Otra forma de morir.

127 6 0
                                    

—¿¡Porqué no te defiendes!? ¡Dios! ¿¡Tan inútil eres!?— Preguntó con enojo y posiblemente hasta desesperación la madre de la azabache al verla llegar a casa con hematomas y un ojo morado,varios raspones algo profundos,posiblemente ya infectados por la suciedad del entorno,esta simplemente se mantenia cabizbaja mientras portaba sus gafas de cristales gruesos en sus manos,los cuales,uno de ellos,estaba roto.

—Supongo que..ya me acostumbre a que me hagan este tipo de cosas,ademas,si ellos me pegan,y yo les devuelvo el golpe,ellos me lo volverán a devolver aun mas fuerte y yo seré la que acabará perdiendo..— Dijó la azabache mientras su progenitora la miro peor,pues esa escusa la había escuchado cientas de veces salir de la boca de su hija,la adulta responsable de la menor,simplemente suspiró cansada de todo y llevó a su hija al salón para ahí,poder curar y desinfectar todas las heridas que esta tenia,minutos antes,la chica narró como un grupo de compañeros de clases,la tiraron escaleras abajo.

Historias Cortas Para LlorarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora