Mi nombre en su boca era como música para mis oídos, sentí como una corriente eléctrica hasta llegar al éxtasis total.
— Yo también te extrañe, Bright— en ese momento sentí como llegaba al orgasmo mientras me besaba con fuerza para que no pudiera gritar.
Después se separó y puso su cabeza en mi hombro, sentí su tibio aliento en mi piel, él me abrazó mientras trataba de controlar su respiración al igual que yo.
— Ya deberíamos regresar al desfile— dije en voz baja.
— ¿Siempre eres así de responsable?— replicó en tono serio.
— Incluso más.
— Escapémonos, te aseguro que nadie se dará cuenta.
— Ni pensarlo, tengo que estar aquí.
— Por favor, vamos.
— ¿Siempre eres así de terco?
— Incluso más.
— En serio debemos regresar, para mí es trabajo y mi jefe está aquí— insistí poniendo mis manos en su pecho obligándolo a separarse, aunque sentí un vacío enorme cuando finalmente salió de mí.
— Está bien, tú ganas esta vez— dijo separándose, subiéndose el pantalón mientras me entregaba mi ropa interior.
Nos arreglamos las ropas en silencio y le dije que yo saldría primero, no estuvo muy de acuerdo, pero aceptó. Abrí la puerta y me asomé sigilosamente, me dispuse a salir de ahí y Bright me dió una cariñosa nalgada que me hizo sonrojar, no quise voltear a verlo porque seguro aceptaría escaparme con él y tenía que recordar que estaba en horas de trabajo. Me fui directo al baño, me miré al espejo y una amplia sonrisa había en mis labios, él había dicho mi nombre y yo el suyo, no habían más reglas y eso me entusiasmaba de sobre manera, aunque en realidad no sabía que pasaría de ahora en adelante.
Llegué al salón y ocupé mi lugar, pocos minutos después llegó Bright muy sonriente y se sentó al lado de Tu, ella se recargó en su hombro, eso no me agradó mucho, esos dos tenían algo, era demasiada la confianza que se tenían y el acercamiento, ahí entendí que no debía emocionarme más de la cuenta y si seguíamos teniendo algo él y yo, sería oculto, sin que nadie lo supiera.
La presentación terminó y me encontré a Kulap.
— ¿Dónde estabas Win?— preguntó inquisidoramente ella.
— Fui a la cocina, para ver si todo estaba en orden.
— Que raro, yo fui allá y no te vi.
— Es que también fui al baño.
— Ah, vale— respondió no muy convencida.
Moví la cabeza negativamente cuando la vi ir a saludar a un chico que la miraba, yo me acerqué a la mesa y busqué algún bocadillo que no estuviera mezclado, pero como no encontré ninguno tomé un pedazo de queso y le di una pequeña mordida.
— ¡Uff! No hagas eso en mi presencia... Me trae muy gratos recuerdos— dijo Bright detrás de mí y casi me atraganto, tomé una copa y bebí.
— Quieres provocarme un infarto, ¿verdad?— exclamé dándome la vuelta para encararlo.
— Tú también a mí, no tienes idea de lo sensual que te ves comiendo.
— Estás loco— dije mirando hacia el techo.
— Puede ser, pero... ¿Acaso no te fascina?— exclamó guiñándome un ojo.
— Pero, ¿ustedes se conocen?— dijo de pronto Pear, la modelo y cara del perfume, parándose frente a nosotros y no supe que decirle, entré en pánico al pensar que hubiera escuchado el comentario de Bright, pero pensé que no tendría esa sonrisa en el rostro.
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¿Estás libre esta noche? | BrightWin | Adaptación ✔️
FanficTres simples reglas a seguir: #1. No nombres. #2. No preguntas personales. #3. No lazos afectivos. Son las indicaciones que el desconocido da a Win en su primer encuentro, pero... ¿Para ambos será igual de simple seguirlas al pie de la letra? I M...