Vigilae

El Sol Bajo La Luna

Mis ojos dicen que no te quedes,
Mi alma grita que te vayas.
Cuánto quisiera que en realidad nunca hayas venido.
Creí que me salvabas,
Pero sólo estabas posponiendo mi caída.
Mejor me voy primero yo antes de que te vayas y me dejes más roto que a como me tomaste.
Me portaré tan distante para que seas tú quien se aleje.

dijiste que pensara en mi y pensé en evitar que me lastimaras.
Lo que más duele es que eso significa lastimarte.
Tú podrías perdonarme, lo sé,
Pero yo, Luna mía, jamás lo haría.
Tantas piezas rotas para tan pocos "lo siento".
Tantas heridas para tan poco tiempo.
Me lastima que me lastimes.

Vine suplicando por ternura,
Sin sentirlo me diste todo lo que no debías.
Construiste tanto y mantuviste el equilibrio de lo que hacías,
Yo fui un bloque de abajo que derrumbó todo por querer estar hasta arriba.
Me dañé tanto que tuve miedo a que tú me dañaras más.

No me sirve un mundo perfecto,
Yo ya me acostumbré a tus defectos.
Me gustan tus hilos,
Pero no estoy lo suficientemente roto como para dejar que tú me zurzas.
Mira mis pesadillas y dime que no has soñado conmigo.

Te acompañaré cuando te vayas y ataré un hilo a tu dedo a pesar de que yo mismo vaya a cortarlo.
Te culparía por todas mis grietas pero tus manos se ven muy bien en ellas.
He estado en cuatro infiernos y mi favorito es el que está entre tus labios.
Te culpo por quemarme:
Con una mano te señalo mientras que con la otra sujeto los cerillos.

Pidiéndote que te vayas cuando me pongo en medio del camino.
Pidiéndote que te vayas aun sabiendo que iré contigo.
Soy tan inestable y tú eres antónimo de estabilidad,
sinónimo de dependencia emocional.

Mientras más cerca, más quemas.
Mientras más tiempo, más cenizas.
Me despido mientras tapo tus oídos.
Te abrazo mientras amarro tus brazos.
Mi piel es de caliza y tus manos son cinceles.
Mis manos son de tijeras y tu rostro de papel.

Entre tantas oportunidades, irme era mi mejor opción.
Entre tantas opciones no tenía la oportunidad de escoger alguna.
Yo era el sol después de un eclipse,
Alejándome sabiendo muy bien que nos volveríamos a encontrar, aún sin saber cuándo.

Durante la eternidad mis ojos seguirán diciendo "no te quedes"
Y mi alma no dejará de sujetarte.
Esta inestabilidad golpea tu mente como la basura espacial golpea a la luna.

- Montes de Oca