Heather.

Capítulo 4: Quisiera Ser Ella.

Capítulo 4: Quisiera Ser Ella.

.

A Robin le costó un montón aceptar que le gustaba Chico Flash tanto como en algún momento le costó entender que el amor que le tenía a Starfire no era correspondido.

Es que una cosa es enamorarse de una chica y otra muy diferente fue comprender que le gustaba un chico. Alguien de su mismo género y Robin no se cree gay.

Solo quiere a un chico de forma romántica no al resto de la población masculina de la ciudad.

Nunca fue una persona perfecta por más perfeccionista que intentó ser. Jamás logró tener al equipo con el que soñó pero tenía amigos que por ratos dudaba que lo fueran. No consiguió tantas cosas y para sobrevivir entre las personas de aquella torre y mantener su autoridad que cada cinco minutos cuestionan tuvo que cambiar su personalidad.

Más enojón. Más estricto. Más rebelde. Más exigente. Y hubieron muchos más de más que no fueron en lo absoluto positivo.

Pero con él, con ese idiota pelirrojo, sentía que cambiaba y para mejor. Que entre bromas y peleas hacía que quisiera ser una persona diferente. Alguien al que se sienta orgulloso de tener en su vida. Cómo una de sus primeras opciones para hacer cualquier bobada.

Y todo es por él.

Piensa que le gustaría confesarle sus sentimientos a Chico Flash mientras juega uno de los videojuegos de carreras que les robaron a Chico Bestia.

Lleva la delantera y el pelirrojo se queja de que está haciendo trampa para no quedar humillado ante su inevitable derrota.

—¡Rob, eso no es justo! —le grita Chico Flash y eso hace que su sonrisa se amplíe junto a su ego.

—¡Solo acepta que voy ganando, viejo! —le contesta y acelera en el videojuego.

Se distrae un segundo para mirar a su contrincante ¿De que le serviría declararse? Posiblemente no le corresponda porque vamos, él no tiene nada de lo que ese velocista busca. No es tranquilo, ni divertido y pelea por cualquier cosa. Es obsesivo y las personas pueden enumerar con facilidad todos sus defectos sin sacar ningún aspecto positivo.

Entonces, ¿Por qué tan siquiera llegaría a besarlo?

—¡Gane! —Grita Chico Flash restregando le la victoria.

Entonces recuerda que estaba jugando algo y, para colmo, perdió.

Quizás lo que le causó unas feas ganas de llorar fue el hecho de que perdió y no el que no tenga nada que ofrecerle a su amigo pelirrojo. Quizás quisiera ser como Starfire, ella parece ser perfecta para él.