Cap 5

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"Ahn... A... mity... ah..."

La punta finalmente entró en su coño después de que la chica lobo tuvo que calmar el increíble entusiasmo que no la hacía apuntar bien a la entrada de Luz.

No podías culparla después de que Luz había accedido a unirse a ella para tener sexo y su cola había decidido tener una mentalidad propia ondeando por todos lados feliz por este cambio en su relación.

Luz se retorció por la penetración después de que Amity bajó la cadera lo suficiente como para penetrar dentro y envolvió sus piernas alrededor de la cintura de Amity sintiendo el suave pelaje con sus muslos.

Ambas se habían deshecho de sus pantalones de dormir y los habían tirado en algún lugar de la habitación.

"Luz..."

Empujó más profundo saboreando la sensación de expansión que las paredes internas de Luz le estaban dando, pudiendo sentir la forma en que la morena temblaba bajo el peso de su primera estocada lenta y suave.

Su polla se hundió hasta la base, y Luz suspiró en su oído peludo.

"Amity... me gusta..."

Y la niña lobo estuvo a punto de derretirse en el calor de Luz. Sus peludos brazos se apoyaron en la cama rodeando el delgado cuerpo que tenía debajo, Amity empujó sus caderas nuevamente para hacer temblar a la chica.

Su penetración fue recibida y expresada en un gemido erótico de Luz.

Las piernas de Luz envueltas alrededor de su cintura, por encima de su cola que se movía lentamente al ritmo de sus caderas, ayudaron a Amity a no poder despegarse y alejarse del coño de Luz. Y a la chica lobo no le importaba no volver a alejarse de ella.

Amity observó el rostro jadeante de Luz debajo de ella. Sus ojos cristalinos, mejillas que a pesar de la oscuridad estaban visiblemente sonrojadas y la boca abierta buscando más oxígeno. Era imposible que Amity no se sintiera tentada, así que se inclinó sobre el rostro de Luz para capturar esos labios en un beso.

La chica jadeante correspondió el beso hasta el momento en que sintió la suave boca en sus labios, inclinó la cara y pasó la lengua por los dientes rozando el colmillo superior de la chica lobo. Amity se emocionó abriendo la boca para dejar entrar a la chica en su boca, las lenguas se juntaron y rodaron entre sí dándole nuevas sensaciones de humedad al húmedo beso.

Sus caderas revolotearon de nuevo en un nuevo empuje y Luz gimió en el beso.

El beso se rompió, Amity quiso acelerar sus penetraciones con un ritmo más desenfrenado y Luz tuvo que agarrarse a las sábanas detrás de su cabeza para recibir las intensas penetraciones de la chica.

Las paredes se expandieron alrededor de la circunferencia de Amity y se retorcieron cuando la punta tocó el fondo del coño. El movimiento se repitió una y otra vez con la chica lobo jadeando.

"Luz... eres tan estrecha..."

Cada vez que Amity hundía su punta hinchada profundamente en el coño de Luz, podía sentir temblar todo el cuerpo de la chica. Luz pasó sus manos dentro de la camisa de la chica lobo acariciando el suave pelaje de su espalda mientras su gordo eje la penetraba con fuerza.

"Sí... Amity... no te detengas..." respondió Luz sin aliento.

Amity tomó las caderas de la chica para poder penetrarla más fácilmente y su eje endurecido alcanzó la máxima embestida posible.

"Luz... creo... que estoy a punto de correrme..."

Su punta se hinchaba dentro de Luz y podía sentir la inevitable sensación de liberación en su pene.

Con un lobo en casa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora