La luz del medio día resaltaba los frescos colores de los árboles. El aire soplaba de manera agradable y con ayuda de una capa que Panda encontró, Yui pudo sentarse en una banca fuera de la cabaña para seguir admirando el paisaje sin ser afectada por los mismos rayos del sol. Como es bien sabido, los lobos Alfa se resguardan durante el día, por lo que Yui no conocía el bosque de otra manera, hasta ese momento.
—De verdad, este lugar es muy tranquilo —dijo Yui sin apartar la mirada del paisaje—, me gustaría quedarme aquí para siempre.
—¿Verdad? —le respondió Panda, con una agradable sonrisa.
Ambos siguieron relajándose por la tranquilidad de la cabaña; sin embargo, el hecho de que una joven Alfa estuviera lejos de su clan llamó la atención de Panda. La mayoría de los lobos, sin importar su clan, siempre andaban en manada, y con excepción de su amigo Toge, quien era un lobo desterrado. No era normal ver a un lobo solitario. En este caso, loba solitaria.
— ¿Yui?
—¿Huh? ¿Qué ocurre Panda? —respondió la chica.
—¿Cómo es que llegaste al bosque? ¿Ocurrió algo con tu clan?
Al principio, el semblante de la chica permaneció tranquilo, pero al escuchar la pregunta, Yui abrió los ojos con sorpresa. Durante gran parte de la mañana y gracias a la plática que ella y Panda tuvieron a la hora de la comida, Yui se había olvidado por completo de lo ocurrido la noche anterior. No obstante, la misma pregunta le hizo recordar el amargo momento que pasó con su hermano Megumi.
—Pues... No fue nada —respondió Yui, desviando la mirada y mostrando un colmillo en forma de disgusto—. Solo una pelea familiar. ¡Y todo por un matrimonio arreglado!
—¿Matrimonio? —dijo Panda, con curiosidad.
—Así es. Mi padre y otro el líder Alfa llegaron a un acuerdo de que yo debía casarme con el hijo del otro clan, ¡que absurdo!
—Que extraño. Pensé que los Alfa podían escoger con quien casarse. Por eso son los lobos de más alto rango.
—Esta ocasión es diferente —respondió Yui, calmando sus nervios, al mismo tiempo que respiraba profundo—. Después de que mi padre me dijo que había arreglado mi matrimonio, tuve una pelea con mi hermano y escapé de la guarida. No fue la mejor decisión, pero es por eso que terminé en el bosque.
Sentado junto a la joven Alfa, Panda notó que la expresión de la chica se tornaba triste y cabizbaja. Muy similar a la primera vez que Panda conoció a Toge. De verdad, la situación que Yui tenía con respecto a su clan no era para muy agradable. Así que, gracias a su experiencia propia, Panda ya sabía como solucionar aquel posible disgusto.
—Ya veo —respondió Panda, manteniendo su tranquilo y calmado semblante—. Si lo deseas, puedes quedarte en aquí en la cabaña.
—¿Eh? —musitó Yui, asombrada por el amable gesto de Panda.
—Es muy probable que regreses con tu clan, pero puedes estar aquí el tiempo que desees —concluyó Panda con una humilde sonrisa.
—¿Lo...Lo dices enserio?
—¡Por su puesto! Todos merecen un lugar a donde pertenecer —afirmó Panda, dándole a Yui pequeños golpecitos en su espalda—. Así que puedes quedarte con nosotros, el tiempo que quieras.
Sin creer lo que había escuchado, Yui se quedó bastante sorprendida. Desde que ella huyó de la guarida, su corazón se sintió triste y desorientado. Sin un lugar seguro a donde ir. No obstante, las palabras de Panda parecían haberla reconfortado, resaltando que lo más importante eran las personas con las que ella se encontrara y sintiera segura.
—Muchas personas del pueblo dicen que es una cabaña pequeña, pero podemos hacerte espacio... —continuó Panda.
—¡Pues las personas del pueblo se equivocan! —exclamó Yui, levantándose de golpe de su asiento—. ¡Este es el mejor lugar para vivir y será un placer vivir aquí con ustedes!
Panda se asombró por el cambio audaz en la actitud de Yui. Su postura era recta y mirada decidida, demostraban que ella hablaba enserio. El tiempo que Panda y su amigo Toge tenían ayudando a los demás, ellos solían encontrarse con todo tipo de personas; sin embargo, el caso de Yui era diferente. Más que ayudar a una desconocida, ayudaron a una nueva amiga. O eso es lo que Panda pensó, al sentir como Yui le transmitía de su fuerte energía.
—De verdad me agradas, Yui —le sonrió Panda—. Para celebrar tu bienvenida, iremos por algo de comer muy especial, ¿has probado las moras silvestres llamadas Acashia?
— ¿Acashia? Nunca había oído de ellas —respondió Yui, mirándolo con extrañeza.
—Vamos. Conozco un lugar donde podremos encontrarlas.
—Se escucha muy bien, pero el sol parece un gran impedimento.
—No te preocupes. La capa de Toge cubre muy bien los rayos del sol. Procuraré irnos por la sombra de los árboles dentro del bosque para que no te lastimes.
Panda se levantó de la banca, caminó unos cuantos pasos, y luego volteó hacia Yui. Al principio, la chica se veía dudosa, ya que conocía el dolor que el sol podía causarle al entrar en contacto con alguna parte de su piel; sin embargo, el apoyo de su nuevo amigo Panda hizo que Yui se armara con un poco más de valor.
—No te preocupes, puedes estar segura que la capa de Toge te protegerá —dijo Panda, mostrando una confiada sonrisa—. No queremos que se acaben las moras, ¿o sí?
La chica volteó hacia la prenda que la cubría de pies a cabeza, y pasó sus dedos sobre ella. Fue entonces que Yui notó el grosor de la tela. Muy suave al tacto y no dejaba pasar la luz debido al tono azulino, brindándole total seguridad a la chica.
—Vamos —dijo Yui, dando el primer paso.
—No puedo esperar a que conozcas a mi amigo Toge —dijo Panda, prosiguiendo con su camino—, él también hizo la misma cara cuando usó esa capa por primera ocasión. Creo que ambos se llevarían muy bien.
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La hija del Alfa / OC X Toge Inumaki
FanfictionLa manda de los Omega se ha revelado por completo atacando al clan Zenin. En el reino de Kaisen existen 4 clanes Alfa: Fushiguro, Gojo, Zenin y Sukuna, quienes pensarán una estrategia para mantener su poder, y debido al ataque de los Omega, uno de l...