Capítulo Siete

1.9K 203 29
                                    

— Vaya, ¿De verdad pasó todo eso? — Habló la peli-rosa mientras observaba impactada a su amiga.

— Perdón por molestar tan tarde, pero no sabía que más hacer, en estos momentos tú y Boruto son las personas que más me apoyan — La chica hablaba entristecida mientras miraba decaída la pequeña taza con té de canela dentro.

— Lo entiendo y agradezco que te habras así conmigo, eres mi mejor amiga y sabes que puedes contar conmigo para lo que sea, pero... ¿Qué no esto deberías hablarlo con Naruto?

Hizo un pequeño puchero, tomando un sorbo del líquido y mirando a Sakura después del acto.

— Lo sé, pero en estos momentos yo... — Calló unos momentos para evitar llorar — No quiero hablar con él — Se recostó sobre el sillón, tapando su rostro con la almohadita rosada a juego.

— Entiendo tu sufrimiento, nuestros maridos nunca están en casa, no les importa sus hijos y parece como si ya no nos amaran. — Susurró lo último, ambas sintieron que las ganas de llorar aumentaban.

— Bueno, supongo que por ahora no hay otra cosa que hacer, ¿Te parece si vamos a tomar con las chicas? Debemos olvidar esto, además podemos encargar a nuestros hijos con Konohamaru o Kakashi-sensei— dejó la tazita sobre la mesa, para mirar a su amiga.

— Claro, ¿Te parece si vamos mañana? Debo avisarles a las demás para pasarla de maravilla — Su sonrisa apareció una vez más.

______ asintió con los ojos cerrados, mientras abrazaba a su amiga-hermana de toda la vida.

— Gracias, Sakura —La puerta se abrió, dejando ver a los hijos de ambas entrando con una expresión cansada.

— Hola mamá, hola tía ______ — Saludó la pequeña Uchiha, mientras pasaba por la sala y la cocina para abrir el refrigerador.

— Hola Sarada, hola Boruto — Saludó a su hijo, el cuál venía directo hacia ella para abrazarla y darle un suave beso en la frente.

— Hola mamá, hola Tía Sakura — La oji-verde saludó con la mano al muchacho rubio. Sin duda era idéntico a su padre.

— ¿Te parece si ya nos vamos mamá? Tenemos cosas que hacer — Tomó la mano de su mamá, ella asintió y se despidió de las dos Uchihas que se encontraban en la casa.

— ¡Nos vemos mañana, adiós! — Cerraron la puerta con seguro, para caminar con calma hacia su casa.

Al salir, podían deleitar a todo su esplendor la torre del hokague, en dónde se encontraba la razón de la tristeza - felicidad de ambos Uzumaki's

Se quedaron ahí unos momentos, mirando tristes hacia arriba. La chica cerró sus ojos, respirando despacio para evitar llorar.
Una mano la guío hacia adelante, miró a su hijo quien mantenía una mirada alegre.

— Anda mamá, está por llover, no vale la pena llorar por él.

La madre lo miró sorprendida, ¿En qué momento su hijo había madurado tanto?

Sonrió de lado y asintió — ¡Tienes razón, perdóname! — Corrió sin soltar su mano — ¡Unas carreras hasta la casa!

Sonrió de lado y asintió — ¡Tienes razón, perdóname! — Corrió sin soltar su mano — ¡Unas carreras hasta la casa!

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 04, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

❀𝑺𝑬𝑪𝑹𝑬𝑻𝑨𝑹𝑰𝑨❀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora