Pequeños problemas

Un dia con Criz

Ese día estaba jugando en el salón con mis amigos después de que mi hermano mayor me dejara en la escuela, Fabián no dejaba de gritar qué las niñas olían a popo, lo cual me daba mucha risa, mientras Carlos no dejaba de estar bajándose su pans para presumirnos sus nuevos calzones de súper héroes, a mí me gustaron mucho porque tenían a iron man lanzando rayos de luz y los míos por lo regular eran algo más infantiles con dibujos de animalitos.

Cuando apenas íbamos a jugar a las luchitas la maestra Luz María abrió la puerta y comenzó a aplaudir, lo cual significaba qué teníamos que sentarnos en nuestros lugares pues era su regla, si ella se sentaba en su cilla y algunos de nosotros estaba aún de pie y fuera de nuestro lugar nos castigaba asiendo planas en nuestra libreta escribiendo "No debo estar fuera de mi lugar", además de mandar una nota a casa donde mi mamá tendría que firmar mi mal comportamiento y eso significaba un castigo

Así que corrimos a toda velocidad, pero cuando iba a mi lugar Carlos me piso y se me salió mi tenis el cual quedo abajo de una butaca, quise regresar pero la maestra ya estaba a punto de sentarse y mejor decidí sentarme porque no quería regaños hoy, así que tome asiento y hay estaba ahí sentado con mi pie descubierto mostrando unas de mis Calcetas favoritas de Ben 10, Cuando la maestra tomó a ciento nos dijo que tenía una sorpresa.

-Buenos días mis niños les tengo una gran sorpresa - dijo con una sonrisa en su boca - hoy vamos a tener un nuevo compañero, así que quiero que todos ustedes se lleven bien con él.

Yo y mis amigos gritamos al mismo tiempo " si maestra" y fue cuando la maestra llamo a un niño bajito que entro con una mochila nueva a su espalda con diseños de héroes en pañales.

-Vamos Erik entra - mueve las manos- no seas tímido hijo vamos...

Al abrir la puerta entro era un niño que parecía tener también 6 años quizás 7 no lo supe aun, lo que si vi que tenía una cara de que quería llorar, así que la maestra lo obligó a que se parara enfrente y dijera su nombre frente a todos

-Hola me llamo Erik - dijo con una voz qué apenas logramos escuchar mientras su mirada se clavaban en el piso - espero nos llevemos bien...

Aunque no escuchamos bien Erik se puso muy rojo y vi que le temblaban las piernas, fue cuando uno de mis amigos comenzó a gritar...

"QUIERE LLORAR"

Todos comenzaron a hacer lo mismo, puede ver como la cara de Erik se ponía roja y estaba a punto de soltar sus lágrimas, a mí me enojo mucho eso y antes de que la maestra pusiera orden yo grite muy fuerte.

-CÁLLENSE TODOS! no sean malos con él, es nuevo y no debemos de burlarnos- me levante poniéndome de rodillas en la banca

Todos mis amigos se callaron y bajaron la cabeza por un momento, en ese momento la maestra hablo

-Niños Christopher tiene razón, Erik es nuevo y debe sentirse como en casa, él es un amigo más así que trátenlo bien ok- de pronto se giró hacia mí,- y tu Erik vuelve y toma a ciento por favor

-Si Miss - Dijo en voz baja

Erik estaba buscando con su mirada un asiento vacío mientras caminaba despacio, fue cuando el desvío su mirada hacia abajo en una butaca y se agacho, después se levantó y camino hacia dirección mía, se paró frente a mí y extendió su mano entregándome mi tenis de policía.

-Toma creo que esto es tuyo - extiende le mano-

- Y como sabes que es mío - entrecerré mis ojos

-Pues eres el único que le falta uno - se ríe mientras saca su lengua - o me equivoco?

-Pues no - lanzó una pequeña risita- gracias y si quieres puedes sentarte en el asiento de atrás de mí, esta vacío

-Muchas gracias, por cierto me llamo Erik - sonríe-