Capítulo 2

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Ultimo día de clases


Mi prima ya estaba estudiando la universidad y eso hacía que no tuviéramos el mismo calendario, pero hoy sería su ulmo día por lo cual su gran idea era que la acompañara. No estaba tan lejos la universidad de su vecindario, así que decidí acompañarla en lugar de ver a mi madre y a mi tía platicando y saliendo de compras, si compras de señoras.

Llegando a la universidad vi un ambiente totalmente diferente al que solía ver, los alumnos estaban fuera de sus salones, muchos sentados en el césped del instituto, la cafetería estaba llena, y las canchas de fútbol estaban llenas de testosterona, me sorprendió que Alissa no entrara a ninguna aula.

— ¿Por qué no están entrando a sus aulas? — Dije algo confundida

— Porque es el ultimo día y a los maestros no les interesa que estemos afuera — respondió con tanta calma.

Y seguimos caminando hasta las gradas de la cancha donde vimos a una volita de personas riendo y jugando, y en eso escuche como gritaban el nombre de mi prima.

— ¡Ey! Ahí vine Alissa — Dijo un chico con aspecto de niño bueno

Mi prima me miro y dio una pequeña risita, nos acercamos a los chicos y mi prima empezó a saludarlos. — Miren chicos, ella es mi primita Olivia — me acerco a ellos y podía ver como las miradas caían sobre mí. Un chico de risos me miro y dio una sonrisa de lado para así jalarme y sentarme a un lado de él y mi prima, — Y bien Olivia, ¿Qué tal te la has pasado? Una chica de ojos color miel me pregunto. — En realidad llegue ayer por la tarde, y no he conocido bien la ciudad. — dije algo apenada. — Pues no te preocupes por eso, que saliendo de aquí iremos a un lugar que te encantara. — dijo la chica y empezamos a hablar de cosas sin sentido, me estaba divirtiendo, y a pesar de que eran chicos mayores que yo seguía siendo tan cómodo el poder reírme y entenderme. Tenía una percepción muy distinta de la vida y pensaba que cuando fuera a la universidad seria lo suficiente madura como para poder afrontar la vida de adulto que tanto miedo me daba, pero al parecer estaba equivocada, podía seguir siendo una persona divertida y quizás igual que en la preparatoria, solo que con un poco más de estrés.

Al terminar de charlar llego un chico que vestía un poco distinto a los demás, y se dirigió ante Eric el chico de los risos, me causo algo de confusión cuando vi que se pararon de las gradas para así empezar a caminar, confundida los empecé a seguir.

— ¿A dónde vamos? — le dije a mi prima y ella me respondió — Al lugar que Jazmine te dijo hace rato. — respondió y me tomo del brazo para que camináramos juntas. Me parecía algo extraño ya que ese chico se veía de mala pinta, como si nos fuese a secuestrar a todos, pero con autorización.

— Oye, y ese sujeto ¿Quién es? — le dije jugando con un mechón de mi cabello. — Él es Jasper, es amigo de Eric, y nos llevara a un lugar creo que abandonado. — sin miedo alguno mi prima me respondió. — ¿Y no nos meteremos en problema en casa? — Obvio no Oliva, estas conmigo y nada te pasara. — Dijo algo desesperada por tanta pregunta que le iba haciendo.

Al llegar al punto en el que se supone que no había nadie, porque era algo privado, entramos por la orilla de una reja, era un rio, fresco y a la vez pequeño, no había señal de alguna persona y empezaba a ver como se quitaban la ropa, sin problema alguno, cuando vi que Eric le dio un beso en la boca al tal Jasper entendí todo, eran pareja. Paso la tarde tan rápido que no me quería ir, risas tras risas eran las que salían de mí, el ver a mi prima tan feliz y ver como era parte de algo, me hacía saber que si era como lo pintaba en sus redes sociales y solo por esos momentos estaba tan contenta, terminamos todos acostados en una sabana viendo como el sol se metía, voltee para ver a mi prima y con un rostro en su sonrisa me miro, sentí tanta calma, la calma que estaba buscando por tantos meses, decidí que seria feliz y que no dejaría que la tristeza arruinara estos momentos, que no solía tener a diario.

 El celular de mi prima sonó y era mi tía la cual estaba preguntando en donde estábamos. 

Al pasar los minutos nos despedimos de los amigos de mi prima, y algo me decía que no seria la ultima ves que los vería, me habían agradado tanto, pero ya era hora de que llegáramos a casa.

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𝗦 𝘂 𝗺 𝗺 𝗲 𝗿   (BORRADOR  NO TERMINADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora