscuro.
Me pongo en pie tratando de quitar el polvo inexistente de mi trasero y empiezo a caminar sin saber a que dirección me dirijo. El camino tiene un solo sendero, no esta asfaltado. Escucho un suave silbido proveniente del aíre, mi cuerpo se estremece y, por extraño que parezca, siento frio.
-¿Perdido? —doy un brinco y un grito agudo por la cercanía de la voz. Me giro con temor y me llevo la sorpresa de reconocer ese rostro.
¿Dónde la he visto antes?
-¿Quién eres tu? —Pregunto.
–Eso no importa. —
Despierto, sintiendo los rayos del sol en mi rostro, abro los ojos cerrando los parpados para acostumbrarme a la luz, me muevo sintiendo un horrible dolor de cabeza, pensado en lo que ha sucedido y en lo que he soñado.
–Matt ¿Hijo estas bien? —Veo a mi madre hacer una mueca de angustia, mientras se va acercando.
–Si, confundido. –Le comento. –Dime que me pasa. —La veo asustado por que se que entre lo que sueño y lo que paso con mi hermano, uno es fantasía y el otro fue realidad. Ella se sienta y me abraza.
–Hijo, lo siento, enserio que lo hago, hay cosas de las cuales yo no te he hablado por que sentí que hacia lo correcto al no hacerlo. Hay muchas cosas de las cuales te voy a ir diciendo poco a poco para no preocuparte y que no te atormenten. —Me dice mientras me pone ambas manos en mi rostro, una en cada lado. –Tu eres un ser, uno de los últimos. —Al decir "últimos" su semblante cambia.
–Mamá ¿de qué hablas?. —Suspira y la veo murmurar algo no entendible.
–Báñate tu fuerza vital volvió hacer normal, luego bajas, te voy a responder algunas cosas. —Y así, sin más se levanta de la cama.
¿enserio? ¿me va a dejar con todas estas preguntas?.
Suspiro acatando la orden de mi madre y me levantó de la cama.
Quito la sabana y pongo mis pies en el suelo, me levanto, mientras siento un leve mareo que no dura mucho, estiro mi cuerpo escuchando algunos huesos tronar, ah soy tan crujiente. ¿por qué me siento tan normal? Digo, debería estar gritado como loco o creer que estoy loco. Pero ví a mi hermano y esos chicos convertirse en lobos, o eso creo y por último estoy yo. ¿Cómo puedo gritar de esa forma? ¿Cómo lo sabe ella? ¿Cómo estará Jake?.
Sin duda muchas preguntas sin respuesta y aun faltan más, entro al baño, hago mis necesidades diarias, para luego entrar en la ducha. Termino y voy a mi cuarto a buscar ropa, me coloco lo que elegí y voy por mis zapatos.
Salgo de la habitación, dejando la puerta entre abierta, mis pasos son lentos hasta que oigo fuertes gritos proviniendo de la planta baja, ¿Qué pasara? Bajo las escaleras con rapidez, al pisar el último escalón escucho un fuerte grito proveniente de un hombre, según el tono de la voz, de manda autoridad. Las personas que discuten están en una habitación. Eso no evita que se escuche del otro lado de la puerta.
-¡Tu hermana nos mintió, al decir que ellos ya no regresarían!. —Esto es uno de esos momentos en el que no sabes si entrar y preguntar, ¿Qué sucede? o simplemente escuchar. -Y, ¡Qué tampoco su hijo sería diferente a nosotros! —Se escucha el fuerte grito y golpe de alguien, pero, ¿Quiénes son ellos?, ¿Quién es el hijo? Y ¿quién es la hermana?.
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El Banshee. (Gay)
FantasyHe olvidado cuantas veces he visto cosas que se que van a pasar, aunque intente cambiarlas, no cambian. No es que no pueda o no quiera, la verdad es que hay cosas que deben pasar para poder entender el por que de ello. Tengo miedo, miedo de quien so...