Conociéndote [Adaptación Lumity]

Capítulo 05

Me encontraba en mi hogar preguntándome como rayos me había encontrado, apenas había tenido el tiempo suficiente para arreglar el departamento luego de cerrarle la puerta en la cara por la sorpresa, "Luz Noceda está en mi departamento" era lo que se repetía en mi mente mientras veía que tomaba un sorbo de agua que le ofrecí y a la vez observaba detalladamente el lugar al que llamo hogar.

Tenía mi expresión de siempre, no quería que notara lo sorprendida que estaba al encontrarla frente a mí puerta o lo nerviosa que me ponía por tenerla enfrente mío mientras me analizaba. "Eres muy amargada, ¿te lo han dicho?" sonrió a la vez que una de sus cejas se arqueaba, a simple vista parecía la típica gruñóna aburrida pero sinceramente solo me considero como alguien reservada y estudiosa, si eso era ser amargada, entonces si...soy muy amargada.

"Me sorprende que alguien con esa expresión en su rostro me haya consolado" habló con timidez, vi como miraba el vaso pasando delicadamente un dedo en el borde de este, "necesitabas un hombro y yo estaba disponible" contesté mientras llevaba mi taza de té a la boca, me gustaba cerrar los ojos para disfrutar el sabor y esta no era una ocasión diferente.

"¿Quisieras ser mi amiga?" Eso me sorprendió, dejé con cuidado la taza en la mesita que estaba enfrente y la miré, cómo ella...quien al inicio no recordaba tan siquiera mi nombre, ahora quiere que sea su amiga.

La miré con sumo cuidado notando que la ponía nerviosa, supongo que mi expresión era demasiado seria y cuestionable. "Mis amistades...son muy falsas, además de que todos son amigos de él, no he hablado con ninguno, tal vez le den la razón y lo apoyen" me paré del sofá dirigiéndome a la refri para sacar de allí un trozo de pastel de chocolate, aunque el plan era comerlo mientras estudiaba, pero suponía que ella lo necesitaba más que yo.

"Puede que te equivoques, que sean sus amigos no significa que no le hayan llamado la atención por su traición, no te lo mereces" dije, coloqué el pequeño plato en la mesita con una cuchara, agradeció tomando el plato y llevándose uno por uno cada bocado disfrutándolo, sonreí al ver aquellas expresiones de dulzura y satisfacción en su rostro, se veía muy tierna...parecia irreal.

"Eres muy linda, gracias" asentí con la cabeza llevándome la taza de té a la boca, otro silencio incómodo se había adueñado del ambiente, miré detalladamente su rostro, a mi parecer era perfecta, los rayos del sol pasaban por la ventana cercana haciendo brillar aquel mechón lila que tanto adoro. "Como sabias donde vivo" pregunté con intriga, mis amigos los cuales veía de vez en cuando en algunos de los descansos, no sabían dónde vivía debido a que no me gustaban las visitas inesperadas. "Mi padre es el director" aunque eso no me lo esperaba no mostré reacción alguna, solo me limité a seguir tomando el té que estaba por acabar.

"¿No estas sorprendida?" hija del director, la gran cosa no era, pero eso me daba más razones para no hacer nada al respecto sobre mis sentimientos, más a un volverme su amiga, aunque dolía ser una desconocida para ella, era más cómodo que tenerla enfrente y ser víctima todos los días de su belleza.

"Algún día serás mi perdición" pensé mientras me levantaba de nuevo para dejar mi taza en la cocina junto con el vaso ya vacío de mi invitada, "porque habría de estarlo" respondí mientras volvía a sentarme enfrente suyo, podía ver confusión en su mirada, así que dí por hecho que a su supuestos amigos si les sorprendió dejando que ella se cuestione los verdaderos motivos por los cuales ellos están con ella. No pasó mucho pero ella me sonrió "Quiero que seas mi amiga" repitió pero esta vez con una sonrisa, me incliné hacia atrás mirando el techo, "no" respondí acomodandome en mi asiento, ella se enderezó, suspiró y luego se despidió no sin antes agradecerme.

El amor es complicado..
No se como actuar pero se que debo cumplir mis metas primero antes de distraerme con el.